Los atardeceres
“La apariencia de las cosas variarán según las emociones, y así vemos magia y belleza en ellas, pero en realidad, la magia y belleza están en nosotros”.
Kahlil Gibran, escritor y poeta libanés-americano.
Los atardeceres, ¿no son increíbles? La manera en que nos impactan, creando tantas emociones dentro de nosotros.
¿Por qué al ver un atardecer siempre vemos a gente tomando fotos? Incluso hace poco vi a una pareja de chinos corriendo hacia el malecón de Barranco para alcanzar a ver la puesta del sol y tomar las fotos precisas. Es como si todos estuviéramos en una danza hipnótica ante el sol, como si debiéramos ver cómo se oculta.
Muchas veces me he preguntado cuál es el significado de que el sol se oculte. ¿Es solo la belleza del agua, lo hermoso de la mezcla de colores, o significa el fin de algo? O quizás, la otra interpretación es que aquí termina algo, pero comienza algo nuevo. Llega la oscuridad, y con la oscuridad, al día siguiente, la oportunidad de volver a empezar.
Siempre me quedo maravillado viendo el sol hasta que desaparece completamente en el horizonte. Lo he hecho desde la playa, en la arena, en el pasto, abrazado con alguien, solo, tomando fotos, grabando. Siempre me ha gustado observar cómo el sol desaparece en el horizonte.
Sin embargo, hace poco, Nico me hizo darme cuenta de que lo maravilloso no estaba en que el sol se fuera, sino en lo que sucedía después. ¿Has observado lo que ocurre luego de que el sol se pone? Hay una capa de colores por todo el cielo, como si fuera una pintura. Me sorprendió, porque yo solía enfocarme solo en cómo el sol se ocultaba. Pero el espectáculo post-sol también es fascinante.
Si lo llevamos a la metáfora de la vida, siempre notamos que el sol se oculta para finalizar el día, así como las acciones que tomamos pueden estar dando fin a una etapa de nuestra vida. Pero antes de comenzar esa nueva etapa, antes de que anochezca, podemos parar a apreciar lo bello. Esa etapa entre la luz del sol y la oscuridad, llena de colores, nos puede servir como impulso para reflexionar sobre lo que hemos logrado antes del nuevo anochecer.
Piensa en ese momento de tu vida que sientes que está acabando, pero antes de comenzar el siguiente gran paso, detente a disfrutar. Observa qué se ha formado, cómo tus errores y aciertos te han llevado a donde estás ahora. Y antes de dar ese siguiente gran paso, reflexiona, toma un tiempo para agradecer y continuar.
Los atardeceres son hermosos, pero lo que sucede después también lo es y puede ser justo la pausa necesaria para generar un cambio en nuestras vidas.
Inténtalo y me cuentas.
“Luego alcancé a comprender que el tiempo nunca se gana, y que nunca se pierde, que la vida se gasta, simplemente”.
Almudena Grandes, escritora y autora española.
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¡Que tengas un buen día!
