En la piel del otro
La discriminación a personas transexuales, travestis y transgénero
El aislamiento y maltrato que sufren las personas cuya identidad de género difiere a los papeles sociales establecidos comúnmente, es una gran problemática en cuanto a lo que refiere su impacto en estas comunidades. Se evidencian los altos índices de violencia, acoso y la violación de sus derechos humanos, que se supone deberían defender las instituciones civiles, los individuos y cada uno de los grupos relacionados con un enfoque social de protección a estos.
En la noticia publicada por RCN radio el 5 de julio de 2018 “En 2017, 109 integrantes de la comunidad LGBT fueron asesinados en Colombia” mencionan que:
“Colombia Diversa hace (2017) un llamado de atención frente al aumento notable de casos de violencia en el sur del Tolima, el Nordoeste y Bajo Cauca antioqueños, Tuluá y Tumaco. En estas zonas se presentó además del aumento en los crímenes un incremento en las amenazas y agresiones físicas y verbales.
45 de las víctimas más fueron registradas como hombres gays, 35 mujeres transexuales, seis mujeres lesbianas, dos hombres transexuales y una persona bisexual. De las otras 21 víctimas no se pudo establecer claramente su orientación sexual.
El Tiempo en su artículo del 22 de enero del 2018 “Crímenes contra LGBT, una realidad invisible” afirma que:
“Cada 19 horas una persona LGBT es asesinado o se suicida víctima de LGBTfobia, lo que hace de Brasil el país número uno en el mundo en ese tipo de crimen. Los datos son de la ONG Grupo Gay de Bahía, que informó que en el año 2017 allí se registraron 445 casos. La situación es dramática en este país, pero en el resto de América Latina también. (…)
142 asesinatos de integrantes de la comunidad LGBT en Colombia ocurrieron en el marco del conflicto armado y como consecuencia de los prejuicios de los violentos.”
Todos sabemos que los esfuerzos por defender los derechos de esta comunidad, y en especial los transexuales, travestis y transgénero no se hacen suficientes para el ámbito social que nos interesa influenciar. Para estas personas, que son seres humanos como nosotros, quienes viven día a día el reto de querer mostrarse tal como son y acorde a su identidad cada paso es un avance, pero también un propulsor de reproches malintencionados por parte de la sociedad, el mundo político, religioso e ideológico, entre otras cosas, una suma enorme de manifestaciones en su contra.
Por esto fue que quisimos diseñar un experimento social con un toque escénico. Principalmente pensamos en poner a los usuarios en el contexto queriendo involucrarlos sentimentalmente, pero conscientemente y también hacer que se fueran desarrollando de forma intuitiva cada una de las dinámicas. Esto facilitó la cooperación y continua cocreación. Por eso además, acordamos no impartir un mensaje cerrado en el cual los usuarios no pudieran expresarse o aportar nada sino por el contrario dar su punto de vista y visión, haciendo aun más completa esta creación colectiva.
Todo se compuso con base en la temática de la identidad sexual y de género. Pensamos que si una persona asumía en carne propia, al menos por un momento, vestirse de manera diferente a como totalmente lo hace podíamos llegar a una serie de reacciones, entre ellas que sienta lo que es ponerse en los zapatos del otro, que experimente las miradas y todo tipo de efectos que causaba en el público al hacer esto.
Nos ubicamos en un punto estratégico, al rededor del bloque 38, 32 y 30 con el objetivo de visibilizar nuestro performance. Quienes iban pasando por el lugar podían tener una idea de lo que estábamos haciendo, así fuimos reclutando personas para participar de esta creación colectiva. Colocamos en una banca una serie de prendas tanto masculinas como femeninas, clasificadas y seccionadas. Esto fue con el objetivo de ser vestidos y vestir a las personas con un prototipo de vestimenta que sería el contrario al asignado social y culturalmente por su sexo; luego de esto les hicimos una entrevista corta a cada uno de los individuos que participaron para aprender y buscar soluciones.
En cuentas resumidas, hicimos uso de la puesta en escena en la cual nos permitió, tanto a nosotros, diseñadores de esta propuesta, como a los participantes de ella, meterse en “la piel del otro”. Así fue como con los usuarios hubo una conversación amena mientras el “transvestimiento” de los participantes sucedía. En la gran mayoría de los casos surgió una conclusión conmovedora o comentario sobre el proyecto. Todo se dio en forma de retroalimentación.
Esta representación nos permitió identificar diversos resultados. Las reacción de las personas frente al hecho de vestirlas como no lo harían en su día a día y asignarles un papel, en general llevó a cabo a una respuesta positiva, hubieron risas, aunque no de burla, surgieron comentarios alusivos al impacto que tuvo y alguno de ellos dijo, que sus amigos estaban cerca y que en realidad la comunidad universitaria estaba dándose cuenta de lo que estaba pasando con esta actividad y propuesta.
Se pudo ver que ninguna persona se mostró reacia frente al concepto de lucir o actuar diferente, lo cual en un principio pudo ser una de las posibilidades. Esto puede evidenciar que con el pasar del tiempo las personas han creado cierta tolerancia y cierto grado de normalización frente a esta realidad. Lo cual fue una ventaja para que las personas accedieran a realizar las actividades sin ningún problema, luego de enterarse de la metodología, al final se sintieron a gusto y se hizo notoria la motivación e interés.
En la actualidad es más factible encontrar aceptación en ciertas personas y en comunidades específicas como la universidad Eafit, sin embargo, otras instituciones y grupos de individuos son grandes agresores y entes discriminatorios de las personas transexuales. La singularidad es algo que marca al sujeto que posee esta característica, la cual puede presentarse en diversos aspectos… Pero en performances y propuestas como esta al trabajar en cada individuo y en muchos individuos como una red de cooperación, se conforma un entretejido en el cual es válido participar, en analogía con como está conformada la sociedad; siempre nos dijeron “Si no cumples los estándares que delimitamos, vas a ser excluido”. Ahora la mentalidad se ha abierto y esto hace posible formas nuevas de actuar.
