Seré un senador para Arizona

Si soy elegido, no seré un senador demócrata o republicano

Esta pieza fue publicada originalmente por el Arizona Republic el 23 de octubre del 2020.

Hace unos meses, tuve una conversación con una arizonense que se llama Ofelia. Hablamos por Zoom, como ocurren tantas conversaciones en estos días, con ella en la mesa de su cocina en Mesa y yo en mi casa en Tucson.

Ofelia es una persona de la tercera edad con ingresos fijos y me contó cómo el aumento del costo de los medicamentos recetados creó dificultades financieras.

Su hijo tenía una discapacidad debido a una lesión y ella estaba batallando para pagar el costo de sus medicamentos y sus otros gastos semanales, como los comestibles.

A medida que nos acercamos al día de las elecciones, pienso en arizonenses como Ofelia y en lo mucho que necesitamos liderazgo independiente en Washington para abordar los problemas que enfrentamos.

La ciencia ha guiado mi carrera

He aprendido tanto como piloto de combate, ingeniero y astronauta. He pasado mi vida usando la ciencia para resolver problemas y cumplir misiones difíciles. Esa es la experiencia que puedo aportar al Senado para trabajar para Arizona.

Tantos arizonenses están perdiendo el sueño porque no pueden pagar por su cobertura médica, porque están sin trabajo durante esta pandemia, y porque sus hijos están batallando con el aprendizaje virtual. Pero observando cómo ha respondido Washington, no lo sabrías.

Han pasado seis meses desde que el Senado aprobó el último paquete de ayuda de COVID-19, y desde entonces, el Senado se ha ido de vacaciones cuatro veces.

Primero, debemos controlar el COVID-19

La verdad es que tenemos una crisis de salud pública, que provocó una crisis económica, y ambas se han agravado por una crisis de liderazgo.

Los casos están aumentando en Arizona y en todo el país por tercera vez, y los arizonenses todavía se preguntan: ¿cuál es el plan?

Primero, tenemos que lidiar con la crisis que tenemos ante nosotros al controlar la propagación del virus. Eso requiere una estrategia nacional con más pruebas y rastreo de contactos, y que trabaje con los gobiernos estatales para garantizar que todos sigan las pautas de salud pública, como el uso de mascarillas y el distanciamiento social.

Esta pandemia ha llevado a nuestro sistema de atención médica al borde del abismo, y es fundamental que reduzcamos el costo de la atención médica para los arizonenses y defendamos las protecciones para aquellos con condiciones preexistentes. Cuando contraer el coronavirus podría significar una vida entera con una condición preexistente, estas protecciones nunca han sido más importantes.

El bienestar económico de los arizonenses está en riesgo

Sin embargo, los líderes republicanos en Arizona hicieron una demanda para eliminar las protecciones para las personas con condiciones preexistentes, la cual la Corte Suprema de los Estados Unidos podría considerar pocos días después de las elecciones. Esto muestra que tan equivocadas están las prioridades de Washington. También lo demuestran los acuerdos secretos del senador Mitch McConnell para bloquear alivio adicional del COVID-19.

Innumerables pequeños negocios en Arizona están luchando para mantener sus negocios abiertos.Y cientos de miles de arizonenses que han perdido sus trabajos sin ninguna culpa están tratando de sobrevivir con solo $240 por semana.

Una recuperación económica requerirá proteger los empleos existentes y mantener a las familias a flote, y después crear empleos del futuro y preparar a los arizonenses para ellos.

Eso significa enfocarse en la ciencia y la tecnología, extender el crédito tributario por inversiones para proyectos eólicos y solares, e invertir en educación STEM (ciencia, tecnología, ingeniería y matemática, por sus siglas en inglés) y capacitación laboral para que los jóvenes arizonenses obtengan las habilidades que necesitan, ya sea que vayan a la universidad o no.

Y tenemos que hacer todo esto mientras protegemos los beneficios del Seguro Social y Medicare que las personas de la tercera edad se han ganado durante toda una vida de arduo trabajo.

Unas semanas después de que hablamos, el hijo de Ofelia falleció por el coronavirus. Este ha sido un año difícil para muchos arizonenses.

Necesitamos superar los ataques partidistas

Esta es la realidad: Como país, somos muy buenos para resolver problemas difíciles. Lo hemos hecho antes. Pero no lo lograremos alentando la división. Tenemos que unirnos.

La política partidista empeoró esta crisis, y los políticos partidistas y sus interminables ataques falsos no nos van a sacar de ella.

Lo que Arizona necesita es liderazgo independiente que se concentre en resolver estos problemas difíciles. No voy a aceptar ni un centavo del dinero de los comités de acción política corporativos, para que los arizonenses sepan que yo solo les rindo cuentas a ellos.

Si soy elegido, no seré un senador demócrata ni un senador republicano. Seré el senador de Ofelia. Seré tu senador. Seré un senador para todo Arizona.