Luis Solano: «Es bueno que los libros nos dejen esa sensación de vacío»
Quería trabajar en una editorial y no le quedó más remedio que montar una. Hablamos sobre libros con el editor de Libros del Asteroide.
M e gustan los Libros del Asteroide. El primer asteroide que cayó en mis manos fue El frente ruso. Me cautivó porque contaba mi vida, claro, pero había algo más, un qué-sé-yo: que citaran al traductor en la portada, el color turquesa o tal vez fue la notita final:
Esperamos que la lectura le haya gustado y le animamos a que, si así ha sido, lo recomiende a otro lector.
Enseguida descubrí a Chaves Nogales, las Mitford, William Saroyan. He devorado Ángulo de reposo, me he reído con A propósito de Abbott, y así hasta una treintena de títulos. Libros del Asteroide es, según mi criterio absolutamente subjetivo y aleatorio, la primera, o al menos la más grande, de las nuevas editoriales, las que han roto el monopolio editorial y casi temático, y han traído cosas nuevas. Me consta que no pocos lectores hemos agradecido tanto este soplo de aire fresco que ya prácticamente solo leemos estas editoriales.
Detrás de los Libros del Asteroide está Luis Solano (Santiago de Compostela, 1972), que empezó en 2005 a editar los libros que a él le gustaban y le parecían interesantes. Su objetivo era hacer un catálogo coherente donde todos los libros fueran buenos. Luis Solano es un editor tradicional, un apasionado de los libros que busca buenos títulos y los recomienda.
¿Qué hacía antes de empezar con la editorial?
Había sido consultor y luego trabajado de diversas cosas (relacionadas con marketing y ventas en el Grupo Planeta).
¿Montar una editorial era su sueño, o, como todos, usted lo que quería era tener una pequeña y encantadora librería café?
Mi sueño era trabajar en una editorial, pero como no lo conseguía no me quedó más remedio que montar una.
¿Cómo se descubren libros, esto es, cómo llegan a sus manos? ¿Se deja orientar por críticas, publicaciones literarias, viaja a ferias?
Los caminos que toman los libros para llegar a un editor son, como los del Señor, inescrutables. Es decir, no hay una única o únicas maneras de llegar a los libros. El editor es un profesional con las antenas siempre alerta para detectar un posible libro. Mencionas algunas maneras de llegar a un libro, pero hay muchas otras: consejos de amigos o lectores, libros, películas, relaciones con editores extranjeros, visitar librerías, estudiar qué se hace en otros países, etcétera.
El catálogo del Asteroide es bastante variado, si bien tiene una coherencia y un mismo tono, que es lo que lo hace característico. Sin embargo, ahora no recuerdo entre sus títulos ciertos géneros, como la novela negra o la ciencia ficción, ¿podría tener cabida?
De novela negra hemos publicado, al menos, ocho títulos de Léo Malet, George V. Higgins y John D. MacDonald. Y publicaremos más. Me encantaría publicar algún libro de ciencia ficción, pero no hemos encontrado nada con suficiente calidad y que no estuviese publicado ya en español, supongo que hay muy buenos editores trabajando el género. Donde no creo que entremos nunca, por ejemplo, es en la llamada novela histórica: manías personales.
¿Cuántos tostones descarta por cada joya que descubre y decide traer?
Yo diría que la proporción debe de ser uno a quince, aproximadamente. Es decir, hay que leer y descartar quince libros para encontrar uno que quiera publicar.
Su editorial publica clásicos contemporáneos, con la norma general de que tengan al menos diez años de antigüedad y que estén consolidados en sus países. Sin embargo, ha declarado en alguna ocasión que no están cerrados a la publicación de originales, si bien el nivel es, en general (cito textualmente), «desastroso». ¿Qué se le pide a un original para que pase a formar parte del catálogo de una editorial como Libros del Asteroide?
En realidad, lo de publicar solo clásicos contemporáneos duró poco. A los cinco años empezamos a publicar también literatura contemporánea y ahora publicamos aproximadamente mitad y mitad, es decir, la mitad de libros que publicamos tienen más de diez años de antigüedad y la otra mitad, menos. Y también publicamos originales de autores españoles. Cuando hablaba del nivel desastroso me refería al nivel de las propuestas que nos llegan habitualmente, no al nivel de la literatura española, claro.
¿Da para vivir la edición hoy en día?
De Asteroide viven cinco personas, así que me imagino que sí. Aunque es un sector que no da mucho dinero, gran parte de los que trabajamos lo hacemos porque hay un elemento vocacional importante, no por el rendimiento económico que le sacamos.
Me dejo para el final unas cuantas preguntas personales, continuando una conversación que comenzamos en la última Feria del Libro de Madrid: ¿Por qué no han publicado la tercera parte de la Trilogía Titmus, de John Mortimer? ¿De verdad los demás libros de Wallace Stegner están a la altura de Ángulo de Reposo? ¿Cómo se supera el vacío dejado por Jetta Carleton, hay algo que se parezca siquiera un poquito?
Sobre Mortimer, nos pareció que no estaba a la altura de los otros dos y que no era una verdadera trilogía, en el sentido de que no la dejábamos incompleta si no publicábamos la última. Los tres libros grandes de Stegner son En lugar seguro, Ángulo de reposo y El pájaro espectador; el resto son buenos, pero quizá no tanto. En general creo que es mejor dejar al lector con ganas de más que empachado. Por último, yo creo que es bueno que los libros nos dejen esa sensación de vacío, en realidad son ganas de leer algo igual de bueno, creo que hay varios libros en el catálogo a esa altura.
Vamos a lo realmente importante…
¿Qué desayuna?
Depende. Hoy un sándwich de mantequilla de cacahuete y plátano, un zumo de naranja y un café solo largo.
¿Dónde guarda los libros?
En casa tengo una biblioteca no muy grande que intento que no crezca y que voy aligerando periódicamente, sobre todo en las mudanzas. En la oficina están la mayor parte de los libros relacionados de una u otra manera con la editorial.
Algún libro que le encante pero que no encajaría en la colección del Asteroide.
Muchos: Posguerra, de Tony Judt, o El arcoiris de la gravedad, de Pynchon, por pensar en un libro de no ficción y otro de ficción.
Su Asteroide favorito.
Tengo especial debilidad por uno que ha tenido mucha peor suerte de la que merecía: Roscoe, negocios de amor y guerra, de William Kennedy.
¿Robertson Davies o Wallace Stegner?
¿Mozart o Bach?
¿Jetta Carleton o Maya Angelou?
Maya Angelou, aunque quizá prefiera Cuatro hermanas a Yo sé por qué canta el pájaro enjaulado.
¿Champions League o NBA?
Champions.
¿New Yorker o Jot Down?
New Yorker, pero creo que la comparación es injusta para JD.
¿Los Soprano o Mad Men?
Soprano.
¿Playas gallegas o catalanas?
Gallegas, claro.
¿Gin Tonic con pijaditas o whisky on the rocks?
Whisky, bourbon si puedo elegir.
Un autor infantil o juvenil indispensable.
¿Tolkien?
Fotografías de Santi Cogolludo.
