De Ogguere a Yelsy Heredia
Más allá de que hoy no esté de moda grabar discos y lo que predomine sea el lanzamiento de temas sueltos, nuestros compatriotas persisten en dejar plasmada su obra en fonogramas.
Para suerte de melómanos como el que esto escribe, más allá de que en la actualidad no esté de moda grabar discos y lo que predomine sea el lanzamiento de temas sueltos, nuestros compatriotas persisten en dejar plasmada su obra en fonogramas. De esa producción, reseño hoy en El Caimán Barbudo materiales del rapero Ogguere y del contrabajista guantanamero Yelsy Heredia
Ogguere: Raíces
Aunque lo que más ha trascendido de la producción cubana de rap es la zona que tiene que ver con el sentido dialógico de la obra de arte, en la perspectiva de arrojar luz sobre temas de carácter problémico de nuestra sociedad, en mi caso nunca he desvirtuado las propuestas que no ponen el énfasis en lo reflexivo sino que apuestan por un trabajo lúdico, con miras a hacer bailar a partir de hibridar diferentes géneros y estilos musicales. Edrey Riverí o como se le conoce, Ogguere, es de esos que, sin caer en chabacanerías de mal gusto, siempre ha tenido un enfoque comercial en lo llevado a cabo por él. Hace años comenté su fonograma titulado Llena de amor el mambo, que lamentablemente nunca gozó de una buena promoción. De haberse divulgado bien, estoy convencido de que se habría convertido en un éxito, pero eso no ocurrió y otra fue la historia.
Ahora Ogguere ha puesto en circulación un EP en el que continúa su aproximación al rap como columna central de la creación, inmerso en un contexto sonoro en el que el funky, el rythm & blues, el soul y en general la rica música negra estadounidense señorean a lo largo de los cortes de la grabación. En una interesante alternancia entre pasajes en español y otros en inglés, temas como “Raíces”, “Ley de la supervivencia”, “Momentos” o “Afrocuban soul” son estupendos para compartir entre amistades en una fiesta. De todo el material aquí recogido, solo no me funciona “La Habana del norte”, pues es una fórmula de acercamiento a la música tradicional cubana ya demasiado empleada con anterioridad por otros de nuestros raperos, como los desaparecidos Orishas, sobre todo en su ópera prima, A lo cubano. Por lo demás, el EP Raíces pudiera convertirse en un trabajo en extremo popular, si goza de una adecuada promoción.
Yelsy Heredia: Los mismos negros
“La obra que emerge de este proyecto es tanto reflexiva como evocadora. Los Mismos Negros no solo es el título que identifica este trabajo discográfico. También, en su síntesis, revela y reafirma puntos en común de las riquezas culturales de los descendientes africanos en las Américas, una herencia que no solo perdura, sino que se enriquece con el transcurso del tiempo.” Así comienza la nota escrita para el libreto interior del disco titulado Los mismos negros, trabajo acreditado al contrabajista guantanamero Yelsy Heredia y que saliese al mercado el viernes 26 de abril del corriente 2024. No creo exagerar un ápice al afirmar que este es uno de los fonogramas de mayor interés entre los facturados por nuestros compatriotas en lo que va de la tercera década del actual siglo. Contentivo de diez cortes, con idéntica soltura el álbum se mueve entre sones, porros, rumbas, currulaos, nengones, bullerengues, etc., en un singular recorrido por músicas tradicionales de Cuba y Colombia, pero asumidas desde una palpitante contemporaneidad.
El enfoque desprejuiciado con el que el notable contrabajista Yelsy Heredia acomete el proyecto hace que el mismo no se quede en un encuentro entre las músicas afrocubanas y afrocolombianas. Ello se percibe, por ejemplo, en los elementos jazzísticos que se escuchan en las improvisaciones de varias piezas. En tal sentido, recomiendo prestar especial atención al changüí “Taco al Pastor”, con destaque de la trompeta de Mayquel González, y “Parche a cualquier mal”, un son que tiene un excelente solo a cargo de Emilio Morales dentro de la mejor tradición de las descargas en la historia de la pianística cubana. Con letra, música y arreglos escritos por Yelsy Heredia, estamos ante un disco sabroso (como habría dicho el hermano Bladimir Zamora Céspedes), en el que expresiones musicales de carácter local trascienden las fronteras de su entorno para regalarnos una obra pletórica de evocaciones y ensoñaciones, legado de una auténtica y renovada cultura popular. En resumen, Los mismos negros resulta un fonograma altamente recomendable.
