Ser #planetcentric o morir

Carmen Hontañón Pombo
Idean Spain
Published in
5 min readDec 4, 2019
Poner el planeta en el centro es la única estrategia para generar valor a largo plazo para el negocio

Este artículo lo han escrito Jimena González y Carmen Hontañón, Strategic and Service Designers en Idean Spain.

El business as usual está en entredicho

“El sistema actual ya no es válido para empresas, personas ni medio ambiente.” Ellen MacArthur Foundation

El fin de toda empresa es la obtención de beneficio (crear valor, ganar dinero…) Como decía Don Emilio Botín “ Lo que no son cuentas son cuentos” es algo que no debemos olvidar, pero las reglas del juego han cambiado y a día de hoy el business as usual está en entredicho.

Hoy en día operamos en lo que se llama un modelo de economía lineal, en el que extraemos recursos naturales, los usamos para hacer/diseñar productos que nos sirven durante un tiempo y después se convierten en desechos.

Explicación del modelo de economía y negocio lineal

Estamos usando el equivalentes a 1,7 tierras para proporcionar los recursos que utilizamos y para absorber nuestros residuos. Y ¿qué pasará cuando en 2050 seamos 9500 millones de personas? Pues la respuesta es que necesitaremos 3 globos terráqueos.

Por lo que nos encontramos en lo que nosotros llamamos Estado de Emergencia y es la hora de dejar de ser meros espectadores y atrevernos a ser actores. Como dice el gran Federico Mayor Zaragoza, “atreverse a saber, saber atreverse”.

Tenemos la obligación de diseñar desde la necesidad no desde la posibilidad.

Por eso, empresas y diseñadores tenemos que asumir la responsabilidad que nuestro rol tiene y colaborar para encontrar una nueva forma de conseguir un bienestar más saludable. Nunca nos gustaría escuchar en boca de las generaciones futuras, la dura frase de Albert Camus, “ les desprecio porque pudiendo tanto se atrevieron a tan poco.”

Sabemos que dependemos de la extracción de recursos naturales, de energía (que hoy por hoy suele ser no renovable) y de un alto nivel de consumo para generar negocio. Y en el estado de alerta ambiental actual, ¿cuánto tiempo podemos mantener este modus operandi?

Estamos cada vez más concienciados con los asuntos medioambientales y sociales, y no solo estamos dispuestos a pagar más por productos digamos “responsables” sino que esperamos que sean las empresas quienes tomen la iniciativa y lideren la solución a los retos globales más complejos.

What the F #%k is Planet centric design?

Planet centric design es la forma de vincular la sostenibilidad con las personas, ampliando la perspectiva de las las necesidades de las empresas con las necesidades de la humanidad y del planeta.

Básicamente, el diseño es una herramienta para resolver problemas complejos. Y está cobrando cada vez más valor porque ayuda a pensar de una manera estratégica y descubrir nuevas oportunidades.

Lo primero es pasar del diseño del producto o servicio a poner al usuario en el centro. Así, no solo conseguimos un producto intuitivo, funcional y con una estética agradable; sino que también aprendemos de la relación entre producto y usuario. Comprender las necesidades reales de la persona que lo usa nos permite diseñar mejor; es decir, resolver su problema de una manera más efectiva y generar más valor.

El enfoque planet centric permite resolver mejor los problemas del cliente y diseñar mejor

Ahora toca dar un paso más para comprender cómo todo el ciclo de vida del producto se integra en su entorno social y ecológico. Al abrir todavía más la mirada, podemos identificar posibilidades para innovar y mejorar.

Así, nos damos cuenta de lo que defiende Michael Porter: lo estratégico para la empresa es buscar el valor compartido, generar una situación win-win-win entre empresa, sociedad y medio ambiente.

¿Cómo me hago #planetcentric?

“Mide lo que te importa y lidera el cambio, y no esperes cien años.” Steve Howard

Hay cuatro principios que nos pueden ayudar a cambiar la perspectiva y descubrir cómo cambiar a mejor:

  1. Sostenible: Eliminar la mentalidad de “ pan para hoy y hambre para mañana”. ¿La actividad de hoy me está dificultando la actividad de mañana? ¿Lo que necesito para crear valor en cada etapa del ciclo de vida del producto (desde extracción de materias primas, producción, distribución, uso, gestión post-uso) es regenerable o se puede agotar? ¿Mi ventaja competitiva se basa en mantener una desigualdad social y de condiciones de trabajo?
  2. Circular: La idea es inspirarse en los sistemas biológicos, en los que nada se tira, todo sirve para el siguiente actor del sistema. ¿Puedo aprovechar, en cualquiera de mis procesos, oportunidades para recircular productos, piezas o materiales? ¿Puedo descubrir nuevos modelos de negocio que puedan competir con mi propia propuesta de valor?
  3. Sistémico: Se trata de ampliar la perspectiva e identificar las interconexiones entre los actores del sistema total para afrontar problemas complejos. ¿Puedo mejorar mi rendimiento si no abordo mi proceso de manera aislada y empiezo a mirar las interacciones con el sistema de una forma holística? ¿Qué métricas puedo incluir para entender cómo me impacta el entorno? ¿Puedo medir mi influencia en la sociedad y el medio ambiente?
  4. Futurista: Idear escenarios futuros para elaborar estrategias orientadas a conquistarlos. Se trata de desarrollar una reflexión sobre los cambios que acontecen tanto en el presente como en unos días, meses, años. Nos ayuda a prepararnos ante lo inesperado, lo obvio e inclusos lo emergente y oculto ¿Cómo puedo prever la evolución social y medioambiental y adelantarme a posibles escenarios futuros? ¿Cómo puedo trazar un camino adaptado a los diferentes escenarios?

Si soltamos el miedo a transformar nuestro core y apostamos por ser #planetcentric, podemos sorprendernos, como defiende Yvon Chouinard (el fundador de la compañía Patagonia) de lo bueno que puede ser para nuestro negocio.

Descubriremos oportunidades de eficiencia económica, de entrar en nuevos mercados y diversificar nuestro portfolio de productos y servicios, adelantarnos a las tendencias del mercado, alcanzar una relación diferente (más emocional, más honesta) con nuestros clientes, contar con el mejor talento y atraer inversores.

Mañana siempre es tarde. ¿te atreves empezar hoy?

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