Historias paralelas: ¡Un día en la vida de otro Friendz!
Si hay algo que tenemos claro es que Friendz no es una empresa como las demás. Desde el principio de nuestra historia, el cómo fue creada y su curso en el mundo profesional, hemos intentado siempre crear una empresa innovadora en el sector que rompiese todos los esquemas y formar un equipo único.
Nuestro equipo es nuestra prioridad. Empezamos siendo solo tres chicos ilusionados y con mil sueños por realizar. Hoy en día, después de todo nuestro sacrificio, somos un equipo de 25 personas. Cada uno de nosotros ha aceptado con ilusión nuestro modo de pensar y de hacer las cosas. Nuestra idea, desde el principio, ha sido que cada uno de nosotros aprendiésemos, en mayor o menor medida, a realizar todas las actividades dentro de Friendz para poder contar con un grupo polifacético.
Por este motivo, hoy hemos decidido que cada uno abandonase su puesto de trabajo para adaptarse al de otro Friendz. Todos hemos tenido que dejar a un lado nuestra rutina y todo lo que teníamos pendiente por hacer para ponernos en la piel de otra persona y, por un día, realizar sus tareas. Y es así como los creativos,de repente, se han visto delante de toda la comunidad; los account se han encontrado gestionando las ventas de la tienda online, etc.
Cómo funciona
Un día antes del experimento, mandamos un correo electrónico a todos explicando las “reglas del juego” y el puesto de trabajo que tenían que desarrollar, aunque en ningún momento teníamos claro qué debíamos hacer nosotros y, sobre todo, si lo haríamos bien o no.
Nada más llegar a la oficina, cada uno de nosotros hemos escrito en un post-it la persona que nos había tocado ser y nos hemos dividido por grupos de trabajo. Por ejemplo, uno de nuestros diseñadores grafico ha hecho el trabajo de comercialista todo el día, en el que ha tenido que realizar y responder llamadas de todos los proveedores y clientes, pero en ningún momento el diseñador grafico podía preguntarle a su compañera de ventas el qué o cómo responder a esas llamadas.
“Pero, ¿y cómo lo hago?”
“¿De verdad haces todo el día este trabajo?”
“Y esta fotografía, ¿la tengo que aprobar o no?”
“Ahora seriamente, ¿CÓMO LO HAGO?”
Al final del día, hemos tenido que escribir un correo en el que hemos expresado nuestra opinión sobre el día de hoy, qué nos ha gustado más y qué menos del trabajo de nuestro compañero. Y a su vez, hemos tenido que escribir lo que nuestro compañero ha hecho bien y lo que ha hecho mal de nuestro trabajo.
Las dos personas que han trabajado mejor en este experimento y que han sabido responder correctamente a todos los problemas que les han surgido a lo largo del día, en un puesto de trabajo que no les corresponde, han ganado una cena.
Es un experimento positivo en el que cada uno de nosotros ha podido ponerse en la piel del otro, y así ser conscientes la dificultad de su trabajo.
Mañana volveremos todos a nuestra rutina y a la normalidad, cada uno en nuestro puesto de trabajo y nuestra zona de confort, pero hoy hemos aprendido que no podemos relajarnos y dejarnos llevar por una rutina, y que existen momentos en los que debemos abandonar nuestra comodidad profesional y armarnos de valor para mejorar.
Este es nuestro espíritu y nuestro modo de trabajar. Si quieres unirte a nosotros y compartir nuestro entusiasmo.
¡TE ESPERAMOS EN LA APLICACIÓN!
