El mayor ataque con misiles
A principios de esta semana, Rusia lanzó 127 misiles y más de 100 drones kamikazes contra territorio ucraniano. Estábamos en casa el lunes por la mañana siguiendo de cerca las noticias mientras los misiles y los drones daban vueltas por todo el país. El 24 de agosto fue el 33º día de la independencia de Ucrania. A Rusia le gusta atacar en fechas tan señaladas como ésta, así que esperábamos el ataque desde hacía varios días.
La foto de arriba representa el número de misiles y drones que nuestras excelentes defensas aéreas derribaron ese día. Apreciamos mucho nuestras defensas aéreas, que trabajan constantemente para protegernos de amenazas invisibles desde el cielo. En cierto modo, esto es un gran recordatorio de cómo sus oraciones funcionan como una defensa invisible en la batalla espiritual que estamos librando. Estoy seguro de que, como resultado de vuestras oraciones, también hemos sido protegidos de las armas enemigas sin saberlo y, a veces, a sabiendas.
Con vuestra ayuda imprimimos 5.000 ejemplares de nuestro número especial de la revista evangélica «Independencia». Enviamos la revista a unas 55 iglesias y ministerios diferentes de toda Ucrania. Incluso enviamos unos 500 ejemplares a iglesias ucranianas en Alemania.
Muchos pastores repartieron las revistas durante las grandes reuniones del Día de la Independencia. Desgraciadamente, nos quedamos cortos y no pudimos entregar los más de 2.000 ejemplares solicitados. Por ello, hemos decidido imprimir otras 2.500 revistas. Las imprimiremos la semana que viene y nos vendría muy bien tu ayuda.
Max
Max es de Zaporizhzhia, Ucrania, que ha estado bajo un severo ataque ruso desde el comienzo de la invasión a gran escala. Hace unos meses se cayó de un edificio de 9 pisos parcialmente destruido por los rusos. Sobrevivió de milagro, pero se rompió el cuello y ahora está paralizado del pecho para abajo.
Desde hace dos meses, los médicos tratan a Max en el hospital regional de Odesa, que está prácticamente enfrente de nuestra casa. Los padres de Christina, Volodymr y Maria, visitan a los soldados heridos en el hospital al menos una vez a la semana con un pequeño equipo de su iglesia. Gracias a ello conocieron a Max. Descubrieron que en el hospital no se duchaba a los pacientes como Max. Así que mi suegro, junto con dos hermanos en Cristo, y yo fuimos a levantar a Max de su cama, colocarlo en una camilla y llevarlo a la ducha para lavarlo. Qué poderoso testimonio del amor de Dios. Cuando Max preguntó: «¿Por qué haces esto?». La respuesta fue sencilla: «¡Por Jesús!».
Pude ver como una luz volvía a los ojos de Max después de recibir esa ducha. Pero también hubo lágrimas: «¡No tengo a nadie, ni familia, y no soy bueno para nadie, pero ahora tengo tan buenos amigos aquí!». Dijo, con la voz un poco temblorosa mientras luchaba contra las lágrimas. Le explicamos el Evangelio y pareció aceptarlo. Recé por él, por un verdadero arrepentimiento y por su curación, no sólo física sino también espiritual.
Max se va esta semana a la región de Kiev, donde ha encontrado una residencia asistida. Por favor, recen por él.
Bombardeo a la escuela dominical
En mi última carta les escribí sobre el pastor Oleg y cómo los rusos habían bombardeado el coche de su familia. Lamentablemente, esos malhechores no se detuvieron allí. Pocos días después bombardearon la escuela dominical de su iglesia. Desgraciadamente, algunos de los hijos del pastor Oleg resultaron heridos en el atentado. Afortunadamente, no es nada demasiado grave y parece que todos se recuperarán completamente.
Lamentablemente, los rusos han intensificado considerablemente los bombardeos en este barrio, atacando a menudo a ciudadanos, familias, con niños y ancianos. Como consecuencia, la familia del pastor Oleg se vio obligada a mudarse de su casa a un lugar más alejado del río y con menos riesgo. Los servicios de su iglesia también tuvieron que trasladarse a un lugar más seguro. Por favor, reza por la «Iglesia Luz del Evangelio», en Kherson. Rezad por su seguridad y por la continuidad de su ministerio en tiempos difíciles.
Rezad por Pokrovsk/Myrnohrad
Durante casi 10 años nos hemos asociado con el hermano Oleksandr. Le ayudamos a plantar iglesias en el frente desgarrado por la guerra. Desafortunadamente, todas esas aldeas han sido destruidas y tomadas por las fuerzas rusas. Oleksander y su esposa se quedaron todo el tiempo que pudieron. Hace poco, incluso bautizaron a uno de los refugiados de una iglesia plantada en un pueblo que, lamentablemente, ya no existe.
Arriba, un edificio de Myrnohrad alcanzado recientemente por una bomba planeadora rusa.
Tras un duro bombardeo reciente, me puse en contacto con el hermano Oleksandr para ver cómo estaba.
El pastor Oleksandr me escribió:
«Seguimos sirviendo aquí, pero la situación es tensa. El domingo, por la gracia de Dios, bautizaremos a una mujer de Vodone. Estamos trabajando para evacuar a la gente. Por desgracia, nuestra furgoneta se averió, pedí la pieza para ella pero todos los talleres de reparación de coches han cerrado aquí, así que no hay nadie que la repare».
Alabado sea Dios por Lena, que fue bautizada. Es una refugiada que perdió su casa y todo cuando llegaron los rusos. Ahora ha encontrado esperanza en Jesucristo y un hogar eterno. Nuestro estudio bíblico «Historia de esperanza» ayudó a Lena a ver claramente el plan de salvación de Dios.
Lamentablemente, debido al avance de las tropas rusas, el hermano Oleksandr y su congregación se vieron obligados a evacuar más lejos de las líneas del frente. Por favor oren para que el avance de los rusos se detenga y oren para que Dios proteja a aquellos como el hermano Oleksander que continúan predicando el evangelio en estas áreas difíciles ¡Sirviendo a
Jesús en Ucrania!
Caleb y Christina Suko
