¿Casarse por amor?
“Las cosas son como son, sufrimos porque las hemos imaginado distintas”.
Alejandro Jodorowsky, cineasta y escritor chileno.
Hace poco leí a la psicóloga Nicole LePera indicando que uno no debería casarse por amor. Si no por una de las siguientes siete razones. ¿Las exploramos?
1. Romper ciclos juntos y construir un hogar emocionalmente saludable.
¿No es genial cómo dos personas pueden unirse para crear algo que nunca tuvieron? Imagínate construir ese hogar emocionalmente saludable que no tuviste, con alguien que comparte tu visión. ¿Qué crees que se necesita para romper esos ciclos? ¿Cómo te sentirías al crear un espacio lleno de amor y comprensión, diferente a lo que conociste?
2. Crecer juntos y sanar heridas antiguas.
La idea de que alguien más no es responsable de tu felicidad, sino un compañero en el viaje de crecimiento personal es liberadora. ¿Has pensado en cómo el aprender y sanar juntos puede fortalecer una relación? ¿Qué significa para ti tener a alguien que no sólo te acompaña, sino que también te ayuda a enfrentar y sanar tus heridas pasadas?
3. Manejo del conflicto y la reconciliación.
La verdadera cercanía surge en cómo se manejan los conflictos. ¿Alguna vez has experimentado ese momento de reconciliación donde un conflicto termina acercándote más a tu pareja? ¿Cómo es para ti ese proceso de disculparse y realmente resolver los problemas, en lugar de simplemente olvidarlos?
4. Desarrollo de habilidades emocionales y comunicación saludable.
Madurez es reconocer que las relaciones requieren esfuerzo y trabajo. ¿Has reflexionado sobre las habilidades emocionales y de comunicación que has desarrollado? ¿Qué tan preparada te sientes para poner esos esfuerzos en una relación y realmente trabajar juntos para crecer?
5. Compartir alegrías cotidianas y tener una auténtica amistad.
A veces, los momentos más simples son los más significativos. ¿Has pensado en cuánto valor tiene reírse juntos o disfrutar de algo tan normal como las compras? ¿Qué lugar ocupa la amistad en tus relaciones románticas? ¿Cómo contribuye esa amistad a la calidad de tu relación?
6. Sentirse seguro y ser uno mismo.
Encontrar a alguien que te permite ser auténticamente tú es crucial. ¿Cómo es para ti ese sentimiento de seguridad y aceptación? ¿Qué importancia le das a poder hablar abiertamente sobre tus sentimientos y preocupaciones con tu pareja?
7. Elegir conscientemente a la pareja y respetar su humanidad.
El acto de elegir a tu pareja una y otra vez, especialmente en los momentos difíciles, es un compromiso profundo. ¿Has pensado en lo que significa respetar y admirar a tu pareja como ser humano? ¿Cómo manejas los momentos difíciles y qué te motiva a volver a ellos, a pesar de los desafíos?
Y yo le agregaría:
8. Que todo fluya de manera natural.
Hay un encanto especial en dejar que las cosas fluyan de manera natural en una relación. ¿Te has detenido a pensar en la paz que surge cuando no hay presiones ni expectativas forzadas? Cuando permitimos que la relación se desarrolle a su propio ritmo permitiéndonos que se pueda generar una conexión auténtica y profunda. ¿Cómo te sientes al pensar en una relación que evoluciona naturalmente, sin la necesidad de forzar momentos o sentimientos? ¿Qué significa para ti disfrutar del proceso de conocer a alguien y dejar que las cosas avancen en su propio tiempo y manera?
Si todo lo anterior se cumple, es mucho más probable que la relación avance de acuerdo a los objetivos planteados, generando sonrisas naturales y que la emoción de tener una pareja o incluso casarse genere felicidad.
Si no es así, podría ser interesante evaluar cada punto para entender por qué no se está logrando lo esperado. Buscar soluciones, dar tiempo para el cambio y luego hacer una nueva evaluación puede ser útil.
No soy partidario de luchar hasta el final ni de forzar relaciones. Aunque valoro mucho el punto 8, también es importante cumplir con los aspectos mencionados anteriormente.
La vida es demasiado corta como para pasar nuestro tiempo con las personas equivocadas. La persona adecuada llenará nuestra alma, nos dará esperanza, nos ayudará a seguir aprendiendo y, sobre todo, nos permitirá enfrentar con optimismo todo lo que venga.
“Me gusta la gente capaz de entender que el mayor error del ser humano, es intentar sacarse de la cabeza aquello que no sale del corazón”.
Mario Benedetti, periodista y novelista uruguayo.
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¡Que tengas un buen día!
