Etiquetas en redes: aciertos y desaciertos
Por Cristian Martínez González, estudiante de Periodismo
Encabezadas por el símbolo de número, también llamado gato, almohadilla o, simplemente, numeral, las etiquetas ya forman parte indisoluble del lenguaje de las redes sociales.
En español, es este nombre, y no hashtag, el término apropiado para referirse a esa expresión incluida con dos propósitos claros en las publicaciones de la red de redes: destacar los temas relevantes sobre los que trata y permitir que sea fácilmente localizada junto con otras que contengan esa misma expresión.
Como señala la última edición de la Ortografía de la lengua española, en caso de preferir el extranjerismo hashtag, (de hash ‘almohadilla’ y tag ‘etiqueta’) lo apropiado es que se escriba en cursiva o, si no se dispone de este tipo de letra, entre comillas.
¿Pero si existe un término en español, será necesario emplear uno ajeno a nuestra lengua? A veces, muchos hablantes ni tan siquiera escriben o pronuncian correctamente las palabras extranjeras; no obstante, como en otras cuestiones relacionadas con el idioma, serán ellos quienes tengan la última palabra.
Sobre el uso apropiado de las etiquetas en las redes sociales, la primera obra académica que ofreció recomendaciones lingüísticas al respecto fue el Libro de estilo de la lengua española, publicado por la Real Academia Española (RAE) en el año 2018. De este volumen, de consulta imprescindible, seguidamente relacionamos algunos consejos que puedes emplear o no en tus publicaciones en la red de redes.
Aunque parezca una verdad de Perogrullo, es necesario recordar que, para el correcto funcionamiento de las etiquetas, las palabras que forman parte de ellas deben escribirse unidas entre sí, pese a que, en ocasiones, quizás por descuido se escriba el símbolo de número separado de las palabras, lo que veta la función principal de las etiquetas. Así, lo recomendado sería #BuenIdioma, por ejemplo.
Como se observa en la etiqueta anterior, ambas palabras están escritas con mayúscula inicial, pues, seguramente coincidirás conmigo en que #acubaponlecorazon es más difícil de entender que #ACubaPonleCorazón. Por tanto, se prescribe, para facilitar la comprensión de las etiquetas, el empleo de la mayúscula inicial en todas las palabras, incluidas las no significativas.
Sin embargo, cuando la etiqueta forma parte del enunciado y se compone de una sola palabra, es preferible escribirla en minúscula (salvo que se trate de un nombre propio, naturalmente). Así, lo mejor sería Hablamos sobre las #mipymes en el último pódcast de esta semana. Si se emplean como elementos externos al enunciado, esto es, como formas ajenas al texto, generalmente al final de la publicación, tal cual se observa en «Aclaramos dudas sobre el español actual. #BuenIdioma #DudasLingüísticas», no requerirán puntuación.
Asimismo, pese a que Twitter, por ejemplo, no discrimina en el uso de las etiquetas con tildes o sin ellas a la hora de hallarlas en el buscador, al punto de que, si escribimos #pódcast o #podcast, pueden aparecer tuits con ambas etiquetas, lo indicado es que, salvo por imposibilidad técnica, no se prescinda de las tildes en las etiquetas: #FelizDíaDelNiño.
Recordemos que su correcta escritura hará que sean más comprensibles por los demás usuarios de las redes sociales y que no den pie a ambigüedades como en #LaMamaIncreible en lugar de #LaMamáIncreíble.
¿Debería usar etiquetas en mis publicaciones en las redes sociales?
No es obligatorio, pero sería provechoso, pues es lo recomendado.
¿Sobre qué tema debe ser mi etiqueta?
Naturalmente, si su publicación es sobre el deporte, por ejemplo, usar etiquetas como #libros y #lectura, no es muy aconsejable ni tampoco beneficioso para ella.
¿Entonces cuáles debo usar?
Insistimos en que las etiquetas deben versar sobre las temáticas de la publicación en las que se colocan.
También sería útil realizar un monitoreo para conocer cuáles son las más usuales sobre el contenido del que se está subiendo información a las redes. Recordemos que esto permite que quien las busque las pueda localizar con facilidad.
Por último, si administras una página personal o cuenta institucional conviene que comiences a posicionar una etiqueta propia. ¿Por qué? Bueno, por varias razones, entre ellas, porque te facilita tener “localizadas” todas las publicaciones con esa etiqueta; además, te ayuda a potenciar la identidad de la empresa o marca personal y, desde luego, mientras más las uses, tu visibilidad en los motores de búsqueda aumentará.