‘Las ciudades blancas’, de Joseph Roth

Sumergirse en el viaje de las ciudades blancas significa emprender un largo recorrido que tiene como destino el alma humana.

Existen decenas de razones para realizar un viaje, sin embargo, este siempre tiene la capacidad de asombrarnos, de transformarnos. Aunque volvamos una y otra vez al mismo lugar, ni los parajes del camino ni el destino ni nosotros somos los mismos. Un viaje siempre nos ofrece algo nuevo.

Joseph Roth lo sabía al emprender el camino hacia Las ciudades blancas, como él las denomina por ese permanente tono albo que las distingue desde la lejanía.

Todas ellas ciudades francesas, ciudades con las que soñó de niño en su natal Alemania y que después de la Primera Guerra Mundial decide visitar como una forma de expiación, a pesar de reconocer la falta de odio hacia sus enemigos durante la contienda, a pesar de ser él el derrotado.

Roth observa Las ciudades blancas con una perspectiva humana e histórica. Se detiene en los detalles arquitectónicos de las pequeñas casas que rodean el núcleo urbano y de las monumentales catedrales, pero siempre reconociendo en ellos el ingenio y la mano del hombre. Reflexiona sobre sus motivaciones y de cómo la piedra se convierte en memoria de aquellos que levantaron los muros y el tiempo ha borrado sus cenizas.

Observa con detenimiento a las personas que rodean su presente. Se reconoce en ellas y reconoce a la humanidad entera. Se da cuenta de que no importa cuánto pase el tiempo, los seres humanos siempre han tenido los mismos sueños e ilusiones a lo largo de la historia. Las ciudades blancas es un libro que relata un viaje que culmina en el interior de uno mismo.

Pero no deja de ser un libro de viaje. Es un título imprescindible para aquellos que pretenden vivir de viajar y de escribir. Si de verdad desean aprender a describir con maestría un destino, Las ciudades blancas puede darles las claves para conseguirlo.

Como siempre, Minúscula nos vuelve a regalar una pequeña joya.

Ficha técnica:

Las ciudades blancas. Joseph Roth. Traducción de Adan Kovacsics. Editorial Minúscula. España, 2014. 100 páginas. 10 euros. Comprarlo en Amazon.