‘Vástagos: ¿Cómo convertirlos en personas?’, de varias autoras
Diez relatos sobre la maternidad que se parecen a la maternidad. Y por eso hay que leerlo sin ideas preconcebidas.
E n Vástagos la editorial Next Door Publishers, de la que ya os hemos hablado por aquí, vuelve con una forma distinta de editar y contar cosas, como ya hiciera el año pasado con Disecciones. A través de diez mujeres distintas, algunas del mundo de la divulgación científica, otras conocidas por su actividad en las redes sociales, en comunicación o como escritoras, se aborda la aventura de la maternidad. No de ser madre, ojo. De la maternidad.
Creo que escribir relatos es difícil. Y también leerlos. Estamos acostumbrados a otros tiempos y a otras longitudes. Devoramos best sellers de mil páginas gracias al ebook, leemos posts de ochocientas palabras en el móvil, y en el medio queda la tierra de nadie de las novelas cortas y de los relatos. Yo misma me apresuré a pedir este libro porque conocía a las autoras y porque tengo una pequeña compulsión con los libros de cosas de reproducirse, y cuando lo tuve en la mano pensé: «Pero dónde voy. Si yo no sé leer relatos. Cómo voy a reseñarlo».
Como decía al principio, Vástagos es un libro distinto y creo que solo por esto merece la pena. Por más cosas también, que paso a explicar.
(Inciso: sé que casi siempre digo de los libros que traigo que son distintos, pero es que precisamente es lo que intento, traer cosas diferentes a las que uno por sí mismo tal vez no se acercaría. Como decía molinos, nuestra experiencia lectora se amplía enormemente cuando dejamos de lado nuestros prejuicios, y yo, que los he tenido todos, soy mucho más feliz desde que los he dejado).
Vástagos es un libro pequeñito con varios estratos. En uno de ellos están las expectativas del lector, que serán distintas para cada uno. Habrá quien busque divulgación (el sello de la editorial), literatura sin más o algo sobre la maternidad. Vástagos tiene un poco de todo esto, pero en realidad tiene su propio rollo, y ese es su encanto.
(Otro inciso: yo me leí este libro en media tarde y una madrugada).
En Vástagos, los relatos, aparentemente independientes y escritos por personas distintas, aparecen varios elementos que los cruzan. Un nombre, una profesión, dos hijos con el mismo problema y que parecen el mismo niño. En esto consiste parte de su magia.
Vástagos también me ha gustado mucho porque gracias a él he comprendido un poco mejor qué tiene de bueno el relato como género: la brevedad. La brevedad se convierte en un elemento más de la trama. Y así, Vástagos va también, y mucho, sobre el silencio, y en los diez relatos pesa muchísimo más lo que no se dice. Como en la maternidad.
Vástagos es un libro distinto, porque es de los que nos dejan pensando. De los de masticar despacito. De los de emocionarse un poquito y pensar y pensarnos desde otros prismas. Es un libro que aborda la maternidad desde distintas edades y posiciones, incluso la más obvia: la de la que no los tiene.
Yo no quiero contar aquí mucho más del libro, porque hay que acercarse a estos relatos sin saber nada sobre ellos (aconsejo dejar el excelente prólogo de Paloma Bravo para el final), dejarse sorprender y saborearlos.
Al final, lo que pasa es que Vástagos se parece un poquito a ser madre. O a la maternidad, que a lo mejor no es lo mismo. En todo caso, no será como esperábamos, si es que esperábamos algo. O bueno, a lo mejor es que la maternidad se parece a la vida. Como los buenos libros.
Vástagos: ¿Cómo convertirlos en personas? VVAA. Next Door Publishers. Pamplona, 2017. 109 páginas. 15 euros. Comprarlo en Amazon.