Manteniendo nuestra promesa a los estadounidenses de la tercera edad
Debemos proteger y defender los programas de Seguro Social y Medicare
Para un joven de 17 años recibiendo su primer cheque de sueldo, ver una deducción del Seguro Social/Medicare puede ser una sorpresa y generar preguntas. Preguntas como: “¿A dónde va este dinero? y ¿cuándo lo recuperaré?” Lo que estos trabajadores primerizos no comprenderán inicialmente es que agradecidos estarán en sesenta años cuando ese pago del Seguro Social sea lo más seguro de su jubilación. Y que Medicare les brindará cobertura médica para asegurarse de que se mantengan sanos en su vejez. Es una inversión a largo plazo, pero solo funciona si nuestro gobierno mantiene su parte del acuerdo.
El Seguro Social + Medicare
Hay algunos temas que surgen en mis conversaciones sin importar dónde en Arizona me encuentre. Uno de ellos es el Seguro Social y Medicare. Nunca olvidaré del hombre que se me acercó mientras visitaba un centro para personas de la tercera edad en Parker y me contó su historia. Después de jubilarse, él y su esposa habían dependido de su pensión y su Seguro Social para cubrir sus facturas. Funcionó por un tiempo, pero luego su esposa falleció. De repente, estaba solo, no podía cobrar la pensión de su esposa, y su cheque de $757 del Seguro Social era su única fuente de ingreso cada mes. Me dijo lo preocupado que estaba por la posibilidad que su cheque del Seguro Social se redujera o desapareciera por completo, y lo que eso significaría para él. Por la expresión de su rostro, era claro lo asustado que estaba que el gobierno dejara de cumplir su promesa.
Como el hombre que conocí en Parker, hay más de un millón de personas en Arizona que reciben beneficios del Seguro Social, muchas de las cuales dependen de ello para pagar sus cuentas. Más de 1.3 millones de arizonenses tienen Medicare, y muchos de ellos dependen de esto para recibir atención médica de bajo costo. Como país, hicimos una promesa a nuestros trabajadores de que, siempre y cuando pagaran por estos programas durante el transcurso de sus vidas, protegeríamos su salud y bienestar una vez que se jubilaran. Ahora, los políticos en Washington amenazan con romper esa promesa.
Este año, la administración anunció que quería recortar cerca de $500 mil millones del programa de Medicare en los próximos diez años, para reducir el déficit creado por la ley republicana de impuestos que dio una exención fiscal a los más ricos y a las grandes corporaciones. Otros políticos han propuesto convertir a Medicare en un programa de cupones, abrir el mercado a las compañías de seguros privadas y aumentar los costos para las personas de la tercera edad. Y además de todo eso, la administración sigue tratando de recortar fondos del Seguro Social, incluyendo $10 mil millones del programa que apoya a los trabajadores con discapacidades. Esto no es correcto.
Manteniendo nuestra promesa
Me postule para el Senado porque los trabajadores de Arizona pagan toda su vida a programas como Medicare y el Seguro Social, y los políticos de Washington no están cumpliendo su parte del trato. Estos políticos están más interesados en la política partidista que en cumplir sus trabajos. Prometimos a los trabajadores estadounidenses que el Seguro Social y Medicare estarían ahí para apoyarlos al final de sus carreras, pero esa promesa se ha vuelto más incierta cada día. Los arizonenses necesitan una voz independiente en Washington que supere la política partidista para lograr resultados.
Cuando sea elegido senador, haré lo siguiente:
- Lucharé para proteger y defender el Seguro Social y Medicare de recortes gubernamentales. Hicimos una promesa a los trabajadores de nuestra nación, y es hora de que Washington aprenda a cumplirla.
- Dirigiré a Medicare a negociar precios más bajos para los medicamentos recetados. El precio de los medicamentos recetados están fuera de control, y al quitarle poder a Medicare, Washington impide que el programa negocie precios más bajos de medicamentos recetados para los arizonenses.
- Limitaré los costos de bolsillo para las personas de la tercera edad inscritas en el plan de Parte D de Medicare. En este momento, una enfermedad repentina o un aumento en los costos de los medicamentos puede llevar a las personas de la tercera edad a la quiebra. Podemos y debemos cambiar eso.
Ya sea que tengas 17 o 67 años, debes de tener un camino claro para poder jubilarte con dignidad. Eso significa obtener los fondos del Seguro Social que has pagado a lo largo de tu carrera y tener acceso a la atención médica económica y de calidad que te mereces. Proteger estos programas y defenderlos de nuevos recortes no será fácil. Los políticos de Washington no están a la altura del reto. Los arizonenses necesitan una voz independiente que los represente en el Senado para que las promesas hechas a los trabajadores estadounidenses se cumplan.
