Chinwenwencha

Lau Mica Alvarez
Historias pasan
Published in
3 min readMar 31, 2020

Sust. Dícese de un rosarino de Newell’s que “se la tomó toda” (hablando de la Copa de Leche) y es boludeado por whatsapp por su amigo de Rosario Central cuando su equipo salió campeón de la Copa Argentina en 2018. En español antiguo: “que no tiene vergüenza”. Ejemplo: Ese hombre es un Chinwenwencha.

Entendamos el fondo de todo esto. ¿Qué es vergüenza? Sust. Femenino:

  1. Sentimiento de pérdida de dignidad causado por una falta cometida o por una humillación o insulto recibidos.
  2. Sentimiento de incomodidad producido por el temor a hacer el ridículo ante alguien, o a que alguien lo haga.

Acá el señor de Rosario Central estimamos que se refería a la primera acepción de la palabra: Su amigo había perdido la dignidad al haber perdido la Copa Argentina. Muy profundo todo. Por eso, me quedo con la segunda.

¿Qué pasaría si no tenemos vergüenza? (Qué Mariana se puso de repente esta nota).

Primero deberíamos establecer ciertos parámetros que nos hagan ponernos de acuerdo en qué es un acto vergonzoso. Si nos ponemos muy profundos en el asunto podemos pensar en la traición como hecho que debería darnos vergüenza. En la deslealtad, en el engaño. En la mentira, en el robo. Vergüenza da la maldad, la falta de empatía, la soberbia, la falta de humildad.

La verdad, gente, estoy de cuarentena, y todo muy lindo todo esto de ponernos profundos y replantearnos la vida pero vamos a los bifes de una (justamente porque estamos de cuarentena). Y este cuento, que no lo es tal, va a tomar ahora la forma de cosas que nos dan vergüenza. A saber:

  • Equivocarme de nombre cuando saludo a alguien, da vergüenza.
  • Las faltas de ortografía, (me) dan vergüenza.
  • Los gases humanos como los eructos y/o flatulencias, dan vergüenza.
  • La palabra flatulencia, da vergüenza.
  • No haberte depilado y que te acaricien la pierna, da vergüenza (no debería #PuesEmpoderada). Pero verte los bigotes a contraluz, te da vergüenza.
  • Que te pesquen destangándote o desencalzonillándote (a lo Nadal), ¿qué da? Vergüenza.
  • Salir crota al super y cruzarte con un conocido, da vergüenza.
  • No entender un chiste, da vergüenza.
  • No entender nada en una reunión, también.
  • Saberse las canciones de Mambrú y Bandana, me dan una vergüenza. Maldita noche, no puedo esperar.
  • Que te escrachen en una foto en la que saliste mal, da vergüenza.
  • Y las fotos de tu peor época de adolescente, dan mucha vergüenza (en serio, no hacía falta usar ese buzo y ese flequillo).
  • Comerse los mocos (aún cuando ya tenés 15 años), da vergüenza.
  • Que tus viejos te pesquen en tu habitación en tu adolescencia cuando descubrieste tus partes, uff. Nada. Por suerte no me pasó (posta lo digo).
  • Invitar a salir a un chico, da vergüenza.
  • Decir Te amo, da vergüenza.
  • No decir Te amo, da vergüenza.
  • No pedir perdón cuando la pifiaste, da vergüenza.
  • Creer que no podés equivocarte, da vergüenza.

Podría seguir con mil situaciones pasando por los momentos de la espinaca en el tedien hasta los de más profundo dolor. De los más banales a lo más profundos.

¿Y si vivimos sin vergüenza? Pero sin vergüenza de cosas que no lastimen a nadie. ¿Que pasa si un día caigo a la oficina y me di cuenta que me había puesto mal las medias? Si ahora atiendo por Zoom con las calzas recién puestas. ¿Y si no tengo vergüenza de prestarle un tampón a una amiga adelante de otras personas? ¿Y si pido un forro super fino para más placer de él enfrente de todas las señoras pitucas del Open 25 de Quintana y Rodriguez Peña? ¿Qué pasa si voy y le digo al chico o a la chica que me gusta, “me volvés loca”? ¿Por qué yo sentir vergüenza? ¿Y qué si un día salgo al balcón como una loca a aplaudir a chiflarle a un Glovo por salvarme hoy la vida? ¿Y qué si cuando giro mi vecino está en boxers? ¿Eso es vergüenza?

La pregunta, muy de coaching de ¿qué harías si no tuvieras miedo? la escuchamos una y mil veces y la dejamos pasar por cagones. Pero me pregunto hoy, en este instante, después de estos dos puntos que se vienen ahora que termino esta oración eterna que no termina más: ¿Cómo sería mi vida si la viviera sin vergüenza?

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Lau Mica Alvarez
Historias pasan

Publicitaria (de título), reciente standupera y proyecto de escritora. Reciclando historias que pasan. Lalala.