Ser una entrenadora profesional
Una goleadora de la selección peruana nos cuenta lo que no sabes de ser entrenadora de fútbol.
“Es difícil dejar de ser jugadora. No pensaba que yo iba a dejar de jugar. Para mí ese fue el momento más difícil: dejar de jugar para decidir ser entrenadora”. Dejar atrás los campeonatos ganados, los goles anotados y las alegrías conseguidas siendo jugadora de Sporting Cristal, Sport Boys y goleadora de la selección peruana.
Cuando tenía 27 empezó a estudiar para ser directora técnica. Después de estudiar dos años y obtener su licencia, empezó su nueva aventura dentro del fútbol. Dirigir conlleva una gran responsabilidad, ya que trabajas con un grupo humano. Eres un poco de psicóloga, algo doctora, intentas aconsejarlas para que esas personas a tu cargo tengan, no solo un buen desarrollo futbolístico, si no sean buenas personas.
Paciencia, perseverancia y estudio.
Sin paciencia no podrás llegar a tener una comunicación correcta con el grupo que estás manejando. La perseverancia te hará experimentar con jugadoras de todas las edades, ella en la actualidad entrena profesionales, niños y adolescentes. Si pierdas la calma se pierde la comunicación, sin comunicación no hay confianza, sin confianza no hay equipo.
La segunda virtud es la perseverancia. Ella admite que le cuesta asimilar las derrotas que pueden llegar a tener sus equipos. Pero jamás ha dejado que la derrote, en el sentido de lograr lo mejor para el equipo. Insistir en los entrenamientos, planificar cada partido, lograr que un equipo logre una identidad y que los jugadores asimilen y muestren en el campo todo lo trabajado son cosas que se logran a base de perseverancia.
El tercero es siempre mantenerse al día, el fútbol está en constante cambio. Cada vez es más rápido, más dinámico y más táctico. No es cuestión de estudiar un curso y sacar tu licencia, ya que tenerla es solo la primera fase. Luego de ello vienen las constantes capacitaciones, cursos o seminarios para mantenerte a la vanguardia del fútbol moderno. Salinas es una de las pocas entrenadoras top del medio peruano.
Ser mujer en el mundo del fútbol
Con casi 18 años de experiencia, nos cuenta que no siempre es fácil ser mujer dentro mundo del fútbol. La discriminación ha sido parte de su crecimiento, para convertirse en unas de las mejores del fútbol femenino peruano.
Ella nos relata cómo padres de niños y adolescentes, no la querían como entrenadora de sus hijos por el simple hecho de que creían que no sabía de fútbol.
“Al ser única entrenadora dentro del staff — Scola del FC Barcelona en Perú — los papás como que no querían que ninguno de sus niños estén conmigo. Por qué decían que una mujer entrenando no es normal para ellos. Piensan que un técnico hombre le puede enseñar mejor a sus hijos”
Claro una vez que ella empezó a mostrar su trabajo, empezó a ganarse un lugar entre los demás entrenadores. Al punto de cerrar las bocas de los padres de ciertos niños. “En Barça aunque al inicio no fue una experiencia muy linda, pero ya después fue mejorando a lo largo de los 7 años que trabajé ahí, casi todos los chicos y los papás querían que yo los dirija”.
La jugadora ideal
Para Salinas una jugadora sin disciplina no durará mucho, de talento no se vive en el fútbol, hay que ser constante en los entrenamientos, alimentación y sobre todo en mejorar su superarse día a día. Una profesional debe ser capaz de tener hábitos que le permitan rendir siempre que tenga una oportunidad en la cancha. Pero también es algo mental. Debe darse por completo al deporte, comprometerse con él. Entiende todos los sacrificios qué deberá hacer, para poder convertirse en una profesional. Si es disciplinada y comprometida, solo le queda ser perseverante. No rendirse.
Estos tres pilares tienen que ir en paralelo poder ser una futbolista ideal. Alguien que Olenka Salinas esté dispuesta a trabajar con ella sin descasar.
—Seguir intentando cada vez que te salga más un pase, mejorar día a día tu condición física y sobre todo ser una profesional en todo sentido.
“Para qué sea una jugadora ideal tienes que entrenar así nadie te vea. Si yo quiero ser la mejor pues me voy a esforzar, voy a ser la primera en llegar al entrenamiento, voy a ser la última en irme, me voy a esforzar siempre en los partidos, voy a ayudar a mi equipo. Creo que eso es lo fundamental para que una jugadora hoy en día sea la ideal.” El trabajo duro hace que el talento florezca. Salinas aún sigue en constante crecimiento como entrenadora. Ella aspira a ser como su ídolo y ejemplo a seguir, Pep Guardiola. Sabe que su esfuerzo que le imprima a cada día de trabajo es su aporte a cambiar el fútbol femenino en Perú. Por qué ser entrenadora es un trabajo de tiempo completo.
