Del Excursionismo a tu Código
Seis elementos que ayudarán a tu equipo a tener una mejor experiencia en el desarrollo de software
Una de las pasiones en mi vida es el excursionismo. Desde muy corta edad mi padre solía llevarme de paseo a la montaña; aquellos recuerdos me impactaron debido a los paisajes tan imponentes que la naturaleza presenta y me llevaron a practicar esta actividad de una manera más seria y que hoy disfruto plenamente.
Otra de las actividades que más disfruto es el desarrollo de software. Quienes tenemos el privilegio de haber acumulado experiencia en esta rama, sabemos que esta actividad puede traer grandes satisfacciones profesionales a la vida, tales como el crear, innovar, ayudar a personas y empresas a facilitar su trabajo o procesos, etc. De esta misma forma lo hace el excursionismo.
Lo cierto es que tanto el excursionismo como el desarrollo de software, tienen un proceso con muchos paralelismos entre sí. Fuera de los esquemas tradicionales del desarrollo de software, hoy te compartiré, bajo mi experiencia, las etapas por las que identifico que pasan estas dos actividades que disfruto.
Sueño
- No me refiero a la necesidad de dormir, sino más bien al deseo no realizado de lograr algo. Muchas veces pensamos que las ideas que nos llegan repentinamente pudieran ser algo “locas”, pero es de suma importancia compartirlas con tu equipo. Uno nunca sabe cuándo esta idea “loca” pudiera convertirse en una potencial solución a un problema.
- Estar dispuesto a escuchar ideas “locas” de otros; sobre todo en un ambiente que presupone innovación es de suma importancia. Cuando el “sueño” es de otro y están trabajando en conjunto, puedas adoptarlo como tuyo y aportar al cumplimiento o mejoramiento del mismo.
Así fue cómo surgió una de mis más recientes excursiones. Cierto día en una reunión con amigos con quienes practico el excursionismo, alguien dijo: “¿y si subimos la montaña con más altura de México?”. Todos nos miramos por un momento y enseguida reaccionamos apoyando la idea. Fue la idea de ese amigo quien sembró el sueño y el inicio de una aventura que nunca olvidaríamos. Subir el famoso pico de Orizaba.
Objetivo
- El fundamento para un proyecto, cualquiera sea, es el objetivo. Sabemos que existen objetivos más pequeños que se agrupan con el principal, pero es fundamental tener clara nuestra meta general en todo momento. Así evitas perder tiempo en asuntos que no son tan relevantes para llevar a cabo nuestra tarea principal.
Inmediatamente después que surgió la idea de subir el pico de Orizaba, todos comenzamos a aportar para generar las bases de lo que esperaríamos en ese recorrido. Investigamos sobre el sitio y determinamos que nuestro reto sería subir a una altura de 5,636 metros sobre el nivel del mar. Ahora éste se convertiría en nuestra meta a alcanzar. Una altura y en un entorno natural que nunca habíamos experimentado, con temperaturas por debajo de cero de hasta 15 grados centígrados. Con lo anterior teníamos ya marcado nuestro objetivo.
Preparación
Tres aspectos que normalmente no consideramos, pero que debemos tener en cuenta para el desarrollo de software son:
1. El medio de comunicación con el equipo: Hoy en día muchos colaboradores nos encontramos trabajando desde un sitio remoto. Por esto debemos tener medios de comunicación colaborativa efectivos. Valdría la pena siempre revisar si nuestros medios de comunicación actual son ideales para nuestras necesidades actuales y futuras.
2. Las tecnologías que emplearemos para desarrollar: Aunque en la mayoría de las ocasiones dominamos ya algún lenguaje de programación, siempre es bueno voltear alrededor y observar si es conveniente comenzar a explorar nuevas tendencias tecnológicas para aplicar en nuestro nuevo proyecto.
3. El entrenamiento previo: de manera natural solemos dar por hecho que contamos con la experiencia suficiente para crear un producto de software, y tal vez es cierto, pero omitir nueva capacitación nos llevaría a estancarnos. Es por eso muy importante que ante un nuevo reto analicemos nuestras habilidades, el conocimiento adquirido, y busquemos siempre brindar tiempo para inyectar entrenamiento a nuestras mentes.
Al prepararnos para subir el pico de Orizaba fueron precisamente estos mismos tres puntos los que nos ayudaron en el proceso. Teníamos una expectativa de aventura como nunca: viajar a otro estado de la república y subir a una altura nunca antes alcanzada por nosotros. Armamos inmediatamente un grupo en whatsapp para tener una comunicación más efectiva, investigamos sitios de hospedaje y vuelos; comenzamos a hacer las reservaciones correspondientes. Por otro lado también nos comenzamos a capacitar en el tipo de equipo y vestimenta que debíamos usar en ese ambiente frío. Realizamos entrenamiento en las montañas más altas de la región entre los que se encuentran el cerro del Potosí, el cerro de la Viga, el cerro de la Marta, entre otros. Nos reunimos en parques para hacer entrenamiento de cardio y fuerza en piernas, e hicimos sesiones de zoom para armar rutinas en casa cuando las condiciones no nos permitían entrenar físicamente juntos. La disciplina es siempre un determinante para alcanzar las metas.
