21 y contando. Textos seleccionados. Día 18.

MURAKA
El club. DLC
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6 min readSep 2, 2020

Día 18: RECETA PERFECTA.

Inspirada en un ejercicio muy interesante que realizó una vez una integrante del club:Elabora una receta, cual chef, con lista de ingredientes, mezclas y preparación, para una “Relación Perfecta”

Recibimos recetas de todos los colores y con preparaciones de todo tipo. Nos gustaron varias, pero bueno, aquí están las que para nosotros se destacaron más:

Manuela Leyton

Torta de chocolate

Dice mi abuela que el amor es como preparar una torta de chocolate. Desde pequeña aprendí que la repostería es el arte de la exactitud culinaria, si nos excedemos en un solo ingrediente, toda nuestra preparación puede verse arruinada; así como el amor es el arte de mezclar muchos componentes . El chocolate es una las delicias más exquisitas para los seres humanos; nos volvemos adictos a él porque cuando lo comemos nos hace sentir un poco más felices, pero si nos excedemos puede ser demasiado empalagoso para nuestro paladar. Por eso siempre existirán otros ingredientes que nos ayudarán a mantener el equilibrio en su sabor, así como en el amor. Esta receta la aprendí de mi abuela, pero fui perfeccionándola en la madurez de mi vida.

Ingredientes:

· 200 gr de harina

· 150 gr de azúcar

· 150 gr de mantequilla

· 200 gr de chocolate en polvo

· 100 ml de leche

· 4 huevos

· 1 sobre de levadura

Preparación:

Para que la tarta de chocolate quede mucho más esponjosa, el primer paso es separar las claras de las yemas de los 4 huevos. Toda relación debe construirse con bases, el error es creer que este ingrediente debe ser agresivo o pesado. Batimos las claras hasta conseguir el punto de nieve -si la nieve no cae del bowl, está lista-. Las bases del amor, así como en la torta de chocolate, nacen de la constancia, de conocer al otro en los detalles más pequeños. Si no hay nieve, no hay torta esponjosa. Si no hay caridad, no hay amor.

Poner las yemas con el azúcar en otro bowl y mezclar hasta conseguir una fina crema con un poco de volumen. Añadir a la mezcla la mantequilla y la leche. El amor, como crema dulce, necesita grasa para que no se pegue en el fondo del corazón, y leche para que todo se bata muy bien, sin grumos o dudas de lo que somos y estamos dispuestos a entregar. Tamizamos la harina y, gradualmente, la incorporamos. Filtramos actitudes y costumbres, y añadimos ingredientes más limpios que nos permitan combinar todo de forma más sencilla. Añadimos el chocolate en polvo y también lo tamizamos. Nuestros sentimientos necesitan un colador que deseche hábitos dañinos y tóxicos, productos del tiempo y las malas experiencias.

Por último, debemos ir añadiendo las claras a punto de nieve, batiendo la mezcla con movimientos envolventes y suaves. Si forzamos y presionamos con afán, solo obtendremos cansancio y malas decisiones. Precalentar el horno previamente a unos 180º, introducir la tarta al horno cuando esté caliente. No luchemos con el tiempo, la paciencia hará que nuestro corazón se caliente, se infle de amor, se llene de sabor y sepa a felicidad.

Angélica Gaitán

Infaltable en el nochero

Todos hemos ensayado múltiples recetas para tener una “Buena Relación”, pero en esta ocasión quise ir más allá y brindarles los ingredientes y el paso a paso para que este exquisito plato logre el punto de la anhelada perfección, que sin duda hará que los dedos no sean lo único que deseen chupar. Las instrucciones presentadas a continuación son poco aptas para indecisos o para aquellos que siempre optan por lo más básico.

Para dos platos o más, según prescripción psicológica.

Ingredientes:

· Comensales al gusto, y con mucho gusto.

· Complicidad: sin exceso (se ha comprobado que en abundancia la receta se convierte en la “Perfecta Friendzone”).

· Sentido del humor en cantidades suficientes que permita mezclar a los comensales. Si lo desea, una pizca de sarcasmo agregará intensidad en el sabor.

· Toda la imaginación de la despensa.

A continuación, las instrucciones para realizar este sencillo, pero exigente plato:

Caliente a fuego lento la complicidad, hasta que la consistencia espese y exprese; en ese momento agregue los comensales, no los revuelva, en la cantidad adecuada se irán mezclando con el calor, y cuando sienta el olor del deseo, agregue el sentido del humor, pero suavemente, para evitar tonos de amargura. Finalmente espolvoree la mezcla con imaginación (en caso de no contar con este ingrediente, pueden reemplazarlo con algo de Fe, aunque altera un poco el sabor, seguirá siendo perfecta según cada paladar, pero será de ayuda para que los comensales no se desbaraten. Pero tenga cuidado de no excederse con la Fe, ésta puede hacer que no luzca bien el plato, y las ganas pueden irse al piso).

