Muchos palestinos se niegan a regresar al campo de refugiados de Yarmuk mientras gobierne Asad
Los palestinos rechazan la supuesta invitación del régimen sirio a regresar a los campos de refugiados destruidos en las afueras de Damasco.
The New Arab, 13 de noviembre de 2018 — Después de que las fuerzas del régimen sirio destruyeran la mayor parte del campo de refugiados palestinos de Yarmuk, en las afueras de Damasco, el gobierno de Bachar al Asad está pidiendo a los refugiados que regresen.
“Hay países que siguen obstaculizando el regreso de los refugiados sirios y palestinos, a pesar de que el gobierno sirio facilita su retorno”, ha afirmado Faisal al Miqdad, viceministro de Asuntos Exteriores del régimen sirio.
El Frente Popular para la Liberación de Palestina — Comando General, que está aliado al régimen sirio, estuvo de acuerdo. “Hemos informado oficialmente a Siria del regreso de la gente a Yarmuk”, dijo Anwar Raya, portavoz del grupo.
Sin embargo, muchos otros siguen siendo escépticos en cuanto a las intenciones del régimen y su buena voluntad.
“El régimen está tratando de encubrir su papel principal en la destrucción del 80 por ciento de los hogares y la infraestructura del campo”, dijo Ayman Abu Hisham, coordinador general de Fatah, a The New Arab.
A finales de 2012, el régimen sirio comenzó a atacar el campo, lo que provocó el (segundo) desplazamiento del 75 por ciento de su población. Durante un asedio que duró cinco años, muchos huyeron hacia el norte de Siria, donde se enfrentaron a los bombardeos rusos.
“El régimen está tratando de ocultar la responsabilidad de estos crímenes al pretender dar la bienvenida al regreso de los refugiados palestinos”, dijo Abu Hisham.
“Pero, ¿cómo regresan a un campo destruido sin planes de reconstrucción? Un nuevo decreto emitido por el gobierno sirio a principios de este año pretende poner fin a la naturaleza de la zona como campamento palestino. Esas facciones [palestinas] que acogen con satisfacción el anuncio del régimen son cómplices de sus crímenes”.
En Siria hubo diez campos de refugiados palestinos. Ahora están en su mayoría destruidos.
“Más de la mitad de la población del campamento ha sido desplazada fuera de Siria y esta declaración tiene como objetivo presentar al régimen sirio como aliado de la resistencia palestina”, continúa Abu Hisham. “Pero la verdad es que el régimen ha hecho mucho daño a la causa palestina”.
Abu Hisham subrayó que un proceso similar estaba teniendo lugar en Deraa, donde también se obligó a los palestinos a abandonar los campos de refugiados y ahora supuestamente están siendo invitados a regresar.
“Hay un deseo real y fuerte de regresar al campamento, pero hay muchos obstáculos. Los que abandonaron Siria no se sienten seguros para regresar a las zonas controladas por el régimen por temor a ser enjuiciados, detenidos y asesinados. El régimen es responsable de la detención y asesinato de miles de palestinos. La gente no tiene una sensación de seguridad”, añadió.
“Incluso para los refugiados que han permanecido en Siria, la mayoría de las casas de sus campamentos están destruidas y los refugiados no tienen medios financieros para reconstruirlas. El régimen sabe que estas cosas impedirán el regreso de muchos refugiados, pero sigue haciendo su propaganda”, señaló.
“La solución para resolver la cuestión del regreso de los refugiados palestinos a sus campamentos y la reconstrucción de los campos destruidos consiste en derrocar al régimen que se ha convertido en el principal obstáculo en Siria, tanto para los palestinos como para los sirios”, dijo Abu Hisham.
“Reconstruir una patria siria libre para todos y para que los refugiados palestinos puedan vivir en paz con sus hermanos sirios […] los refugiados palestinos están comprometidos con el derecho de retorno a Palestina, pero Siria es una patria querida para ellos”, observó Abu Hisham.
Por último, añadió que, a pesar del apego de los palestinos a Siria, con el régimen de Asad siempre habrá problemas para los refugiados, y citó la captura del campo de Yarmuk por Daesh en 2015, antes de que el régimen retomara el control con el apoyo de la aviación rusa.
El refugiado palestino Nuredin Mohamed, que ahora vive en el norte de Siria, coincidió con los sentimientos de Abu Hisham.
“Dejamos nuestros hogares y ahora no tenemos nada”, dijo. “Amamos el campo como amamos a Palestina, pero fue destruido por el régimen de Asad, y huir fue la mejor solución para nosotros, así como para nuestros hermanos que fueron asesinados. Su sacrificio no será en vano. No malgastaremos su sangre estrechando la mano del criminal que los mató”.
Karam Alí, de 45 años, tampoco tiene intención de regresar al campamento bajo el régimen de Asad: “Sean cuales sean los sobornos ofrecidos a los palestinos y la tentación de la paz, al final sólo nos espera la muerte”.
Este artículo fue publicado originalmente en inglés en The New Arab y ha sido traducido por Javier Villate.