La lengua muerta
Relatando en corto
No hay forma de ponerse cómodo en esta miserable cama. Llamo cama a la ocurrencia de un sádico que decidió poner colchones de gomaespuma sobre un soporte plegable de madera. A mi izquierda, la pared; a mi derecha, Greta, la guardia de mi celda.
Este es el comienzo de mi creación más reciente publicada en La Revista Torpedo. Les recomiendo mucho la lectura no ya de mi relato que esto es cosa de ustedes sino de la revista en general. Es un gran esfuerzo por dar cabida a las creaciones literarias, reflexiones y demás esfuerzos artísticos que siempre vale la pena revisar. Me siento muy orgulloso de que me hayan dejado publicar en sus páginas digitales mi pequeña aportación narrativa.
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