“LA HIPNOSIS: mitos y realidades”

Alba Cobo
Introducción a la Psicología — ugr
6 min readDec 14, 2018

Una persona que está muy interesada en sentirse hipnotizada; piensa que la hipnosis puede ayudarle en sus problemas; está dispuesta a dejarse llevar y a seguir las instrucciones del terapeuta. Según Héctor González Ordi, esto serían características propias de un buen sujeto hipnótico.

En cambio, una persona que está interesada en “saber qué es eso de estar hipnotizada”, sin embargo, siente miedo a perder el control de su voluntad, se muestra desconfiada, por el mero hecho de que, el terapeuta pueda conocer cosas que ella no quiere revelar. Según Héctor González Ordi, esto serían características típicas de un sujeto resistente.

Por lo tanto, según Héctor González, ¿Qué es más fácil hipnotizar a un buen sujeto hipnótico, o a un sujeto resistente?

Es más fácil hipnotizar a un buen sujeto hipnótico.

Una vez dicho esto, ¿Creéis que se puede hipnotizar a todas las personas?

Según el autor de este libro, no. No todo el mundo responde adecuadamente a las sugestiones hipnóticas. La capacidad para ser hipnotizado tiene que ver con las características y habilidades propias de los individuos (expectativas, creencias, actitudes…)

¿Es la hipnosis un estado diferente de consciencia?

Muchas personas creen que la hipnosis es una forma de sueño que implica pérdida de la consciencia. Pero, ¿Qué sucedería si intentásemos dialogar de forma coherente y fluida con alguien que se encuentra “hablando en sueños”? Seguramente tendríamos problemas para obtener respuestas consistentes y significativas a nuestras preguntas, lo usual es que esa persona nos responda con monosílabos o con frases inconexas.

Durante el proceso hipnótico, la comunicación verbal recíproca entre el operador y el sujeto es FUNDAMENTAL.

Lejos de perder la consciencia, el sujeto hipnotizado es totalmente consciente de lo que ocurre a su alrededor, especialmente si está relacionado con el contenido de las instrucciones administradas por el operador.

Ejemplo: Imaginaros que estáis haciendo footing por la ciudad y vais corriendo a muy buen ritmo durante 1 hora y, de pronto, os dais cuenta de que un perro de gran tamaño se acerca rápidamente hacia vosotros con intenciones no demasiado amistosas, lo que os obliga a aumentar el ritmo de carrera.

Mientras que la primera parte de esta situación (hacer footing), sería valorada por muchas personas como placentera e incluso relajante; la segunda parte de esta situación (huir del perro), sería valorada como amenazante e incluso provocaría miedo.

Ambas situaciones son distintas, pero no son estados de consciencia distintos. Son situaciones que nosotros valoramos subjetivamente de distinta manera, incluso cuando la actividad fisiológica es similar (aumenta la tensión muscular, aumento del ritmo respiratorio, sudoración excesiva…)

Según Héctor González Ordi, existen muchas técnicas de inducción hipnótica, probablemente tantas como especialistas en hipnosis hay. Sin embargo, la mayoría de las técnicas de hipnosis incluyen en sus contenidos instrucciones que van dirigidas a potenciar 3 componentes principales:

-Instrucciones para favorecer la relajación.

-Instrucciones para favorecer las respuestas motoras del sujeto.

-Instrucciones para favorecer la imaginación.

A continuación, voy a poner un pequeño ejemplo de cada una de ellas, y en concreto, en clase me centré en las instrucciones para favorecer la imaginación.

-Instrucciones para favorecer la relajación:

Siéntate lo más cómodamente posible. Por favor, préstame mucha atención y trata de concentrarte totalmente en lo que yo te vaya diciendo. Permanece con una actitud receptiva y pasiva. Trata de imaginarte lo más intensamente que pueda todo lo que te vaya diciendo. No intentes analizar tus sensaciones y deja que mi voz absorba toda tu atención. Déjate llevar a partir de este momento: Bien, por favor cierra tus ojos. Esto hará que te encuentres mucho más cómodo y relajado. Hará que te encuentres mucho más tranquilo y en paz. La mayor parte de la tensión que puedas sentir en este momento es de carácter muscular; de forma que si relajas todos los músculos de tu cuerpo, podrás sentir que descansas más confortable y profundo….

-Instrucciones para favorecer las respuestas motoras del sujeto:

Quiero que te sientes lo más cómodamente que puedas y te relajes. Mientras estás sentado coloca ambas manos sobre tus muslos con las palmas y los dedos extendidos hacia abajo. Cierra los ojos. Concéntrate en tu respiración. Observa que cuando tomas aire, tu pecho se hincha y cuando expulsas el aire, se deshincha como si fuera un globo… Observa que cada vez que expulsas el aire, tu respiración se hace más lenta… más pausada… más relajada… sólo con proponértelo. Tu respiración es más pausada ahora. Ahora quiero que te centres en tus manos. Nota como están en contacto con la tela del pantalón. Nota la textura con la yema de tus dedos… tal vez rugosa… lisa… cálida… fría…

-Instrucciones para favorecer la imaginación:

Siéntate y cierra los ojos de la manera más cómoda posible. Imagínate que te encuentras en lo alto de una montaña en un día muy caluroso de primavera. Te encuentras en lo alto de la montaña y debajo de ti se extiende un valle muy verde y frondoso. Por el valle discurre un pequeño río de montaña de aguas muy claras y muy limpias. A su alrededor puedes ver el bosque de montaña con los distintos tipos de árboles, arbustos, matorrales, flores, etc. Al respirar profundamente puedes sentir el aire puro y fresco de la montaña entrando en tus pulmones y haciendo que te relajes un poco más… un poco más. Vamos a empezar a descender por la montaña, te irás sintiendo más y más profundamente relajada… más y más profundamente tranquila. 1… empezamos a descender… 2… sientes al caminar, la hierba fresca bajo tus pies… 3… 4… sientes como según desciendes, la brisa refresca tu cara y hace que te sientas aún más y más relajada… más y más tranquila… 5… a medida que caminas hacia abajo puedes oler los distintos aromas del campo… pinos… abetos… flores… 6… todo es multicolor… verdes de distintas tonalidades… amarillos… azules… marrones… 7… vamos descendiendo a tu ritmo… sin prisas… 8… a medida que descendemos, te vas relajando más y más profundamente… 9… puedes oír el canto de los pájaros del bosque… los distintos sonidos de la naturaleza…10… ya estamos aproximadamente a mitad del camino…

¿Se pierde el control del comportamiento cuando se está hipnotizado?

Ningún paciente o sujeto hipnotizado realizará algo que realmente no quiera hacer, por mucho que su hipnotizador se lo “ordene”.

Os preguntaréis: ¿cómo es posible que la gente realice comportamientos tan absurdos en TV?

Comportamientos como: “creerse un cantante de Rock & Roll”, “volver a jugar como cuando era un niño”…

Estos comportamientos no suponen transgresión de normas morales o éticas como para que el sujeto se encuentre en una situación de conflicto. Cualquier persona podría realizar dichos comportamientos sin estar hipnotizado (por una apuesta, unas copas de más o por mera diversión).

¿Se puede mentir estando hipnotizado? ¿Qué pensáis?

La respuesta según este autor es que sí. Mientras se está hipnotizado se recuerda más pero lo que se recuerda no tiene por qué ser exactamente lo que ocurrió realmente.

Aquí os dejo un enlace para que veáis una sesión de hipnosis en directo: https://youtu.be/Hpolr2OeNIY

No dudéis en poner en práctica estas técnicas de hipnosis.

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