10 cosas que no sabías sobre lo que perjudica el cigarro a tu Piel

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4 min readJul 11, 2018

Por la Doctora Alaíde Peña Corona, Doctora en Dermatología.

En múltiples ocasiones hemos escuchado que fumar es malo porque causa cáncer y enfisema pulmonar, vemos que las cajetillas vienen plagadas con múltiples imágenes terribles de lo que puede causar en dientes, embarazo y pulmones, pero pocas veces es de nuestro conocimiento lo nocivo que puede ser el consumo de este producto para nuestra piel.

El humo del cigarro contiene, entre muchos de sus ingredientes, monóxido de carbono, que causa alteraciones en los niveles de oxígeno en todo el cuerpo, en la piel existe una microvasculatura, cuando el flujo sanguíneo es bueno y se tiene un adecuado aporte de oxígeno la piel se nota brillante y fresca; en cambio si este no es el necesario se torna opaca y pálida.

El humo del cigarro contiene monóxido de carbono

La nicotina hace que la protección contra radicales libres de oxígeno que tiene nuestra piel no sea efectiva dando lugar junto con otras de las más de 150 substancias dañinas que tiene el humo del cigarro a diversas alteraciones:

  1. Estrías y flacidez. Ocasiona rápidamente envejecimiento, acelerando la pérdida de colágeno, con subsecuente disminución de la elasticidad y dejando como resultado estrías y flacidez, de predominio en abdomen y caderas.
Estrías en cadera a pesar de ser una mujer delgada y en forma.

2. Envejecimiento prematuro y arrugas. En promedio los fumadores lucen 1.4 veces más viejos que los no fumadores, esto se debe a que el fumar disminuye el aporte de flujo sanguíneo lleno de oxígeno que permite que una persona se vea sana y saludable.

Los fumadores pueden lucir 1.4 veces más viejos que los no fumadores.

3. Cáncer de piel. El tabaco es un factor de riesgo para múltiples cánceres, entre ellos para el cáncer de piel, en específico del carcinoma epidermoide. En diversos estudios se ha encontrado que el riesgo con respecto a la población general de hasta 2 veces más de tener este tipo de cáncer.

Un Fumador es más propenso a presentar Cancer de Piel.

4. Bolsas en los ojos y ojeras. Cuando se fuma se ha encontrado que no se tiene un sueño reparador, 4 veces menos que en pacientes que no fuman.

Un fumador aunque sea joven normalmente presenta bolsas en los ojos.

5. Infecciones. El tabaco interviene en los procesos inmunológicos (sistema de defensas) lo cual deja susceptible a no poder defenderse de diversos patógenos como virus del papiloma humano responsable de las verrugas genitales.

6. Psoriasis. 70% de los pacientes con psoriasis iniciaron con el hábito tabáquico antes de tener su primer brote de psoriasis, y se ha observado que los pacientes que dejan de fumar presentan mejoría disminuyendo la tasa de brotes de esta enfermedad, caracterizada por lesiones rojas, con escama y engrosadas.

Un paciente que deja de fumar disminuye notablemente la psoriasis.

7. Cicatrización. Fumar reduce la capacidad de reparación de heridas ya que la nicotina es un vasoconstrictor potente que reduce la circulación sanguínea que causa que no lleguen células fundamentales para la reparación celular, lo cual provoca cicatrización lenta y mala de heridas.

8. Adelgazamiento del cabello. Los genotóxicos que libera el tabaco causan daño al ADN del folículo piloso, con su consecuente adelgazamiento y caída, si estás buscando un cabello abundante, hidratado y sedoso definitivamente el fumar no es opción.

Los genotóxicos del tabaco adelgazan el cabello.

9. Canas. El tabaquismo está también relacionado con las canas, en un estudio se encontró que incluso las personas fumadoras tienen un riesgo de presentar canas hasta 1.9 veces más que aquellas personas que no fuman.

Aparición de canas prematuramente.

10. Arrugas alrededor de la boca. Los fumadores tienden a usar en exceso los músculos alrededor de la boca. Este movimiento repetitivo causa que se marquen múltiples líneas alrededor de la boca, dando la apariencia de una “bolsa de jareta” (arrugas de fumador).

Arrugas muy marcadas en la boca.

Si eres una fumadora asidua que no piensa dejar de fumar, recuerda tener más cuidado en tu hidratación diaria, toma abundante agua natural mineralizada, busca que los productos que uses tengan mayor penetrabilidad, y haz ejercicio para mejorar la oxigenación en tu piel.

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