¡Parensé, por favor!

Aprender Stand up, ¿realmente se aprende? Claro que sí, hay muchas personas que lo hacen. En la ciudad de La Plata existen escuelas donde se dictan clases de este nuevo género para la Argentina.

Mercedes Talpone estudió esta nueva forma de humor y nos cuenta como lleva esta práctica. Actualmente es profesora de inglés, y ejerce el stand up a modo de diversión, según su relato es más difícil estar frente una clase de alumnos que frente a un público que no conoce. Si bien siempre le gusto todo lo que implique el humor nunca había pensando en hacerlo, llegó a sus manos un flyer donde se convocaban a clases, un poco de curiosidad sumado a lo que una bruja le había sugerido sobre explotar su potencial artístico comienza a estudiar este género.

No se necesita escenografía ni mucha preparación para llevar un show de este estilo, solo herramientas creativas, un micrófono, y muchas ganas de hacer reír al público. Algunas personas utilizan la herramienta conocida como autocrítica que consiste en utilizar los defectos de uno mismo para que el público pueda identificarse con el humorista, ella dice que es “medio pelotuda”; otras utilizan sus relaciones amorosas y catalogan a cada persona con la que tuvieron alguna relación; otros deliran y imaginan situaciones totalmente locas que nunca podrían pasar. Existen miles de formas con las cuales hacer reír, lo que todas tienen en común es que necesitan una herramienta clave: creatividad.

A medida que se incursionó en el rubro se dio cuenta,que además de ir a las clases, hay producir un guión, y esto es una de las cosas que más le llamó la atención. “Me sorprendieron las pautas que existen para confeccionar uno”, y a esto le agrega: “siempre me gusto escribir”.

Por ahí es difícil encontrar una conexión entre el Stand up y la enseñanza del inglés, pero la alumna del género y la profe del idioma fusionaron algunas cosas. “En las clases me surge lo gracioso, lo más desenvuelto”.

se considera que los primeros maestros fueron los presentadores de radio en Estados Unidos. entre 1950 y 1960 surge una nueva generación de comediantes que empieza a explorar temas políticos, raciales y humor sexual. En Argentina surge en el año 2000, cuando dos actores,Diego Weinstein y Alejandro Angelini deciden comenzar con este nuevo lenguaje escénico. por medio de esta técnica el comediante opina y satiriza sobre la sociedad en la que vive: hábitos, prejuicios, costumbres y creencias caen bajo la lupa del humor.

Mia aimé Gorosito