¿Qué son las Micro-interacciones?

Tener una buena Arquitectura de Información que permita mejor la imagen de nuestros productos y ayude a los visitantes a encontrar la información que busca de manera rápida, es mejorar considerablemente la Experiencia de Usuario. Pero, la Arquitectura de Información, no es el único elemento que puedes emplear. Por eso, hoy te hablaré sobre un elemento de diseño que te puede ayudar a optimizar la navegabilidad e interacción de los usuarios con tus productos y llamar su atención. Te hablo de las Micro-interacciones. ¿Sabes que son las Micro-interacciones? Si no sabes o tienes tus dudas, no te preocupes, que ahora te explico con detalles.

Las micro-interacciones son acciones simples y pequeños momentos de intercambio entre el usuario y la interfaz, que provocan una respuesta inesperada y a la vez poco intrusiva, de manera grata en el usuario. Por tanto, sirven para informar de forma visual al usuario sobre algún cambio de estado o alguna acción realizada exitosamente.

A diario interactuamos con las micro-interacciones, pero no siempre somos capaces de identificarlas. Algunos ejemplos claros son:

- Los pequeños íconos que muestra WhatsApp en cada mensaje, para informar del estado de las conversaciones.

- Las sugerencias que ofrece Google de forma instantáneas cuando realizamos una búsqueda.

- Los corazones del Twitter o Facebook al marcar un tuit como “Me gusta”.

- La pequeña vibración que se efectúa cuando cambiamos nuestro Smartphone de modo silencioso a normal.

- La función de autocompletar en un campo de texto de un formulario que ofrecemos, para completar una tarea.

- El símbolo de carga que aparece en la parte superior de una página, cuando hacemos scroll hacia abajo para volver a cargarla.

- Las pantallas de estados vacíos o los botones de interfaz animados.

Entonces, si incorporas micro-interacciones en tus productos puedes:

- Marcar la diferencia.

- Presentar información inmediata de forma visual al usuario.

- Mejorar el uso de la interfaz y animar al usuario a seguir navegando.

- Guíar al usuario de una manera fluida e intuitiva por toda la aplicación.

- Notificar a los usuarios sobre las acciones realizadas con éxito.

- Ayudar a los usuarios a prevenir errores y mejorar el uso de la interfaz.

- Animar a los usuarios a interactuar con una aplicación respondiendo a una notificación específica.

- Sorprender al usuario y producir en él una sensación agradable (efecto emocional positivo).

En fin, logras minimizar el esfuerzo de los usuarios, hacer el proceso de navegación más sencillo y mejorar indiscutiblemente la experiencia de tus usuarios. Pero, para poder adquirir todos esos beneficios, tienes que:

1. Definir el objetivo de tus micro-interacciones para tener bien claro lo que se pretende comunicar al usuario.

2. Detallar dónde se centrará la acción en la interfaz y puntualizar cuánto tiempo durará cada micro-interacción.

3. Conocer a tu audiencia o usuario final.

4. Usar un lenguaje sencillo y fácil de comprender.

5. Asegúrate de que las acciones realizadas durante el proceso de la micro-interacción no rompen inadvertidamente la interacción.

6. Usar animaciones divertidas, pero de forma moderada para no abrumar al usuario.

7. Emplear colores que contrasten con el diseño de tu producto.

8. Evita animaciones que tarden demasiado en cargarse o distraigan al usuario.

Como pudiste apreciar, las micro interacciones se pueden aplicar a cualquier tipo de aplicación informática y son muchos los beneficios que se puede obtener de ellas. Por eso, no lo pienses más y pon manos a la obra. Pero, si aún tienes dudas o sientes que te falta la experiencia necesaria, considera la ayuda de profesionales que te ayuden y asesoren, contacta Grupo Carricay. Siempre respondemos y trabajamos para la calidad.