Francisco Huerta: El correísmo mantenía connivencia con el narcotráfico

FRANCISCO HUERTA MONTALVO LO DICE SIN AMBAGES: SI ANTES NO SE DESATÓ LA VIOLENCIA EN LA FRONTERA COMO EN LOS ACTUALES NIVELES, FUE PORQUE EN EL ANTERIOR GOBIERNO HABÍAN COMPLICIDADES CON EL NARCOTRÁFICO. LA CRISIS ES GRAVE, REAFIRMA HUERTA, Y LA MANERA DE ENCONTRAR LA SALIDA ES CON UNIDAD NACIONAL Y CONTANDO CON LAS AUTORIDADES COMPETENTES PARA CARGOS SENSIBLES.

La situación en la frontera norte parece que se escapa de las manos. Atentados con bombas, secuestro de periodistas, violencia….y el gobierno no da señales de tener luces claras para manejar la crisis.

El país miró con mucha complacencia la actitud asumida por el nuevo gobierno respecto a la corrupción del anterior y también en relación a la libertad de expresión, pisoteada por el correísmo. Se invitó al diálogo y asistimos complacidos. Pero de ahí para acá, con el resultado de un juicio y condena por asociación ilícita contra el ex vicepresidente de la República -que significa la pena de menor cuantía- no ha pasado nada más en la lucha contra la corrupción, no se han tomado las medidas económicas pese a que se reconoce que la mesa no estaba servida, y se van complicando las cosas, más con el paso de los días. Ahora se une el narcoterrorismo que predomina en la frontera norte. También matan a tiros a la directora de la cárcel de Guayaquil. Si a eso unimos la impunidad de los abusos a nuestros niños y la corrupción espeluznante que el propio presidente Moreno descubrió, la pregunta es ¿por qué no se toman medidas? ¿Qué impide que el presidente tome definiciones en algunos temas críticos para la nación? ¿Por qué la tabla de drogas sigue vigente, sabiendo que eso fomentó el microtráfico? ¿Por qué la ley de Comunicación sigue vigente, sabiendo que es una ley Mordaza? ¿Por qué mantiene la ambigüedad en el caso Venezuela, donde dice Moreno que hay demasiados muertos y demasiados presos, pero sus ministros declaran otras cosas? Se complican tanto las cosas que ya tienen que admitir que el IESS está quebrado. Con todo eso, hace rato debió plantearse un gobierno de unidad nacional, porque sin esa unidad será imposible avanzar con la situación actual. Eso implicará dejar de ser el partido que ganó las elecciones y abrirse a todo el país. No veo otra alternativa y si esto no se da, vendrá otro periodo de inestabilidad porque la oposición tratará de aprovecharse la debilidad del gobierno sin beneficio de inventario para la República.

¿Por qué cree usted que la violencia en la frontera se desata en los últimos meses, durante el actual gobierno, y no ocurrió lo mismo durante el correísmo? ¿Cuál es la diferencia?

Porque el correísmo mantenía un nivel de connivencia con el narcotráfico. Desgraciadamente. Y lo dijimos a su tiempo, hace nueve años: que estábamos en riesgo de convertirnos en una narco democracia. Y ese riesgo no se tomó en serio. Ahora ya no es un riesgo, ya somos una narco democracia, que durante un periodo fue una narcodictadura. No porque los dictadores hayan sido los narcotraficantes, pero sí porque permitían que los narcotraficantes hagan en el Ecuador lo que ellos querían.

Connivencia es complicidad.

Por eso había tranquilidad. No se metan conmigo, yo mismo les digo por donde voy a mandar droga para que tengan algunas capturas, y así hacemos las grandes cosas por otros lados. Eso ya se sabe. Nosotros descubrimos en la investigación de Angostura la enorme penetración del narcotráfico que en ese momento ya se daba. No puede haber magnitud del narcotráfico como la que hemos enfrentado sin complicidades de alto nivel. Complicidades en Fuerzas Armadas, en la Policía, y en los altos mandos del gobierno. Eso es lo que ha estado ocurriendo.

