Vision Board, nuestra piedra fundamental

Desde los inicios de Holistic Interaction, desarrollamos un vision board anual, esto surgió de manera natural. HI! surgió del deseo de dejar nuestra huella personal en la disciplina, como una deformación de nuestra actividad docente. Deseábamos armar nuestro modelo y proceso de trabajo; nuestro propio framework.

Un año después del primer vision board, nos sentamos a evaluar que había sucedido. Para nuestra sorpresa gran parte del mismo se había cumplido. Formalizamos un proceso informal sin quitarle lo lúdico y lo experimental.

Para el segundo año, destinamos dos días de retiro, donde concentramos nuestro foco en construir los objetivos del próximo año. Utilizamos la metodología de Design Thinking para llevar adelante nuestro taller. El ejercicio nos permitió unir criterios, energías y definir los objetivos de cada semestre.

Para su tercera edición, sumamos una complejidad. Ajustamos nuestros objetivos a cada Quarter y le otorgamos un Key Result. El objetivo era contar con métricas concretas de cómo resultaron nuestros objetivos y hacer un seguimiento.

El retiro se volvió algo inamovible en nuestra estructura. Nos saca de las tareas diarias y nos permite proyectar no sólo para el siguiente año, sino empezar a organizar un roadmap a largo plazo. De esta manera, sostenemos la consistencia de nuestras decisiones y enfocamos nuestra energía hacia dónde queremos ir. Nos ayuda a reducir las desviaciones, un tema no menor en una startup.

Beneficios de hacer un vision board para transformar en KPIs

Un Vision Board es un tablero de propósitos, deseos y objetivos escrito de manera informal. Toda esta información y definiciones se puede convertir fácilmente en objetivos totalmente medibles y evaluables a lo largo del año.

Lo que cambia entre un vision board y un objetivo medible es la forma de mostrarlo y escribirlo. Nos permite comprometernos emocionalmente y empatizar con el equipo, los objetivos y logros.

A través del vision board, podemos tener claridad, poner el foco en los accionables y sostener la conexión con un objetivo. Ahora bien, si se conecta este tablero con tiempos, acciones y resultados concretos se puede medir la efectividad del mismo.

Cada deseo/objetivo que esté escrito en el vision board debe poder transformarse en un resultado concreto, con una fecha determinada. Spreadsheet es un gran aliado para este tipo de trasposición.

Antes de pasar a armar los KPIs te contamos que son. Un KPI es un Key Performance Indicator, es decir son las variables, métricas o factores, unidades de medida, que consideramos “estratégicas” en nuestra empresa.
Un KPI es un sistema de control y seguimiento, se puede tomar como indicadores de calidad o claves del negocio.

Cuando se considera un buen KPI:

• Cuantificable
• Ser medible
• Periódico o temporal
• Específico
• Relevante

Un ejemplo de deseo convertido a KPI

Carta de intención: tener estabilidad económica.

Objetivo: Conseguir nuevos clientes internacionales.

KPI: Aumentar un 30% los clientes internacionales durante el primer semestre.

Es importante poder convertir el vision board a KPIs, porque te va a permitir tomar mejores decisiones en función de datos concretos. Nunca desestimes la capacidad de un KPI bien escrito.

Vos cómo organizas y medís tu empresa/emprendimiento? Contanos cómo diseñas los objetivos de tu empresa.