Poesía de Fernando Pessoa
Poeta, escritor, periodista y traductor. Su figura es una de las más importantes de la literatura universal.
Como si cada beso
Como si cada beso
Fuera de despedida,
Cloé mía, besémonos, amando.
Tal vez ya nos toque
En el hombro la mano que llama
A la barca que no viene sino vacía;
Y que en el mismo haz
Ata lo que fuimos mutuamente
Y la ajena suma universal de la vida.
Traducción de F. Gutiérrez
Cuando ella pasa
Sentado junto a la ventana,
A través de los cristales, empañados por la nieve,
Veo su adorable imagen, la de ella, mientras
Pasa… pasa… pasa de largo…
Sobre mí, la aflicción ha arrojado su velo:-
Una criatura menos en este mundo
Y un ángel más en el cielo.
Sentado junto a la Ventana,
A través de los cristales, empañados por la nieve,
Pienso que Veo su imagen, la de ella,
Que no pasa ahora que no pasa de largo
Traducción de Rafael Díaz Borbón
El viento, el viento alto
El viento, alto en su elemento
Me hace más solo -no me estoy
Lamentando, él se tiene que lamentar.
Es un sonido abstracto, insondable
venido del elusivo fin del mundo.
Profundo es su significado.
Me habla el todo inexistente en él,
Cómo la virtud no es un escudo, y
Cómo la mejor es estar en silencio.
Traducción de Rafael Díaz Borbón
Esto
Dicen que pretendo o miento
En cuanto escribo. No hay tal cosa.
Simplemente
Siento imaginando.
No uso las cuerdas del corazón.
Todo cuanto sueño o pierdo,
Que pronto cae o muere en mí,
Es como una terraza que mira
Hacia otra cosa más allá.
Esa cosa me arrastra.
Y así escribo en medio
De las cosas no junto a mis pies,
Libre de mi propia confusión,
preocupado por cuanto no es.
Sentir? Dejemos al lector sentir!
Traducción de Rafael Díaz Borbón
No quiero rosas, con tal que haya rosas
No quiero rosas, con tal que haya rosas.
Las quiero sólo cuando no las pueda haber.
¿Qué voy a hacer con las cosas
que cualquier mano puede coger?
No quiero la noche sino cuando la aurora
la hizo diluirse en oro y azul.
Lo que mi alma ignora
eso es lo que quiero poseer.
¿Para qué?… Si lo supiese, no haría
versos para decir que aún no lo sé.
Tengo el alma pobre y fría
Ah, ¿con qué limosna la calentaré?
Traducción de F. Gutiérrez