5 años de Ley del Libro en Bolivia — Parte 1
Habiéndose cumplido 5 años de la promulgación de la Ley del Libro Oscar Alfaro y quisiera hacer un balance de la industria del libro en nuestro pais en los últimos 5 años desde un punto que considero de privilegio. Estuve involucrado en el proceso de redacción, socialización y negociación del Proyecto de Ley del Libro desde el año 2001 hasta poco antes de su promulgación el 29 de abril de 2013.
Empezaremos con la historia de la Ley para luego evaluar su impacto a nivel económico, social y cultural. Finalmente, haré algunas propuestas para la mejora de este instrumento legal.
Historia
Con la promulgación de la Ley 843 el año 1986, se instauró un nuevo sistema tributario en Bolivia estructurado en base a la aplicación de IVA en toda transacción comercial. Practicaente desde ese momento los editores y libreros, aglutinados en la Cámara Boliviana del Libro, solicitaron a los diversos gobiernos nacionales que el libro quede exento de dicho impuesto para adecuarse a los marcos tributarios de varios paises de la región.
En 1994 el entonces senador José Luis Paredes presentó ante el Congreso Nacional un Anteproyecto de Ley del Libro que aglutinaba las demandas del sector en relación a la exención del IVA. El Anteproyecto no incluía ninguna otra medida. Comprensiblemente, en un momento en que el IVA era la piedra angular de las reformas fiscales, el Ejecutivo rechazó la exención y por ende toda la Ley del Libro.
Desde entonces, y por más de 8 años, la Cámara del Libro siguió proponiendo un Anteproyecto de Ley del Libro basado en la exención del IVA y se conviritió en una política institucional que en cada inaguración de la Feria del Libro que se realizaba en La Paz, se reclamara a la autoridad de turno por la promulgación de una ley del libro.
Es en el año 2002 que nos propusimos buscar alianzas institucionales que nos permitieran elaborar un Anteproyecto más completo, que realmente apunte a lograr una revaloración de la lectura y una mayor demanda de libros.
Es asi que convocamos a autordades de Cultura del gobierno nacional, a biliotecarios y a universidades. El Comité de Promoción del Anteproyecto de Ley del Libro tuvo un total de 4 reuniones, que se realizaron en La Paz, Sucre y en Santa Cruz. Como resultado se logró elaborar un Anteproyecto cuyas dos bases centrales era:
- Abandonar la solicitud de exención del IVA y reemplazarla con la propuesta de que el IVA pagado por libreros y editores sea destinado exclusivamente a fortalecer los presupuestos de adquisicones de las bibliotecas municipales.
- Crear un sistema nacional de bibliotecas que se constituya en la punta de lanza de los planes de promoción de la lectura.
El acceso al libro no debe depender de la capacidad económica del lector.
La idea detrás de la propuesta de destinar el IVA para las adquisiones se basaba en que toda la campaña a favor de la Ley del Libro había creado en el imaginario nacional la idea de que solo a través de la compra se podría acceder a un libro. En consecuencia, quedaba claro que si debíamos proponer una Ley del Libro y Promoción de la Lectura no podíamos descuidar el papel de las bibliotecas ya que es en ellas donde los lectores podían acceder a libro sin tener que adquirirlos.
Si bien los demás sectores estuvieron de acuerdo con la propuesta de inmediato, la aceptación de libreros y editores tomó un poco más de tiempo ya que el IVA había sido una parte central de sus demandas sectoriales. Pero al final quedó plasmada en las últimas versiones del Anteproyecto de Ley del Libro la propuesta de que el monto que se pagaba de IVA se distribuya entre las biblioetcas municipales del país para que ellas puedan adquirir libros.
Y fue este último anteproyecto el que se presentó al Gobierno de Carlos Mesa el año 2005 a través del Vice Ministerio de Culturas. A finales de Mayo nos citaron a una reunión en el entonces Ministerio de Hacienda, pero los eventos de ese año impidieron que la reunión se realice y al final debimos esperar hasta el año 2010 para retomar las gestiones.
A finales del año 2012 fuimos convocados por el Ministro de Culturas, Pablo Groux, para tratar nuevamente la Ley del Libro. Presentamos nuestro último Anteproyecto, pero el Ministerio decidió utilizar la Ley Tipo que propone el CERLALC como la base para el Anteproyecto Final.
Se nos dijo que el Ministerio prefería mantener la exención del IVA porque era compromiso del Presidente Morales lograr que el Ministerio de Economía la acepte. Todos los miembros de la delegación de la Cámara del Libro mencionamos que considerábamos que el efecto de mantener el IVA fortaleciendo los presupuestos de adquisiciones de las biblioteca era mayor que el de la simple exención.
Al final se impuso la visión del Ministro y el Anteproyecto que se presentó, negoció y promulgó incluyó la exención del IVA junto con los siguientes puntos:
- Creación del Comité de Promoción del Libro y la Lectura.
- Propuesta de un Sistema Nacional de Bibliotecas sin mención clara de su estructura.
- Creación de un fondo de promoción del libro.
- Declaración de la obligación del Estado de promover la creación de librerias y bibliotecas en todos los municipios del país.
A pesar de la ausencia de las recomendaciones de la Cámara del Libro, la nueva Ley culminaba un largo proceso y el gremio en general la recibió con optimismo.
