El sentido arácnido en la informática

El sexto sentido que desarrollamos quienes nos desempeñamos en el campo de la informática y la importancia que tiene a nivel profesional

Por: Alejandro De Luca

Lo voy a llamar sentido arácnido porque el nombre que se me había ocurrido no es tan contundente y descriptivo como pensaba. En cambio, las habilidades de Spider-Man son mucho más conocidas por todos.

Como ustedes ya saben, Spider-Man o El Hombre Araña es un superhéroe de Marvel Cómics que tiene, entre varios de sus poderes, el “sentido arácnido”. Esto es una especie de sexto sentido que lo mantiene alerta y le permite saber cuándo está en peligro o cuándo algo anda mal.

Yo llamo sentido arácnido a ese sentido o instinto que tenemos aquellos que trabajamos en el campo de la informática y que nos permite ver un poco más allá de lo evidente.

Sentir que la computadora está funcionando más lenta de lo habitual. Percibir que el cooler está haciendo un ruido extraño. Olfatear, en el caso de los administradores de sistemas, por donde viene un problema y por dónde no. Intuir, en el caso de los programadores, que hay una línea de código que está rompiendo todo. Esos son ejemplos del sentido arácnido en funcionamiento.

El perfil de una persona con sentido arácnido incorporado es el de un informático que ama la informática, más allá de algún problema temporal que pueda tener en un mal día de trabajo, cosa que nos pasa a todos. Este tipo de personas disfruta de estar con computadoras, no sólo cuando trabaja, sino también cuando se dispersa. Le gusta investigar por cuenta propia, curiosear, jugar, ver cómo funcionan las cosas y desarrollar proyectos propios. Puede llegar a realizar experimentos fuera de su horario de trabajo, incluso realizando tareas que son muy parecidas a veces a las laborales.

Por el otro lado, quienes no tienen este don, no tienen un cariño especial por la informática y tampoco por lo que hacen día a día. Sus ratos libres suelen estar ocupados con cualquier cosa, menos con computadoras. Consideran a la informática un trabajo, una ocupación, algo que se estudia, pero no una vocación y mucho menos una pasión.

Los casos de informáticos sin sentido arácnido son conocidos: ingenieros que no saben grabar un DVD, administradores de sistemas que le tienen miedo a la terminal o analistas de sistemas que odian programar.

Para adquirir el sentido arácnido uno no necesita ser mordido por una araña radiactiva. Tampoco se resuelve estudiando. Estudiar por sí solo no sirve. Uno puede leerse todos los libros de informática, ir a la universidad y hacer todos los parciales y finales en papel, memorizarse todas las instrucciones de todos los lenguajes que existen, pero si no hay curiosidad, si no hay interés genuino en entender el funcionamiento de las máquinas ya sea a nivel hardware o software, entonces todo eso no sirve para absolutamente nada.

Por más título que se obtenga y más altas que sean las calificaciones. Una cosa es resolver exámenes y otra muy distinta, resolver problemas en el mundo real entrando en contacto directo con la tecnología.

Por lo tanto, el don se adquiere cuando uno todavía es pequeño y se va desarrollando durante la adolescencia. Navegar por internet, jugar videojuegos, usar programas P2P y abrir computadoras por diversión son algunos ejemplos que ayudan a fomentarlo. Cuando uno ya es adulto, a través de la práctica y el estudio (por supuesto que estudiar ayuda un montón) lo perfecciona llegando en algunos casos a convertirse en un verdadero ninja del área en la que se desempeña.

Así es como un programador senior llega a tener la capacidad de resolver un problema en un lenguaje que no domina, a puro instinto.

¿Qué pasa si una persona ya adulta no tiene el sentido arácnido? Lamentablemente no creo que lo pueda adquirir. Nunca estará a la altura de alguien que sí lo tiene, por más que estudie y se capacite. Y peor aún, esto se notará mucho.

La siguiente pregunta es: ¿Sirven las personas sin sentido arácnido para desempeñarse a nivel profesional? Personalmente, a excepción de algunas tareas muy puntuales, yo creo que no.

Este es un problema que debiera interesarle a las personas de recursos humanos que buscan talento para las empresas de tecnología. ¿Puede este instinto tan particular medirse a partir de información en el currículum, o a partir de un test? Si bien no lo creo, eso ya es una pregunta para otro artículo.

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