Remedios naturales para aliviar el dolor de cabeza

Sustituye la clásica aspirina por una solución natural: masajes, baños, infusiones y remedios calmantes aliviarán tu dolor de cabeza.

Infusiones para el dolor de cabeza

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Se aconseja tomar estas infusiones tranquilamente y beberlas lentamente, sorbo a sorbo. Después, reposar un cuarto de hora en la cama en penumbra u oscuridad.

Manzanilla o menta
Al despertarse en ayunas o junto con el resto de alimentos que tomemos en el desayuno bebe lentamente una infusión de manzanilla o de menta. Efecto: Ambas plantas tienen notables efectos calmantes y analgésicos además de que facilitan la actividad del hígado para eliminar el acetaldehído en caso de resaca.

Berenjena
Prepara una infusión calentando medio litro de agua en una cazuela, añade una berenjena mediana en rodajas y 3 cucharadas de azúcar. Calienta a fuego lento durante media hora, deja reposar 5–10 minutos y cuela el líquido. Cuando te duela la cabeza bebe el equivalente a medio vaso, lentamente. Efecto: Tiene como finalidad rehidratar el organismo.

Corteza sauce
Antes de desayunar toma una infusión de esta planta y repite la toma al mediodía si es necesario. Efecto: La corteza de sauce contiene salicilatos naturales (compuesto precursos del ácido acetilsalicílico o aspirina) que le aporta un notable efecto calmante que alivia los dolores de cabeza.

Primavera
Prepara una infusión con 4 cucharadas soperas de planta seca de primavera en un litro de agua hirviendo, remueve ligeramente y deja reposar un cuarto de hora. Cuela el líquido y deja enfriar. Efecto: Esta planta posee efectos relajantes, sedantes, calmantes y analgésicos. Por eso, además de tratar el dolor de cabeza también es útil en resfriados, bronquitis, golpes o traumatismos.

Albahaca
Prepara una infusión de albahaca añadiendo 1 cucharada de hierba seca a una taza de agua hirviendo, deja reposar un cuarto de hora, cuela el líquido y bebe lentamente a sorbos.Efecto: La albahaca, en particular los componentes presentes en las hojas y tallos, tiene notables efectos sedantes, relajantes y ligeramente analgésicos.

Jazmín
Prepara una infusión añadiendo una cucharada de jazmín seco a una taza de agua hirviendo, deja reposar durante 10 minutos, cuela el líquido y bebe. Efecto: Al igual que la albahaca, el jazmín tiene efectos sedantes y calmantes que alivian las cefaleas y dolores de cabeza.

Té de tres años
Pon a hervir una taza de agua y añade una cucharadita de té de 3 años. Deja cocer durante 5 minutos y después reposar 10 minutos. Cuela y añade una pizca de ralladura de piel de mandarina y 1 puntita de concentrado de ume. Mezcla para que se disuelva bien y tómalo.

Hiedra
Cuece 4–5 hojas de hiedra en un litro de agua hirviendo durante 10 minutos. Unta un paño en el agua y pásalo por la frente. Cuando se enfríe el paño vuelve a sumergirlo en agua caliente y a ponerlo en la frente hasta que remita el dolor.

Pipas de girasol
Machaca un puñado de pipas de girasol y cuécelos en una taza de agua durante 2–3 minutos. Tapa y deja reposar otros 10 minutos. Cuela y tómala mientras dure el dolor de cabeza. Esta infusión es muy apropiada para los niños.

Rabos de cereza
Cuece un puñado de rabos de cereza en medio litro de agua hirviendo durante 5 minutos. Tapa y deja reposar otros 10 minutos. Cuela y toma el líquido a lo largo del día.

Masajes para el dolor de cabeza

Aceite de mejorana
Aplica 1 o 2 gotas de aceite de mejorana sobre las sienes y realiza un pequeño masaje con la punta de los dedos realizando movimientos circulares durante 5 min. Puedes repetir el masaje a la hora o dos horas. Efecto: Este masaje consigue relajar, por efecto reflejo, la musculatura craneal del cuello y mejorar la llegada de sangre al cerebro y al resto de las estructuras del sistema nerviosos central.

Pepino o patatas crudas
Coloca un par de rodajas crudas de pepino o patata sobre cada una de las sienes. Realiza pequeños movimientos circulares durante un par de minutos. Repite el masaje media hora más tarde. También pueden colocarse las rodajas directamente sobre las sienes, sujetarlas con un pañuelo o venda y mantenerlas durante media hora. Efecto: El masaje aplicado sobre las sienes induce pequeños cambios en la circulación de la sangre de la cabeza disminuyendo el dolor.

Baño relajante para el dolor de cabeza

Aceite de melisa
Antes de acostarse o bien a primera hora de la mañana date un baño de agua templada con 7–8 gotas de aceite esencial de melisa. Cuando las gotas están en el agua, agitarla ligeramente para que se mezcle bien, introducirse en el baño (si se tarda mucho el aceite puede evaporarse con el calor) y permanecer en el agua 10–15 minutos. Efecto: Este baño tiene un gran efecto relajante, tonificante para la piel y calmante para los dolores de cabeza.

Otros remedios para el dolor de cabeza

• Masticar perejil. Masticar unas ramitas de perejil crudo te ayudará a aliviar el dolor de cabeza.
• Limón + aceite de oliva. Por la mañana en ayunas toma una mezcla una cucharada de zumo de limón con 1 cucharada de aceite de oliva. Si tienes tendencia a las jaquecas o migrañas se recomienda tomar este remedio todas las mañanas.
• Compresas de agua fría. Cuando te duela la cabeza moja una o varias gasas en agua muy fría, colócalas sobre la frente y las sienes, fíjalas a la cabeza con un pañuelo y manténlas durante 20–30 minutos.
  Efecto: El agua fría muestra cierta acción calmante o analgésica, además de disminuir la dilatación de los vasos sanguíneos que se distribuyen por la cabeza, origen a veces del dolor de cabeza e incluso de la jaqueca. Efectos similares a éstos se consiguen utilizando una bolsa de plástico con cubitos de hielo en su interior.
• Paño caliente con hiedra. Cuece 4–5 hojas de hiedra en un litro de agua hirviendo durante 10 minutos. Unta un paño en la infusión y pásalo por la frente. Cuando se enfríe el paño vuelve a sumergirlo en agua caliente y a ponerlo en la frente hasta que remita el dolor.
• Ejercicio de brazos. Mueve los brazos estirados como “si quieras volar” (arriba y abajo) durante un par de minutos descansando de vez en cuando. También puedes dibujar círculos a los lados (derecha e izquierda) con movimientos repetidos y rápidos.
  Efecto: Estos pequeños ejercicios evitan la llegada masiva de sangre a la cabeza, descongestionándola.
• Digitopuntura. Se trata de presionar con el dedo la cabeza. Busca el punto más alto de la cabeza (situado en una línea que va de una oreja a la otra) y presionar ligeramente en ese punto con uno de los dedos al mismo tiempo que realizamos pequeños círculos en sentido contrario a las agujas del reloj. Mantener la presión un par de minutos.
  Efecto: Calmante y relajante, colabora a redistribuir la llegada de sangre a la cabeza.