No olvide servir bien caliente y, aunque no lo prefiera, sí debe agregar mucho picante.

Felipe Jaramillo

RECETA PARA UNA “RELACIÓN PERFECTA”

La receta que propondremos a continuación será una muy particular de las tantas posibles, y no necesariamente garantizará un exquisito sabor y textura, pero seguro que haremos lo mejor para intentarlo. Intentaremos esta “Receta Perfecta” con la libertad de no tener que alcanzar la perfección; tener la mejor intención será lo fundamental.

Toma una mujer, si es Angélica está bien, pero si no está disponible por la cosecha de la época o por contingencias del mercado, puedes buscar el mejor sustituto que esté a la altura de su sonrisa. Mientras conseguimos el resto de los ingredientes, vas a dejarla inmersa, junto con Felipe, en una salmuera de conversaciones (para que vayan soltando los aromas y sabores naturales). No debes apresurar el tiempo de remojo, pues la salmuera no entrará hasta los sentimientos, y es posible que cuando esté lista la receta, los sabores finales no sean los mejores.

No es necesario que vigiles de forma permanente la salmuera, ella irá cambiando de colores a medida que salen los efluvios amargos y se acentúan los aromáticos. Si ves sobre la superficie una acumulación de natas flotantes, puedes retirarlas lentamente con una cuchara cuidando de no agitar el agua.

Mientras la salmuera cocina sin fuego a estos amantes, vas a preparar una reducción de esencias para adicionarlas posteriormente en medio de la cocción. Toma un tazón metálico que soporte el fuego directo. Pica muy bien las vanidades y las arrogancias y ponlas en el tazón cuando el aceite esté muy caliente. Debes tener precaución de no acercar las manos ni la piel, es posible que salpiquen gotas calientes que pueden ser muy peligrosas. Una vez dejen de salpicar, reduce el fuego y agrega sonrisas y miradas. Toma dos cucharadas de la salmuera que ha venido soltando esencias y viértelas en el tazón. Agita la mezcla hasta que sientas la consistencia adecuada para agregar muchos besos. En ese momento, la mezcla empezará a soltar aceites de aromas exquisitos. Por eso el fuego debe ser muy lento. Ten cuidado con esto. No dejes que se evaporen esos aromas (para ello debes adicionar inmediatamente una buena cantidad de abrazos). La mezcla seguirá espesando y, cuando la cuchara pueda parase por si sola, traes a Angélica y a Felipe junto con una taza de salmuera y adicionas todo eso a la mezcla del tazón. No botes el agua de la salmuera, esa servirá para hacer una salsa que será agregada poco a poco cuando vayas a servir.

Este es el momento de subir el fuego para que cambie el color y todo empiece a “adorarse”. Vas a incrementar el fuego de forma gradual, pues si lo haces de forma súbita, pueden quemarse las partes que queden cerca de las paredes del tazón. Mucho cuidado con la temperatura y el incremento progresivo.

Debes mirar en todo momento la mezcla sin dejar de agitar. Cuando veas que ambos están empezando a cambiar de color, le adicionas dos manojos de relaciones sexuales. Mucho cuidado de agregar estos manojos si ambos aún no han comenzado a cambiar de color, es decir, a “adorarse”.

¿Recuerdas la salmuera? Como el fuego está muy alto, debes agregar unas cucharadas cada cierto tiempo para que se conserve la textura de los alimentos.

Reduce el fuego nuevamente, pues los ingredientes ya estarán en su punto y deben conservarse de esa manera por el mayor tiempo posible. Vigila que la mezcla no se seque y adiciona siempre más salmuera en el momento adecuado.

No te olvides de servir los platos con la mejor presentación. Yo sugiero que uses la vajilla Te Amo de fabricación artesanal, ideal mandarla a hacer a la medida, sincera. No compres de esas piezas que son todas iguales, me parecen de mal gusto.

Puedes servir los platos con agua al clima, está de más el vino, así sea de los mejores. No me fue bien con un vino en otra receta que hice y prefiero usar agua para acompañarla.

Por ahora no tengo claro que postre podrá ser adecuado. Por el momento ensaya con unas vacaciones en el mar. Hay postres más fuertes, pero no nos apresuremos.

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MURAKA
El club. DLC

Alexander Giraldo. Escribo, estudio música, hago fotografía. Comunicador Social - Periodista IG:www.instagram.com/ojosdperroazul