La mariposa Lola
Reto 1: un libro y una madre
Había una vez una mariposa llamada Lola. Un día estaba paseando con su madre Flora por el bosque cuando de repente hubo un terremoto, los árboles se caían, todo temblaba. Lola tenía mucho miedo. Cerró los ojos y cuando se dio cuenta su madre no estaba. Lola era muy pequeña y no sabía qué hacer.
¿Se habrá perdido? ¿estará muerta? Ella estaba muy nerviosa. No sabía donde ir.
Después de un rato vio a una familia de una mama y 2 niños. Se acercó a ellos, pero los niños, llamados Tomás y Gabriel, la espantaron con muy malos gestos. Su madre, Melisa, fue directa a explicarles la importancia de las mariposas y de la Naturaleza. Sacó un libro enorme con dibujos fantásticos de todos los animales del bosque y todos los días aprendían cosas nuevas sobre ellos.
Pero Lola se fue triste porque se sentía rechazada y quería encontrar una familia cuanto antes posible, ya que se sentía muy sola. Vio pasar a una mariposa mayor y se fue con ella, la otra mariposa se llamaba Carlota. Ella no servía como una buena mamá ni para Lola ni para nadie. Se dio cuenta gracias a que un día estaban las dos pasando por una cascada para recolectar desayuno y Carlota dejo que Lola casi se ahogase.
Lola abandonó la casita de Carlota y decidió seguir sola su camino. Cuando de repente, volvió a encontrar a Tomás que le dijo que todos estaban muy tristes porque su papá había muerto después de mucho tiempo enfermo. También le dijo que se sentía muy mal por no haberla tratado mejor, pero que, si quería, podía ir a casa con ellos. Lola se puso muy contenta al saber que ahora tendría una familia, aunque nunca se olvidaría de su querida mamá mariposa.
Mi nombre es África, tengo 10 años, y he escrito esta historia para dedicársela a mi querida abuela Feli, que le mando muchos besos desde Costa Rica hasta el cielo. Te quiero, abuela.
