¿Debe el golf reciclarse? Creo que si
Los tiempos cambian, y por suerte o por desgracia, cada vez más rápido, en parte gracias a la gran explosión informativa que supuso la expansión de Internet por todo el globo.
Pero mientras el mundo cambia, el golf parece encerrado en una burbuja translucida desde mediados del siglo XX con cierta olor a naftalina en la que “sólo” cambian los material de los palos y bolas, en la que temas como jugar con el polo por fuera pueden ser motivos de llamada de atención, tal como le sucedió a Fowler hace un tiempo, o, en el caso de las féminas, la colección de ropa de corte deportivo de la firma Nike que vimos la temporada pasada.
Mi opinión es que el golf debe renovarse de manera global, tal como sucedió en el tenis (recordemos que hace unos años sólo se podía jugar profesionalmente con pantalón largo, tal como sigue sucediendo en el golf en la actualidad), para acercarse más a la gente, tanto a nivel económico como social, no vale con que poco a poco se vaya implantando en clubes tanto de Estados Unidos como de Reino Unido abonos a precio reducido (cito estos dos países por ser los más representativos de este tipo de abonos) empleando la fórmula del “menos es más” y con una normativa más laxa en cuanto a vestimenta, sino que tiene que ser algo más a nivel global y, por qué no decirlo, un cambio de mentalidad, principalmente de las altas esferas de este deporte.
Con ello no quiero decir que dejen de existir “clubes privados de alta alcurnia”, para nada, cada propietario o grupo de propietarios es libre para hacer lo que quiera, pero lo que si es cierto es que luego no pueden quejarse de que cada vez hay menos jugadores o que son de mayor de edad, porque no nos engañemos, tampoco realizan una gran labor para fomentar y expandir el golf más allá de organizar torneos del Tour.
Pero el golf es un deporte que se necesita mucho tiempo y eso puede tirar a muchos para atrás, pero si además a la gente que le gustaría poderle dedicar su valioso tiempo le cerramos las puertas por motivos económicos, lo que hacemos es que el embudo sea cada vez más estrecho y haya un menor flujo de jugadores, pero no sólo ahora, sino en el futuro, ya que la gran mayoría de gente que juega al golf es por una invitación a jugar por parte de una amigo o familiar, por lo que se forma una cadena de yo juego, le muestro el golf a otro, ese otro se engancha y lleva a otra persona y así… ya que el golf tiene un gran componente de socialización que no debe perderse.
Dicho esto, y centrándome en España, sigo preguntándome… ¿Cómo podemos llegar a más usuarios si les obligamos a que paguen una licencia aunque no vayan a jugar torneos? Es como si, por ejemplo, jugamos una pachanga de tenis con los amigos y nos pidieran federarnos, ¿de locos verdad?
Muchos dirán que por el seguro. Pero en muchos países, cada club tiene un concierto con una empresa aseguradora, tal como si fuera un coche de alquiler, por lo que pagas el green fee con un pequeño recargo que incluye un seguro por lo que pueda pasar y listo, simple y económico.
Al hilo de la economía, el golf en España tiene que quitarse ese cierto “rancismo” que sigue teniendo y de esa manera ser visto como un deporte totalmente normal, para ello deben crearse más campos públicos, aunque sean pequeños, pero que estén gestionados por personal cualificado que rindan cuentas de los resultados con la mayor transparencia posible y sin intereses en otros campos privados.
La práctica del golf ha de ser vista como el que se va a jugar al fútbol o a la baraja, según las expectativas deportivas de cada uno, en lugar de un espacio donde se reúnen las élites económicas de una población.
Creo que España no necesita más campos de green fee elevado, sino campos y canchas de prácticas para que cualquier persona pueda acceder y jugar, no podemos seguir con la idea en el imaginario popular de que algo como jugar al golf es sólo para gente de elevado poder económico.
Tal vez intentando hablar con alguna productora televisiva, la federación podría invertir en crear un reality similar a lo que puede ser MasterChef o similares pero sin saber cocinar. Es decir, seleccionamos un grupo de gente o lo más heterogéneo posible que no sepan ni como coger un palo de golf e intentar que puedan jugar a un nivel más o menos decente.
Sé que es una idea que seguro que parece chocante, pero sería interesante, porque la gente que no tiene ni idea de golf podría picarle el gusanillo e ir aprendiendo gracias a las lecciones que les dieran a los concursantes, por otro lado, se lograría la interesante difusión de que el golf puede ser practicado por gente de todas las edades y condición social, y eliminar uno de los problemas que es llegar al público, ya que, seamos sinceros, el golf salvo torneos o partidos contados es más entretenido jugarlo que verlo por la tele. Es un deporte lento, que dura muchas horas, y muchas veces esta exento de épica o de un duelo (salvo los match play) que pueda enganchar al espectador. Creo que esa es una de las razones porque la Ryder Cup es un evento tan interesante, por el duelo entre dos equipos, que hacen que el espectador se sienta de alguna de las dos selecciones y que le genere tensión y emoción tal como puede suceder en un deporte de equipo 1 vs 1.
Desde mi punto de vista, esta es una de las razones por la que el long drive está en alza en EEUU, es rápido, tiene un buen montaje, es espectacular y son duelos, además de no necesitar más que una recta de entre 450 y 500 metros, por lo que creo que parte de la expansión de este deporte debería ir por ahí, intentando llevar pruebas de este estilo a entornos espectaculares tal como hace Red Bull en sus eventos de aeronáutica, saltos de acantilados y mountain bike, por citar algunas.
Cambiando de tercio, como ya sabéis la marca deportiva Wilson Staff junto con Golf Channel, lanzó un reality denominado “Driver vs Driver” (del que este año se realiza una nueva edición), que consistía en que una persona o varias creaban un driver y tras pasar varias pruebas de funcionamiento, estética, marketing, etc… uno era elegido para salir a la venta (para los “despistados” el modelo elegido fue el modelo Triton, que posteriormente tuvo que ser modificado para cumplir la normativa, pero ese es otro tema).
La idea principal es interesante (hay algunos puntos que no estoy de acuerdo, pero ese es otro tema), la R&A podría hacer un concurso, similar a los que se realizan con vehículos, en las que diversas universidades presentan sus proyectos bajo un reglamento común y compiten entre sí para ver cual es el mejor.
Por ejemplo, un año podría ser un driver con un costo inferior a X euros, otro año, el putter más estable sin usar X materiales, etc…
En definitiva una competición que pueda ser empleado un robot y que de datos objetivos sobre que modelo es el mejor, de esta manera poder crear nuevos ingenieros con experiencia en proyectos de este tipo, y de paso, poder expandir el golf a más gente a lo largo del mundo.
¿Es una visión pesimista del golf? no demasiado, simplemente se trata de adaptar el golf a los nuevos tiempos, en el que el tiempo es escaso, el dinero es menor, la gente más heterogénea y la oferta de entretenimiento y de impacto visual es más amplia.
Como ya he dicho, los tiempos cambian, pero parece que el golf no tanto.