Entre azules y rosas

Me gusta jugar con los nenes: correr bici, un dos tres pesca’o, rescate, escondite, tira y tápate; pero ya no puedo jugar más con ellos. Me dicen que los nenes van con los nenes y las nenas van con las nenas. Ya nadie me hace caso, ni los nenes ni las nenas. Los adultos me dicen malcriada, que me enojo mucho y que por eso es que ya no tengo amigos. No sé a dónde irme:
Soy violeta entre azules y rosas.

Las nenas se esconden y los nenes se burlan. Solo los adultos me escuchan. No pertenezco en ningún lado; confundida entre gallitos y canicas. Ahora paso las horas encerrada, apretando botones, repitiendo patrones y pasando mis videojuegos: Star Fox, Yoshi, Kirby Pokémon, Mario Kart… No he logrado construir una identidad genuina. Me presento de una forma y en las fotos nunca sonrío. Ser terca se ha convertido en mi armadura. Mamá y papá no hablan… No entiendo qué está pasando. Cada cual por su propio camino y en el limbo me han dejado. Hoy todo cambió:

Ahora amar es color gris.

No tengo un mundo perfecto como los que rescato en el Nintendo. Quisiera reiniciar mi vida y arreglar todo lo que salió mal. Siempre estoy molesta porque hay demasiadas expectativas… Intento encajar en un grupo y no me encuentro, solo decepción. En mi mente hay transparencia, por eso sufro el daño. Ajena de la verdad me doy cuenta que lo claro es difuso.