‘Seveneves’, de Neal Stephenson

Hay novelas que son fruto de un «¿y si…?». ¿Y si la Luna se rompiese en siete pedazos?

¿Qué pasaría si cosas que hoy asumimos como ciertas no lo fueran? ¿O si la sociedad cambiara alguna de sus reglas? La ficción nos acerca a mundos imaginados. Algunos de ellos son mundos que no son reales, pero que podrían serlo. Por eso libros como 1984 nos ponen los pelos de punta. La ciencia ficción lleva ese ejercicio hasta el extremo. Nace de una pregunta, cuya respuesta desarrolla hasta la última consecuencia. Seveneves es un excelente ejemplo.

¿Qué pasaría si un día la Luna se rompe en pedazos? ¿Qué futuro le espera a la humanidad? Con la Luna rota en siete trozos, una cuenta atrás empieza para la humanidad. Los restos lunares empiezan a colisionar unos con otros, dando lugar a trozos más pequeños… que empiezan a caer a la Tierra en una lluvia de meteoritos. Dos años. Ese es el tiempo que tiene la humanidad para salvarse de la extinción. Y la salvación, irónicamente, viene del cielo: la Estación Espacial Internacional.

Para responder a la sencilla pregunta del párrafo anterior, y presentarnos a unos personajes fantásticos en el proceso, Neal Stephenson se explaya a gusto a lo largo de ochocientas diez páginas. Conflictos sociales, personales, esfuerzos internacionales para salvar a la humanidad… ¿es posible poner a miles de personas a vivir en el espacio en tan solo dos años? Y muchas más cosas que no quiero ni siquiera preguntar, porque es una delicia ir descubriendo a medida que vas leyendo.

Si os gusta la ciencia ficción — especialmente la dura — vais a disfrutar enormemente de esta novela, aunque en ocasiones haya tramos un poco lentos. Pero es que en casi novecientas páginas de libro no puede mantenerse siempre el ritmo.

Y un último apunte: muchas gracias a Pedro Jorge Romero por su fantástica traducción.

Seveneves. Neal Stephenson. Traducción de Pedro Jorge Romero. Ediciones B. Barcelona, 2016. 810 páginas. 30 euros. Comprarlo en Amazon.