Melania Trump y la importancia de las microexpresiones

La gestualidad facial es el medio principal para expresar y reconocer el estado emocional de las personas.

La cara humana cuenta con 43 músculos, los cuales nos permite realizar una gran cantidad de expresiones. La musculatura facial, la mayor parte del tiempo, es controlada de manera consciente, permitiéndonos regular una cantidad de gestos prácticamente infinita, siendo una gran ayuda para indicarle al mundo cuál es nuestro estado de ánimo. Este control facial, también permite al ser humano falsear su estado emocional, es decir, existe la posibilidad de expresar un estado emocional que no sentimos, o de ocultar nuestra emoción genuina por otra expresión.

Con mayor o menor destreza todos somos capaces de controlar nuestra expresión emocional, sin embargo hay personas que se ven en la necesidad de desarrollar esta habilidad de una manera más precisa. En aquellas personas que son figuras públicas o que trabajan en constante contacto con otras personas la capacidad de mostrar una emoción acorde a lo que requiere la situación supone una importante ventaja a la hora de desarrollar tu trabajo. Todos sabemos que si dos bares cercanos te sirven la misma cerveza al mismo precio irás al que mejor atención te ofrezca su camarero.

Recientemente se hizo famoso un video en el que aparecía Melania Trump, mujer del recién nombrado presidente de los Estados Unidos, Donald Trump, durante la sesión de investidura de este. En un momento del discurso, el presidente se gira para dirigirse hacia su esposa, la cual le responde esbozando una ligera sonrisa. Sin embargo, en el momento en el que Donald Trump se vuelve a girar hacia la audiencia, la expresión facial de la primera dama cambia bruscamente, mostrando una marcada emoción de tristeza.

¿Es posible que su estado emocional cambiase de una manera tan brusca y repentina?

Para responder a esta pregunta es necesario aludir a los estudios de Paul Ekman sobre las expresiones emocionales. Este autor consiguió demostrar que a la hora de percibir emociones es necesario fijarse en lo denominado como microexpresiones, pequeños movimientos de carácter momentáneo e involuntario que permiten detectar si una expresión emocional es verdadera o no. La expresión de las denominadas como emociones básicas (sorpresa, miedo, asco, ira, felicidad y tristeza), presenta una serie de microexpresiones características que permiten detectarlas, además estas expresiones son universales en la raza humana, es decir, todas las personas independientemente de su país o su cultura muestran una expresión similar. Para la detección de estas microexpresiones es necesario fijarse en las denominadas unidades de acción, los músculos de la cara que producen las expresiones.

En base a esta premisa, podemos analizar la expresión facial de Melania Trump. La emoción de felicidad se caracteriza por el levantamiento de las comisuras de los labios, y de las mejillas y por la aparición de arrugas en las esquina de los ojos, las famosas “patas de gallo”; si todas estas microexpresiones se dan correctamente estamos ante una expresión genuina, también conocida como Sonrisa de Duchenne. En el video se observa cómo en el momento de expresar felicidad eleva la comisura de los labios levantando las mejillas, pero no se producen estas “patas de gallo”, además la duración de la misma es muy breve, tan sólo 4 segundos, y su desvanecimiento es muy brusco, cambiando hacia una expresión de tristeza.

Sin embargo, a pesar de poder analizar las emociones mostradas en el video, las imágenes no pueden explicar qué otros factores o hechos han podido afectar en los sentimientos de la primera dama, eso es algo que solo el presidente y Melania conocen.