Cuatro consejos para dar el mejor pitch
Un pitch es una herramienta clave para todo emprendedor buscando inversiones o apoyo para su proyecto. Se trata de una presentación en la que, de manera concisa, clara y atractiva, debe presentarse la propia idea o proyecto. Sabemos que esta instancia resulta un desafío para muchos emprendedores, y por eso le pedimos a Madelaine Baklayan, emprendedora, COO y Co-Founder de uShowApp, que nos pase cuatro consejos para encararlo de la mejor manera. Madi acaba de volver de pitchear en uno de nuestros eventos de AB InBev en México y se nos ocurrió que su experiencia y consejos podrían serle útiles a muchos otros emprendedores. ¡Acá se los dejamos!
1. Menos es más
Esto aplica a varios aspectos del pitch. Primero, por supuesto, a la extension de la presentación: al vender nuestro producto es clave ser simple y concentrarnos en el punto sin irnos por las ramas. Siempre es preferible utilizar menos palabras que sean más concisas. Este es el segundo aspecto del mencionado “menos es más”: evitá utilizar palabras demasiado complejas. A los inversores no les interesa la complejidad de los términos utilizados, y sí les importa la fluidez y claridad con la que exponés tu objetivo. Si sabés transmitir tus ideas, no es necesario que justifiques datos con nomenclaturas demasiado complejas. De hecho, la idea es que el pitch pueda entenderlo alguien que no sabe nada sobre el tema que exponés (los detalles más técnicos se pueden profundizar al finalizar el pitch). Para ayudar a que se entienda bien la idea podés apoyarte en ejemplos que resulten significativos y sencillos para la audiencia, lo que va a permitirles imaginarse el producto o servicio en funcionamiento, bajando a tierra el concepto.
2- La sinceridad es todo lo que está bien
Si estás nervioso, por ejemplo, está perfecto comunicárselo al público. No somos robots y no importa la trayectoria que tenga nuestra audiencia: ellos también pertenecen a la raza humana y pueden empatizar. Esto incluso, lejos de ser un problema, puede generar un impacto positivo sobre la audiencia.
Otra forma de causar un impacto positivo es transmitir de forma sincera y real la confianza que tenés en tu producto, siempre basándote en datos concretos. Esto remarca la credibilidad de tu pitch.
Por último, si te hacen una pregunta para la cual no tenés la respuesta, inventar e improvisar es lo peor que podés hacer. Ser sincero con profesionalismo es la clave para salir aireosos de esta situación: proponer conversar junto con el equipo sobre esta pregunta al terminar el pitch, por ejemplo, siempre va a ser mejor que dar una respuesta falaz e incorrecta.
3- Abrazar los nervios
Recuerdo un pitch en particular en el que me temblaba mucho la voz. El auditorio era muy, muy, muy grande, mucho más grande de lo que me esperaba, y eso me daba una sensación de inseguridad muy fuerte. La voz me tembló, sin escrúpulos, desde la primer palabra hasta la ultima. Una vez que terminó el pitch lo primero que me dijeron fue “se notaba que estabas nerviosa, pero se vio muy claramente como vos asimilaste tu nervios y no dejaste que afectaran la calidad de tu mensaje. Surfeaste la ola hablando muy pausado y con mucha solidez” .
Hablar pausado y con firmeza (a pesar de que la voz no acompañe) es clave. No hay que ocultar la inseguridad que puede tener uno al pararse frente a una audiencia, es mejor lograr convivir con ese sentimiento para dominarlo en lugar de fallar al querer ocultarlo.
Luego del pitch me dijeron que tomar agua siempre ayuda. Ya era un poco tarde… ¡Pero la próxima lo aplico y les cuento!
4- Anticiparse a las preguntas
Presentar ante un publico que puede hacer preguntas es como ir a una entrevista de trabajo, uno tiene que presentarse teniendo en claro sus fortalezas y debilidades, y tener un plan para superar posibles obstáculos. Es importantísimo conocer los puntos flojos de tu proyecto y anticiparte para tener la fuerza de poder sobrepasarlos. Conocer tus puntos débiles, paradójicamente, demuestra fortaleza.
Algo que hago yo es llevar slides preparados para el momento de las preguntas. Hay dudas que uno puede anticipar, entonces ¿Por qué no preparar material para ese momento de Q&A? Lo que hago es dejarlos al final de la presentación (“escondidos” atrás del último slide de agradecimiento) y los muestro únicamente en caso de que me consulten sobre alguno de esos temas. Es una buena forma de demostrar solidez en nuestras respuestas.
¡Gracias Madi por los consejos! Ahora… a aplicarlos 💪
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