The attitude
La actitud
Nothing is more wretched than the decayed and hollow tree, showing only its bark and agony. Contrary to the healthy tree that blooms in spring, full of life, energy and hope, with much to give.
Thus man can live or die his life, it is pure choice. There are people who go through life living it and others do it dying, some live each day enjoying what they have, grateful to be alive, others think about the end, about how much they lack and how much they have left.
The attitude places us in front of life to be the way we are. How, how much and in whom we think shows how we are. How much it is worth to have and to give, to suffer and to enjoy, to live or to die.
Life changes radically according to the point of view with which we pass through it. The intentions generated by our actions are added to those of others and generate an energy field that guides the destinies of humanity and consequently of the planet we inhabit.
Therefore, it is evident that this group of beings of which we are a part, needs a change in the system of thought and beliefs in order to put into practice a new order that will save us from the disaster we are heading towards. Humanity through its own experience should realize how low its vibratory level has fallen, the environment feels dense.
The work to reverse it is individual and then by summation it can become general and global. In other words, the responsibility is personal, unavoidable and urgent. Every moment is good to begin the transformation, so: one… two… three… now!
Translated with DeepL.com (free version)
Nada es más desdichado que el árbol carcomido y hueco, solo muestra su corteza y agonía. Al contrario del árbol sano que florece en primavera, lleno de vida, energía y esperanza, con mucho para dar.
Así el hombre puede vivir o morir su vida, es pura elección. Hay personas que recorren la vida viviéndola y otras lo hacen muriéndola, unas viven cada día disfrutando lo que tienen agradeciendo estar vivos, otros piensan en el final, en cuánto les falta y cuánto les queda.
La actitud nos ubica frente a la vida para ser de la manera que somos. Cómo, cuánto y en quién pensamos da muestra de cómo somos. Cuánto vale tener y dar, sufrir y disfrutar, vivir o morir.
La vida cambia radicalmente según el punto de vista con el que la transitamos. Las intenciones que genera nuestro actuar se suman a las de los demás y generan un campo energético que guía los destinos de la humanidad y en consecuencia del planeta que habitamos.
Por lo tanto es evidente que este conjunto de seres del que formamos parte, necesita un cambio de sistema de pensamiento y de creencias para poder poner en práctica un nuevo orden que nos salve del desastre al que nos dirigimos. La humanidad a través de su propia experiencia debería darse cuenta cuán bajo ha caído su nivel vibratorio, el ambiente se siente denso.
El trabajo para revertirlo es individual y luego por sumatoria puede llegar a ser general y global. O sea que la responsabilidad es personal ineludible y urgente. Todo momento es bueno para comenzar la transformación, así que: uno… dos… tres… ya!
