El nuevo fenómeno dentro de TikTok: el auto diagnóstico

Si bien siempre ha existido, el auto diagnóstico se está haciendo cada vez más popular entre las generaciones jóvenes a consecuencia de internet: Hoy TikTok, la plataforma de moda en la red, se ha transformado en un lugar donde los adolescentes y jóvenes se auto diagnostican en base a la experiencia con pares. Asimismo, el 1% de las búsquedas en Google, equivalente a 35 millones, es sobre síntomas y problemas médicos. Este fenómeno ha derivado en un problema más peligroso aún: la auto medicación.

Por Felipe Gallet Q. (ftgallet20)

Editado por Mattias Sandoval G. (@mattibenja)

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En el video de TikTok de “@bytheland.co”, una cuenta de suplementos naturales que entrega consejos y datos de todo tipo, se ve esto: Una joven está al lado de un mensaje que dice “cosas que hacen las personas con ansiedad sin darse cuenta”. Luego comienza a dar ejemplos de aquello: morderse las uñas, distraerse en medio de conversaciones, comer de forma desesperada, entre otros.

Al finalizar, mirando a la cámara, ella sugiere píldoras para auto medicarse. El video dura 30 segundos y tiene más de 350 mil reproducciones.

TikTok es una red social que no ha decaído en popularidad desde su nacimiento en 2016 y es de las más ocupadas entre los niños, adolescentes y jóvenes. Esta plataforma está creada para personas mayores de 13 años y es un lugar donde se pueden subir videos de hasta tres minutos, que son de cualquier tipo: por ejemplo, coreografías, escenas de chascarros, preguntas y respuestas sobre temas de actualidad, videos sobre episodios cotidianos de sus usuarios.

Según un informe realizado por la Asociación de Agencias de Medios en Chile publicado en 2020, el 42% de las personas entre 15 y 45 años dice que TikTok es la aplicación que más usan, además el 20,3% cuenta que pasa más de 50 minutos seguidos navegando en la red social. La gran parte de los usuarios no crea contenido para la App, sino que visualiza e interactúa con material subido por otros usuarios de la red. En este contexto, muchos usuarios de la aplicación han decidido transparentar las enfermedades de salud mental que padecen y contar sus propias experiencias para que otras personas puedan conocer los posibles síntomas.

Publicaciones como la de “@bytheland.co” están repletas de comentarios, en especial de adolescentes, como los siguientes: “Con esto confirmo que la padezco”, “Yo sabía que tenía un problema”, “Cumplo con todas ellas”, “Sí o sí tengo ansiedad”, entre otras por el estilo.

El problema de estos videos que se están popularizando en redes sociales es que niños y jóvenes han comenzado a auto diagnosticarse de manera cada vez más frecuente. “Esto se debe a que encuentran una manera fácil y rápida de encontrar ‘solución’ a lo que padecen”, dice Nadia Garib, psiquiatra infanto juvenil y profesora de las universidades del Desarrollo y San Sebastián, quien además agrega que el auto diagnóstico ha surgido entre ellos muchas veces debido a las dificultades que hay para poder acceder a servicios de salud mental.

Este problema es comparable a las personas que se encuentran enfermas y en vez de ir al médico prefieren buscar por ellos mismos en internet. Eso no es nada nuevo, pero una plataforma social como TikTok lo ha exacerbado y lo ha instalado en generaciones mucho más jóvenes que antes.

Magdalena Pino, psicóloga clínica de la Universidad de Los Andes, quien trabaja con adolescentes, se refiere a este problema diciendo que “cuando un amigo comparte ciertos síntomas y uno cree que tiene los mismos, es muy difícil diferenciar el diagnóstico propio y el de él”. Además, dice que las enfermedades o trastornos nunca se manifiestan de igual manera en cada persona.

La psiquiatra Nadia Garib coincide con Magdalena: “el ser humano es tan diverso que la manifestación de los síntomas es diferente, por eso necesitas la mirada de un especialista”, agrega. Además de llevar a las personas a creer que tienen una enfermedad cuando no es necesariamente así, el auto diagnóstico puede llevar a la auto medicación, una práctica muy perjudicial para la salud.

“Las personas se dirigen a internet y deciden qué psicofármaco es el ‘ideal’ para lo que creen padecer”

La adolescente Magdalena Paz (16), usuaria activa de la red social, tanto espectadora como creadora de contenido, dice haber visto en varias ocasiones videos donde otros jóvenes muestran los posibles síntomas de diferentes enfermedades o trastornos.

Paz desconfía en su información, pero aún así le provoca intranquilidad. “Igual uno queda ‘psicosiado’”, agrega.

