Dar o no dar, esa es la cuestión: Reflexiones sobre el K Day 2019

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Post escrito por Carina Szpilka

Cuando nació K Fund allá por el 2016, uno de nuestros principales objetivos era poder aportar valor a las empresas participadas del portfolio. Por eso desde el primer día organizamos diferentes encuentros con los emprendedores, el principal de ellos el K Day en el que juntamos a todos los fundadores durante dos días para “pensar en alto” todos juntos.

Saber si dar valor ayuda a que las empresas sean más sostenibles y exitosas está aún por ver -hemos intentado buscar algo de literatura al respecto pero no la hemos encontrado- así que no hay una demostración empírica que muestre la efectividad de este esfuerzo. Pero sí tenemos claro que este esfuerzo merece la pena, aunque sea sólo por poder compartir e intercambiar experiencias con las compañías en las que hemos invertido; al final, todo fundador pasa por situaciones parecidas y tiene momentos más altos y más bajos. Ver que no es el único ayuda.

Desde K creemos que es muy importante que las empresas sean muy buenas en cuatro cosas:

1. Definir una cultura y valores claros que alineen a todo el equipo alrededor de una visión
2. Usar herramientas y metodologías de diseño no sólo para el desarrollo de productos, sino también para el desarrollo de los procesos y de toda la organización en su conjunto
3. Tomar decisiones basadas en datos y saber medir lo que es adecuado a cada fase de tu empresa
4. Ser consciente de que o controlas bien la caja o mueres seguro.

A lo largo de este tiempo hemos intentando trabajar todas estas áreas con resultados desiguales, puesto que al final cada empresa está en un “momentum” particular y es difícil que lo que es útil para una sea útil para todas.

Pero después de mucho reflexionar, sí que nos hemos dado cuenta de que una cosa común a todas es el desarrollo de la capacidad de liderazgo de los emprendedores y eso es sobre lo que hemos trabajado este año en el K Day.

Hemos tenido la suerte de contar con primeros espadas como Robert de Typeform, Agus de Wallapop y Paulo de Dropbox, quienes nos han contado en primera persona cómo han creado equipo y cultura, cómo han trabajado con OKRs y cómo han vivido los momentos altos pero también los momentos bajos en su día a día.

También tuvimos oportunidad de formarnos de forma más académica de la mano del profesor Pin (IESE), una referencia en el área de la organización empresarial.

Y cómo no, sacamos muchísimo contenido simplemente por el hecho de hablar entre nosotros, de compartir como los CEOs de cada empresa han puesto en marcha sus OKRs, de cómo afrontamos las rondas de financiación y de cómo seguir construyendo el futuro de nuestras empresas.

Creo que el trabajo mereció la pena y que vamos aprendiendo, porque cada vez el feedback es mejor y la valoración global de los participantes este año ha sido del 4.3 sobre 5. Para el año que viene tomamos nota de las áreas de mejora y esperamos rozar el 5 :-)

Así que mi conclusión es que sí, que dar o al menos intentar dar valor siempre es positivo, no tanto porque vaya a cambiar el futuro de las empresas, sino porque sentir que tienes una red de gente detrás que te entiende y que te apoya da fuerzas para seguir luchando en un día a día que cada vez se ha vuelto más exigente.

¡Gracias a todos los que nos habéis acompañado y a por el siguiente!