GENIO DEL BASQUETBOL
Mis mejores días
se tratan
de poder apagar el foco desde la cama con los dedos de los pies,
para eso tengo piernas largas.
Dirán que pude ser un gran atleta
un genio del basquetbol
y raparme
y teñirme el cabello de rojo
pero mis mejores días se tratan del menor esfuerzo;
de cargarme bolsas del mandado hasta en el cuello
para no tener que hacer viajes dobles hasta la cocina.
Dirán que pude ser rudo por ser un tipo grande
pero tropiezo seguido
por caminar sin dejar de ver el cielo.
Esta habitación podría estar en cualquier parte;
Guadalajara, Ciudad de México, Buenos aires
nunca he estado en buenos aires
pero frente al monitor
y con un poco de imaginación
un lugar que no conoces
podría ser cualquier rincón de la bolita del mundo
excepto
el lugar donde creciste queriendo teñirte el cabello de rojo.
Mis mejores días
se tratan de dormir bien
de no despertar en medio de la madrugada
con ese silencio que da la seguridad
de ser el único habitante en la tierra
(que cada vez más
tiene un aire a pesadilla;
a seguir soñando)
y estirarme
y estirarme
y estirarme como un gran atleta
y estirarme en un vértigo lineal
y estirarme intentando salir de mí
y estiraaaa aaaaaaaaarme
y estirarme tanto como la obsesión de ser otro cuerpo
uno que cuidé mejor
con la cabeza roja
en otra línea de tiempo
y estirarme
y es
ti
rar
me
hasta alcanzar el interruptor
con los dedos de los pies.