Nosotros descubrimos en la investigación de Angostura la enorme penetración del narcotráfico que en ese momento ya se daba. No puede haber magnitud del narcotráfico como la que hemos enfrentado sin complicidades de alto nivel. Complicidades en Fuerzas Armadas, en la Policía, y en los altos mandos del gobierno. Eso es lo que ha estado ocurriendo.

¿También en los ministerios?

Y más arriba, por supuesto. Eso tiene que investigarse, tiene que conocerse a fondo. Tiene que revelarse como se dio el financiamiento del Mono Jojoy a la campaña electoral de Correa. Esa fue la primera inquietud de la investigación de Angostura. Ese video existe, así se haya dicho después que fue manipulado, allí el Mono Jojoy revela que han dado dinero a la campaña del compañero Correa.

Esa investigación quedó allí, a medias.

Nosotros la presentamos, pero no se la asumió como válida. Nosotros chequeamos los videos y no habían sido retocados ni manipulados. Y los señores Ostaiza me dijeron que ellos consiguieron que el Mono Jojoy desmienta la afirmación de la donación. Todo eso tiene que esclarecerse y allí se responderá aquelló de porqué antes hubo tranquilidad en la frontera, una connivencia, un status quo, y ahora, de repente, todo se altera.

El gobierno de Moreno ha dicho que son represalias porque han dado golpes fuertes al narcotráfico y eso ha desatado la guerra.

Sin duda. Y están probándonos hasta donde resistimos. La única forma de garantizar que no nos dobleguen es con un gobierno de unidad nacional.

Pero un gobierno fuerte…

Un gobierno con la mano suficientemente fuerte como para que las cosas ocurran. Pero hay que predicar con el ejemplo. Si no combatimos hacia adentro los vínculos y si no perdemos esa ingenuidad con la que estamos manejando las cosas…¿Qué quiero decir con la mano dura hacia adentro también? Que a mí me aterra ver que los que estaban piloteando una narco avioneta que terminó incendiada, ya habían estado presos antes por temas de drogas. Y aún así los soltaron, ya están libres. ¿Hay o no complicidades internas? Eso hay que investigar a fondo. La droga contamina por su poder económico. Y eso ocurre no solo en la policía, también lo hemos visto con militares. Y, por supuesto, en altos mandos políticos.

La droga contamina por su poder económico. Y eso ocurre no solo en la policía, también lo hemos visto con militares. Y, por supuesto, en altos mandos políticos.

Esto parece el caso de una bomba que todos sabíamos que iba a estallar. Que era solo cuestión de tiempo.

Con el tema de la paz en Colombia, se propició mayor velocidad en este asunto.

No es nada nuevo decir que el puerto de Guayaquil se ha convertido en un punto estratégico para la salida de droga que llega de Colombia y Perú. Y nadie pide explicaciones a la empresa que controla el puerto.

Esas son las cuestiones que quedaron intocadas en el régimen anterior y que siguen irresueltas en el actual. Muchas de las cosas que han pasado en estos diez meses de Moreno, son una continuación del correísmo, lo que es preocupante. Nadie ha hecho tanto contra Correa como Moreno, pero esa condición no siempre es propicia para un análisis positivo. García Moreno decía “sírvete de la traición, pero desprecia al traidor”.

¿Cómo puede manejar el tema de la frontera norte el gobierno de Moreno, sabiendo que quienes atacan son desertores de las FARC y este gobierno tiene en su interior simpatizantes de la lucha bolivariana? Allí están la vicepresidenta, el ministro de Defensa, por citar dos ejemplos.

Hay contradicciones y ambigüedades. En el caso de Venezuela no puede ser más flagrante la ambigüedad. El presidente dice que hay demasiados muertos y presos políticos -no sé cuantos son demasiados- pero los otros defienden a Maduro. Y a propósito, ¿que posición vamos a llevar a la cumbre de Lima sobre Venezuela? En temas de Derechos Humanos es obligatorio intervenir. Pero acá se proclama la no intervención.

