Emprendedores paraguayos: cuantos más somos en una reunión, ¡mejor!

En un artículo anterior comentamos que el 52% de los emprendedores paraguayos se reúne en promedio semanal entre 3 y 5 veces fuera de la oficina, sin tener en cuenta la cantidad de reuniones que realizan en su propio espacio de trabajo.

En el mismo estudio, preguntamos a las emprendedores cuántas personas participan de esas reuniones y descubrimos que el promedio de asistentes es de 3,7 personas, para las reuniones que no siempre son internas.

Por otro lado la ASEPY, Asociación de Emprededores de Paraguay, cuenta que el 75% de sus socios tiene entre 1 a 10 colaboradores en sus organizaciones, o sea que son empresas de pocas personas con múltiples roles.

Si unimos ambos datos nos encontramos que los equipos de colaboradores en los emprendimientos paraguayos son pequeños y la cantidad de participantes en las reuniones tienen una tendencia de ser cada vez mayores.

¿Qué impacto tiene este cruce? ¿Cómo incide en la vida de los emprendimientos que cada vez haya más reuniones, con más personas, en equipos de trabajo pequeños?

Comúnmente se dice que dos cabezas piensan mejor que una y varias cabezas en una reunión en la que hay que definir o trabajar un tema importante, mejor aún.

Durante muchos años existió la creencia, y quizás persista parte de ese pensamiento, que las reuniones eran sinónimo de no trabajar, que se estaban dejando de hacer cosas para juntarse a debatir temas o revisar un proyecto. En cambio, las reuniones bien aprovechadas y eficaces pueden ser un espacio de construcción entre varios miembros de una organización para planificar, crear estrategias o armar propuestas en conjunto.

Sin embargo, también es necesario estar evaluando constantemente la funcionalidad de esas reuniones. El 66% de los encuestados respondió que se juntan entre 3 y 4 personas y un 23% entre más de 5 personas. ¿Todos estos asistentes están cumpliendo verdaderamente un rol en la conversación o están presentes sin aportar mucho a la reunión?

Para los emprendedores, personas que están arrancando con sus negocios y empiezan a formar sus equipos de trabajo, revisar constantemente sus procesos y modos es fundamental para seguir creciendo. Para esto, uno de los aspectos que se debería de evaluar permanentemente son las reuniones. ¿Todas ellas son realmente necesarias? ¿Cómo hacer que esos encuentros generen valor para la organización? ¿Quiénes deben participar de esos espacios?

Lo importante es tomar conciencia de estar plenamente presente en las reuniones que se deban estar y permitirse decir que no cuando la presencia no es necesaria. Poner el cuerpo en una reunión para pasar parte de la misma chequeando el celular es una pérdida de tiempo para todas las personas.

Encontremos esos espacios para innovar y pensar en conjunto cómo mejorar, planificar y generar estrategias que potencien los emprendimientos en Paraguay.

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Artículo escrito por Gonzalo Recalde y Josefina Bauer