EROS Y THANATOS

--

Sigmund Freud, es el creador del psicoanálisis, desarrolló diversos modelos para explicar la personalidad humana a lo largo de su carrera literaria. Desarrolló 5 teorías sobre la personalidad: la topográfica, la dinámica, la económica, la genética y la estructural.

Sigmund Freud, usó los términos Eros y Thanatos para referirse a dos instintos básicos del ser humano. El instinto de la vida Eros y el instinto de la muerte Thanatos, usando de referencia a estos dioses de la mitología griega.

Para entender el concepto de Eros, debemos conocer primero el significado de pulsión, recibe el nombre de pulsión todo aquel impulso que nos conduzca a llevar a cabo algún tipo de acción, generalmente para satisfacer una necesidad. La pulsión es en último término el origen de toda actividad mental, siendo representante psíquico de los estímulos somáticos del cuerpo, y consta de fuente, fuerza, meta y objeto. Freud consideraba que la vida psíquica estaba principalmente ligada a este tipo de pulsión, siendo la libido el núcleo de la vida psíquica y la energía vital.

Eros o pulsión de vida, es un instinto cuya característica es la tendencia a la conservación de la vida, a la unión y a la integridad, a mantener unido todo lo animado, es un instinto que tiende a la unión, a la vida y que posibilita el sexo como placentero y como generador de nueva vida. Su objetivo principal es garantizar la supervivencia y a mantener la materia viva e integrada. Mientras que su principal función es la de buscar el placer y evitar el displacer.

Thanatos por el contrario es el instinto de muerte, designa las pulsiones de muerte que tienden hacia la autodestrucción con el fin de hacer que el organismo vuelva a un estado inanimado, a la desintegración, hacia la muerte. Nace como contraposición a Eros, y se define como el impulso inconsciente y generador de la excitación orgánica, que aparece como la búsqueda del ser de retornar al reposo absoluto de la no-existencia. Thanatos se guía por el principio de Nirvana, reducir y eliminar la excitación para no encontrar placer en la solución de conflictos, si no en la vuelta a la nada.

Ambos instintos, son parte de todos los seres vivos y están presentes desde que los individuos nacen. Existe una permanente lucha entre ambos instintos. Estas dos pulsiones son imprescindibles para el ser humano, se presentan como un continuo conflicto que en muchos aspectos es beneficioso.

En toda vida personal y colectiva, puede observarse la presencia de estos instintos. Todos aquellos sentimientos ‘bajos’, como los malos deseos, envidia, crueldad, odio, descalificación, morbosidad, etc., nos muestran que en la persona está actuando Thanatos. Por el contrario, en aquellas actividades humanas elevadas, como el verdadero amor, la caridad, la tolerancia, la solidaridad, el querer crecer y desarrollarse, desear hijos, educarlos, etc., está presente Eros. Eros construye y une, mientras que Thanatos destruye y desune.

En la vida personal hay ciclos y etapas. En algunos ciclos Eros es quien se hace más fuerte; pero también hay etapas en que el instinto de muerte se fortalece, como en una depresión, un odio intenso, o en los deseos de suicidio. También en la sociedad observamos estos ciclos. Una guerra, un genocidio, una persecución étnica o religiosa, son todas ellas una clara manifestación de la presencia de Thanatos.

Links, fuentes y bibliografía:

--

--