La nube: un viaje sólo de ida
Cada vez son más las empresas, sea cual sea su tamaño, que han dado el paso e iniciado su viaje hacia la nube. Sin embargo, aún existen situaciones en las que se plantean soluciones tradicionales basadas en on-premise, ya sea por las dudas que suscita, cuestiones de seguridad o simplemente por desconocimiento. Pero, ¿qué deberíamos tener en cuenta a la hora de decidirnos a apostar por la nube como solución empresarial? Esta entrada va destinada a introducir ciertas preguntas clave sobre la nube que nos permitan tomar la mejor decisión posible.
¿QUÉ ES LA NUBE?
El cloud computing es un paradigma que permite ofrecer servicios de computación a través de una red, que usualmente es Internet. El tipo y naturaleza de dichos servicios es muy amplio, tanto que habitualmente perdemos perspectiva y nos centramos en aquello más cercano. Siempre ponemos de ejemplo servicios como Dropbox, Gmail o Office 365; o nos vamos al término opuesto más relacionado con el hosting, el housing y el alquiler de infraestructura. En general, la discusión sobre la nube debería ser sobre los pros y contras para la necesidad concreta, y no tanto cuestionar su uso.
¿PARA QUÉ ME SIRVE LA NUBE?
La nube tiene varios modelos de servicio que permiten resolver la mayoría de necesidades digitales de la empresa moderna. La forma natural de agrupar dichos modelos radica en el tipo de recurso subyacente.
Infraestructura como servicio (IaaS), para aquellos casos en los que los que el servicio a alquilar incluye recursos informáticos como almacenamiento, redes, servidores…
Plataforma como servicio (PaaS), si nuestra necesidad está relacionada con el despliegue de aplicaciones y podemos abstraernos de detalles como la infraestructura y los servidores.
Software como servicio (SaaS), para aquellos casos en que únicamente alquilamos el uso de un software destinado a cubrir una necesidad, sin tener en cuenta nada bajo el capó.
¿SON TODAS LAS NUBES IGUALES?
En función de la localización de los recursos existirán diversos tipos de solución en la nube.
Nubes públicas: Cuando los recursos son propiedad de otro proveedor de servicios en la nube, que los administra y ofrece a través de Internet.
Nubes privadas: En el caso de que los servicios y la infraestructura se mantengan en una red privada, y el hardware y software se usan exclusivamente por una única organización.
Nubes híbridas: Los términos intermedios combinan infraestructura local o nubes privadas con nubes públicas para generar una solución donde los datos y las aplicaciones pueden moverse entre ambas para obtener más flexibilidad y opciones de implementación.
¿QUIÉNES ESTÁN DETRÁS?
Hay tres grandes actores en el ecosistema de la nube pública, que dictan el estado del arte de la industria. Cada uno de ellos posee servicios propios, ventajas y áreas en las que es líder respecto a los competidores.
- Amazon Web Services
- Google Cloud
- Microsoft Azure
No obstante, también hay que mencionar que existen otros proveedores que tienen su cuota de mercado, como Heroku, IBM BlueMix o Salesforce.
¿QUÉ VENTAJAS ME OFRECE LA NUBE?
De manera muy resumida, las principales ventajas están relacionadas entre sí. Por un lado, con el bajo coste operacional, tanto en esfuerzos como en recursos, permitiendo que los procesos sean más ágiles y los time-to-market sean mucho más cortos, al poder optimizar la inversión solo en aquellos recursos necesarios.
Por otro lado, la elasticidad y agilidad en tiempo y forma, con tiempos de release más breves, permitiendo evolucionar capacidades y funcionalidades en menos tiempo y manteniendo actualizado el software.
El coste de innovación también es destacable. Un entorno cloud permite experimentar libremente sin amarrarnos a largos contratos o períodos de amortización y grandes desembolsos, pudiendo desplegar soluciones altamente escalables en cuestión de minutos, configurando y provisionando entornos con las últimas tecnologías y acordes a nuestras necesidades concretas.
Si aún le estás dando vueltas a la cuestión on-premise vs. cloud, en el artículo que recientemente publicamos Del on-premise a la nube, analizamos en detalles las ventajas derivadas del uso de este tipo de tecnologías.
La versión original de este artículo fue originalmente publicado en el blog de Keepler en Octubre de 2018.
🎭 Suscríbete para leer sin límites
📚 Lee otro material relacionado
⭐ Mira mis recomendaciones
📨 Apúntate a mi lista