¿Quién eres tú?

Jonathan Martell
Jonathan Martell
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4 min readJun 13, 2022
Bar en Cajamarca. Agosto 2021

“O te enfrentas a lo que es la realidad, o puedes estar seguro de que la realidad se ocupará de ti”.

Alex Haley, escritor estadounidense.

¿Quién eres realmente?, ¿cómo te identificas?, ¿qué creencias tienes?, ¿cómo las adoptaste?, ¿quién te las enseñó?, ¿has cambiado de parecer?, ¿con qué frecuencia lo realizas?, ¿qué modelos tomas como ejemplos?

Anda al espejo y mírate. ¿Qué observas?, ¿quién eres tú? Enumera uno a uno, cada una de las características que te hacen ser tú. Quizás pueda ser tu personalidad, apodo del colegio, algún rasgo físico, una mueca, logros profesionales, hobbies. De nuevo, ¿quién eres tú?

Esta vez, mira con mayor detalle. Puedes comenzar por tu ojo. Observa tu iris. ¿Qué color ves?, ¿puedes notar esas ramificaciones oscuras?, esas distintas tonalidades que te hacen ser tú. Observa más allá, ¿qué hay detrás de esos colores?, ¿cómo se están formando?, ¿realmente es ese color?, ¿qué pasaría si otra persona lo ve con otra tonalidad?, ¿quién tendría la razón?

Mira tus dos ojos, ciérralos. Ábrelos, ciérralos. El abrir y cerrar nos deja la sensación de estar presentes. Tú estás en control de la situación, del abrir y cerrar. De imaginar los colores y darle la forma que tú quieras.

Mira ahora tus manos, ¿qué notas?, ¿encuentras heridas?, ¿qué tonalidad tiene? Tócalas. ¿Qué sientes?, ¿son suaves?, ¿qué te genera? Ahora, qué sucede si tus manos recorren tus brazos. ¿Qué sientes ahora?, ¿qué emociones se despiertan al tocar tu propia piel?, ¿origina alguna sensación positiva?, ¿o es lo contrario?

Toca tu rostro mientras te miras al espejo. Escucha tu respiración. Inhala, aguanta la respiración dos segundos. Ahora, exhala y aguanta de nuevo la respiración. Repite el proceso por cinco veces.

Vuelve a tocar tu rostro. Obsérvate. Respira una vez más ¿Cómo te sientes ahora?, ¿quién eres?, ¿qué pensamientos emergen?, ¿crees que puedes olvidarte de ellos?, ¿por qué no?, ¿te persiguen durante el día? Vuelve a la respiración e intenta enfocarte en el sonido y en cómo tu cuerpo se llena de aire y luego suelta todo.

Sácate los zapatos y las medias. ¿Qué ves en tus pies?, ¿acaso has recorrido mucho?, ¿o quizás muy poco?, ¿crees que tus pies puedan responder quién eres?, ¿por qué?, ¿qué notas en tus dedos y en la piel? ¿Cuánto te han ayudado tus pies a ser quién eres hoy en día?, ¿de qué manera te ayuda en el día a día?, ¿sin tus pies podrías alcanzar tus objetivos diarios?

Analicémoslo a detalle, ¿cuándo fue la última vez que tus pies te ayudaron a lograr ese objetivo que tanto querías?, ¿suena raro? Vamos, abre la mente y piensa en los detalles, en el momento exacto. En cómo sirvió de apoyo para todas las actividades que tenías en la mente. En cómo fue tu gran aliado.

Entonces, ¿quién eres tú?

Cierra los ojos. Imagina la última vez que saltaste de felicidad. ¿Cuándo fue?, ¿fue con una o varias personas?, ¿por qué te hizo feliz?, ¿cómo demostraste tu felicidad?, ¿se volvió a repetir?

Vayamos por lo opuesto. ¿Cuándo fue la última vez que perdiste los papeles? Aquella situación tan fuerte que quizás originó que hirieras a otra persona. ¿Por qué reaccionaste de ese modo?, ¿te arrepientes?, ¿por qué?, ¿por qué sientes que esa emoción te sobrepasó y te llevó a hacer algo que no querías?, ¿o es que sí lo querías?

¿Cuándo fue la última vez que alguien te susurró al oído unas palabras de tranquilidad? Aquellas palabras que resonaron en todo tu cuerpo. Esas palabras que estuviste esperando, o quizás no, pero que causaron un profundo impacto en ti y te permitió reaccionar desde la tranquilidad para continuar.

Tócate, observa, siente, piensa, respira, analiza, sueña. Ese eres tú, aquel que decide cómo darle forma a lo que ocurre a tu alrededor. Lo que es rojo puede ser azul. Si hace frío, puedes creer que hace calor. Aquella acción negativa del pasado realmente puede ser positiva. ¿Por qué no?

Pero, ¿quién eres?, ¿es que somos una mezcla de emociones, sensaciones, pensamientos y acciones?, ¿ese eres tú?, ¿realmente piensas que eres tú?

¿Es que acaso todo es una interpretación? Y si es así, ¿entonces no bastaría con interpretar nuestro día a día como quisiéramos para encontrar tranquilidad?, ¿para ser felices?

Quién si no somos nosotros para interpretar lo que nos pasa. A diario, recibimos consejos de diferentes personas, vemos noticias, stories en Instagram y paneles de publicidad que nos dicen cómo deberíamos estar viviendo nuestro día a día.

¿Seguimos esos caminos?, ¿o es que estamos creando los nuestros?, ¿estamos interpretando la realidad a nuestra conveniencia?, ¿o nos dejamos llevar por las realidades de otras personas?

Si nos estamos dejando llevar, puede ser duro chocar con la realidad y descubrir que finalmente todo depende de nuestra interpretación, ¿o es que no es así?, ¿existe otro factor que altere nuestra realidad?

¿Es que realmente existe una realidad?, ¿realmente existe un yo? Quizás todo se encuentre basado en nuestro ego. Aquel que nos impide ver con claridad lo que sucede. Quizás si nos liberamos del ego, podamos responder si realmente existe una realidad o incluso un ‘yo’.

Por ahora, comencemos a cuestionar esta realidad que estamos interpretando ahora mismo. ¿Lo intentamos?

“La realidad es simplemente una ilusión, aunque muy persistente”.

Albert Einstein, físico teórico alemán.

¡Que tengas un buen día!

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