Sobre el intercambio equivalente

eduardo j. umaña
EDUARDIARIO
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3 min readFeb 26, 2015
Círculo de transmutación por Tom Greystone

Esta es una reflexión sobre “algo que aprendí viendo anime”, mas bien, “algo que aprendí viendo UN anime”.

Antes de empezar tengo que aclarar que no soy fan del anime, es mas, lo desprecio un poco. Soy sumamente selectivo con el anime que sí veo ya que más del 83% del anime es malo.

Ya sé que muchos van a defender las virtudes del anime, diciendo que es violento, erótico y que encierra reflexiones intrínsecamente humanas… A lo que responderé: no, el anime está lleno de clichés, estereotipos japoneses de cosas perturbadoras y misóginas, además de soler ser una gran fantasía masturbatoria adolescente tras otra.

Para ser justos, si he disfrutado de varias series y películas de anime. Muchas fueron parte de mi infancia, como Dragon Ball, y otras impactaron mi adolescencia, como Neon Genesis Evangelion. En los últimos años he disfrutado viendo un poco más de anime y haciendo las paces con el género, vi Gurren Lagann, Death Note, Fullmetal Alchemist y Attack on Titan, entre otras y me gustaron mucho.

En fin. Estaba viendo Fullmetal Alchemist Brotherhood (ni siquiera voy a intentar explicar porqué hay DOS series de Fullmetal Alchemist…) y la reflexión final me pareció inspiradora, si bien algo cursi:

“Una lección sin dolor no tiene sentido.
Eso es porque no se puede ganar algo sin sacrificar algo a cambio.
Sin embargo, una vez que hayas soportado el dolor y lo hayas superado, ganarás un corazón que es más fuerte que todo lo demás.
Así es, un corazón de acero.”

Para poner en contexto, les resumo de qué trata la serie: cuando la Alemania industrial estuvo tomada por el primer Reich usando soldados con poderes mágicos, dos hermanos aún niños aprenden a usar alquimia, ciencia mezclada con magia[1], para tratar de revivir a su difunta madre… Todo se va hacia sur, porque no existe un elemento natural que valga tanto como el alma de un ser humano.

La alquimia en la serie funciona como la física y la química en el mundo real: la energía no se puede crear ni destruir, solo se transforma. En la serie, esta idea es llamada la ley del intercambio equivalente.

Esto en contexto con la frase con la que cierra la serie (la frase que cité), me dejan una valiosa lección para la vida: los lunes son necesarios e inevitables.

Si te gusta pasarla bien el fin de semana, descansar, comer en restaurantes, tomar una cerveza con amigos, viajar de vacaciones o comodidades mundanas como techo, abrigo y transporte, hay que pagarlas de alguna forma. Vivir no es gratuito.

No es agradable romper el ciclo de pasar descansando el fin de semana con el despertar de un lunes. Pero es ineludible y en una sociedad con una economía de mierda como en la que vivimos creo que deberíamos estar agradecidos de tener trabajos que paguen nuestros estilos de vida.

Si puedo ser serio un momento. Lo dulce no es dulce sin lo amargo. Las alegrías se ganan y se forjan con algún tipo de sacrificio y tristeza. La vida es un balance de bueno y malo. No podemos escapar de lo malo pero si podemos tener una mejor perspectiva sobre las cosas.

Ahora que si REALMENTE odian tanto los lunes quizás leyeron mucho Garfield cuando eran niños o simplemente ODIAN SU TRABAJO[2]…

Corolarios:

[1] J.D. Zárate, leyenda programando y entusiasta de la fantasía, escribió sobre el curioso vínculo entre la magia y la ciencia, he aquí el link.

[2] Óscar O. Arévalo, emprendedor aficionado quien inclusive ha publicado sobre el tema, tiene un consejo para ti que odias tu trabajo pero no te has atrevido a reuninciar, link aquí.

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