¿Un primer paso no sería que el gobierno ponga a la gente más preparada para asumir funciones tan delicadas como la Defensa, por citar un caso?

Claro que sí y cualquiera que sea el partido al que pertenezca. Por supuesto. Necesitamos referentes éticos en un momento de descomposición como el actual y por eso preparamos un homenaje a Julio César Trujillo en Guayaquil para el 12 de abril. Alianza País ganó las elecciones, pero ha cometido tantos errores que el gobierno no puede ser solo de Alianza País. En la Asamblea tiene que abrirse a los mejores legisladores para que comience a funcionar como debe ser.

Moreno ordenó eliminar la Senain, pero la Inteligencia debería preservarse para problemas como los que hay en la frontera.

Eso es clave, incluso es más importante que usar solo la fuerza. Nosotros no estamos preparados, caímos en una trampa. No hay ningún entrenamiento para esta clase de fuerzas y luego el ministro le dice a todo el mundo que van a mandar 100 fusiles. Eso pone en alerta y significa lo vulnerables que estamos. Nos han cogido con los pantalones abajo. Esa es la tragedia que ya ocurrió en Angostura y ahora, diez años después, resulta que otra vez no tenemos nada. No hay presencia del Estado ecuatoriano, ni tampoco del colombiano. Al norte limitamos con la selva, por no decir que limitamos con los disidentes de las FARC.

Eso hay que reclamar al gobierno colombiano, su nula presencia. Entonces no se entiende el sentido de las reuniones binacionales que se hacen anualmente, a nivel presidencial.

Esas reuniones por lo menos sirven para intercambiar información, para decir que vamos a hacerlo. En la práctica, no se ve a los colombianos buscando a los periodistas secuestrados de El Comercio. A propósito, mi solidaridad con ellos y sus familias. Nos faltan tres y los queremos vivos. No estamos preparados para manejar estas crisis.

Se dijo que a raíz de la paz en Colombia, la situación para Ecuador se complicaría.

Se lo anunció, sabíamos que algunos grupos disidentes comenzarían a operar desde acá. En Esmeraldas ya operaban hace rato. Todo está advertido, pero no hay la capacidad de estadistas para asumir las advertencias y tomar las acciones necesarias.

¿Parte de la solución sería buscar ayuda internacional?

Creo que no queda alternativa. Estados Unidos es uno de los países que tiene la mejor tecnología para este tipo de combates y hay que buscar su cooperación. Igual pedírsela a Colombia y México. Hay que dejar de lado el bobo ideologismo.

¿Esa ayuda puede significar tener otra vez bases extranjeras?

A tanto no, porque nos comprometería a meternos en un conflicto que no es nuestro. Pero es evidente que si contáramos con una base se hubiera dado mejor combate al narcotráfico. Ahora la Constitución impide tener bases extranjeras, pero manejando información será suficiente.

¿No hace falta que el país tenga un baño de verdad respecto al dinero sucio que se mueve en nuestra economía? Y como finalmente nos conviene que ingresen dólares al sistema, todos preferimos ver para otro lado.

Por supuesto. La crisis nos está haciendo perder valores, definitivamente. Nos volvemos oportunistas. Hay que saber vivir, dirán algunos. Seguramente la directora de la cárcel de Guayaquil hizo algo que no convino y por eso la abalearon. Hay muchos puntos flacos por esta desmoralización del país. No hables mucho del lavado, porque de eso está viviendo la banca en el país, me dijeron cuando teníamos el informe de Angostura. Ese tipo de comportamiento son los que hay que sacudirlos y dejarlos fuera. Eso puede ser explicable, por el momento, pero no puede ser la ética permanente del país. Ese utilitarismo es exagerado, está carcomiendo las bases de la República.

Marlon Puertas