Trabajo en equipo
1. La famosa frase de Michael Jordan: “El talento gana partidos, pero el trabajo en equipo y la inteligencia ganan campeonatos”, contiene un mensaje esencial en el desarrollo de software colaborativo. Definitivamente el trabajo en equipo nos es de mucha utilidad, ya que nos permite considerar distintas perspectivas y puntos de vista; para lograr esto se necesita establecer una buena comunicación. Esto se logra al enviar y recibir el mensaje correcto por alguna vía, como una video conferencia, un mensaje de texto, un audio o una llamada. Esto nos llevará a comprendernos mejor como equipo e ir guiándonos grupalmente sin desviaciones hacia el objetivo.
2. Otra de las ventajas que tenemos de trabajar en equipo es el aliento. Muchas veces la frustración de que las cosas no vayan saliendo como esperamos puede ser perjudicial para nuestro desarrollo. Sin embargo, una palabra de ánimo acompañada de apoyo técnico puede mejorar significativamente el rumbo del camino a la meta.
El día de subir el pico de Orizaba llegó. Tomamos nuestro vuelo, llegamos al aeropuerto de Puebla y el equipo de la agencia contratada ya nos esperaba. Llegamos al lugar del campamento donde comenzamos a aclimatarnos ya que la altura puede producir algunos estragos fisiológicos. Al acampar a más de 4,000 metros sobre el nivel del mar, la respiración comienza a hacerse más complicada. La primera noche es casi imposible dormir porque el corazón bombea con mayor velocidad y la sangre mantiene un flujo muy activo el cual es percibido por el cerebro, dificultando el descanso. Algunos presentan mareos, náuseas, dolor de cabeza, entre otros síntomas causados por la altura.
Después de un día de aclimatación, comenzamos en la madrugada siguiente el ascenso. Al inicio el guía nos advirtió que llegaría un punto donde pensaríamos que no podríamos lograrlo pero que no hiciéramos caso de esos pensamientos, que pensáramos en la meta. Y así sucedió. Llegando a los 5,000 metros el cansancio se dejó sentir, algunos sucumbieron y tuvieron que regresar; pero otros decidimos escuchar el consejo del guía experimentado, y comenzamos a animarnos unos a otros. No diré que fue fácil, pero sí se logró; después de algunas horas caminando por la parte más fría y alta de la montaña, ¡llegamos a la cumbre!
Disfruta la meta
1. Cuando creamos un producto digital, el tiempo se nos consume rapidísimo. Muchas veces terminamos un desarrollo y estamos ya arrancando el siguiente. Es importante que junto con el equipo puedan reconocer su trabajo y disfrutar que el fruto de su esfuerzo solucionó los problemas que habían identificado: Es gratificante tomar un momento de relax, de convivencia y de charla sobre “el camino” que los llevó a la “cumbre” y dar un respiro para el siguiente sprint. Esto inyectará nueva energía a todo el equipo.
Al llegar a la cumbre del pico de Orizaba podíamos ver alrededor de esa impresionante montaña. Nada podía estorbar nuestra vista, ya que no existe nada más alto que ese punto en todo México. El premio fue la satisfacción de llegar, de poder ver esos impresionantes paisajes, de disfrutar la imponente naturaleza desde esa altura. Guardé algunas fotografías de ese sitio, a continuación te comparto algunas de ellas:
Evaluar
1. Una vez que pasamos el tiempo de relax, debemos establecer un tiempo para retroalimentación. Todo proceso de desarrollo es mejorable, e invertir tiempo en identificar esas mejoras puede ser muy productivo. Deberíamos hacernos algunas preguntas como: ¿Qué cosas podemos mejorar?, ¿Cómo podemos optimizar el tiempo?, ¿Qué otras herramientas tecnológicas podrían facilitarnos el desarrollo?, ¿Qué cursos podrían subir el nivel del equipo para ser más eficiente?, etc. Realmente todo lo que sea identificado y atendido en cuanto a esos aspectos será para mejorar el rendimiento y por lo consecuente lo resultados.
Al descender del pico veníamos cansados, pero felices. Llegamos a un pueblo cercano a comer y reponer fuerzas y luego al lugar de hospedaje. Tomamos un baño reconfortante y nos sentamos a conversar, identificamos qué cosas pudimos hacer mejor, ya que a pesar de llegar a la meta debimos hacer cosas que pudieron facilitarnos el camino.
Tanto en el desarrollo de software como en el excursionismo pasamos por procesos a veces complicados, pero al final queremos repetir. Y qué mejor que al repetir experiencia vayamos mejorando la misma. Te invito a que apliques estos consejos simples con tu equipo y nos cuentes como te has sentido al hacerlo.
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