En ese sentido, para los expertos, TikTok es una muy buena herramienta de difusión. El aumento de información relacionada con la salud mental es un avance importante de cara al tratamiento y al aumento de enfermedades de este tipo. Que quienes padezcan algún problema sean transparentes ayuda a otros a que puedan sentirse escuchados y saber que no están solos. Pero también tiene desventajas que pueden afectar a la gente.

La pandemia y el encierro aumentaron los problemas de salud mental de las personas, en especial en jóvenes. A comienzos de 2022 la Organización Mundial de la Salud (OMS) entregó un informe científico donde indicó que solo en el primer año de pandemia, los problemas de ansiedad y depresión aumentaron en un 25% en todos los grupos etarios.

Garib explica que durante la cuarentena, gran parte de las relaciones entre personas se produjeron mediante redes sociales o aplicaciones, lo que llevó a que muchos adolescentes terminaran expresando sus sentimientos y emociones en estos espacios.

“En la pandemia al estar lejos de sus compañeros y pares, en las redes encontraron otros que pasaban por lo mismo, con los cuales podían compartir y conversar”, agrega Garib.

TikTok e Instagram fueron las plataformas favoritas durante la pandemia, incluso según estudios de Jelly (centro de estudios de temas digitales en Chile), el 52,5% de los jóvenes y niños pertenecientes a la generación Z — nacidos a fines de los 90 y mediados del 2000 — pasó más de 5 horas diarias en TikTok.

Según Garib, este aumento de gente en las redes sociales se debió, principalmente, a la concentración de la mayoría de las actividades cotidianas en la red: clases, juegos, conversaciones. Para la psiquiatra, el problema de acceso a la salud mental es un factor fundamental en el camino hacia la auto medicación: “al no tener acceso a una consulta, las personas se dirigen a internet y deciden qué psicofármaco es el ‘ideal’ para lo que creen padecer”, dice. Hoy, además, es muy fácil acceder a los remedios. Están en internet o puestos ambulantes.

“Encuentro aberrante cuando voy a la feria y veo puestos que venden remedios que son altamente peligrosos si se ingieren de la manera incorrecta”, agrega Nadia Garib.

TikTok funciona mediante un algoritmo, que le muestra a los usuarios el contenido más parecido a sus intereses. Cuando un usuario interactúa con un cierto tipo de videos, le aparecerán más relacionados sobre ese tema. Esto provoca que los jóvenes al interactuar con esta clase de contenido solo comiencen a consumir más de lo mismo y entren en un ciclo constante en la red social.

En su página web oficial, la misma plataforma define este funcionamiento como: “un flujo de video adaptado a tus intereses, lo que facilita la búsqueda de contenidos y creadores que te gustan. Es impulsado por un sistema de recomendación que ofrece contenido que probablemente le interese a cada usuario”.

La psicóloga clínica Magdalena Pino dice que un problema común del auto diagnóstico es que los pacientes se presenten con una idea preconcebida muy poco flexible y con un cierto pesimismo frente a lo que les pasa, generando un sesgo frente a lo que les diga el terapeuta.

Sobre el explosivo aumento del uso de esta red social y de los problemas para la salud mental que puede generar, Soledad Garcés, experta en redes sociales y directora ejecutiva de la “Fundación Para la Convivencia Digital”, señala que “en Internet estos peligros van a seguir existiendo y cada vez serán más, como sociedad debemos cuidar y educar -a los jóvenes- al respecto, para que puedan usar las redes de manera positiva”.

Es por esto que para las especialistas es un tema complicado. Según la psicóloga clínica Magdalena Pino que los jóvenes hagan públicos los problemas que están viviendo puede tener dos caras: “por un lado puedes recibir apoyo y ayuda, además de generar un espacio para quienes sufren lo mismo, pero por otro puedes recibir burlas o críticas que solo van a agrandar el trauma o enfermedad”, agrega.

Si bien el auto diagnóstico es un fenómeno que siempre ha existido, los expertos coinciden en que no hay que negar ni condenar el uso del lugar donde hoy más han proliferado: las redes sociales. De esta forma, los especialistas son enfáticos en que estas se deben aprovechar positivamente.

Nadia Garib estuvo presente en el XXXIX Congreso de la Sociedad de Psiquiatría y Neurología de la Infancia y la Adolescencia que se llevó a cabo en noviembre del año pasado en Santiago, y cuyo lema fue “un tránsito reflexivo en tiempos de cambios”. En el encuentro, se habló de auto diagnóstico, del uso de internet y de cómo aprovechar las redes sociales para prevenir trastornos de la salud mental. Además, se propuso instalar dispositivos de ayuda en las redes sociales, que se activen cuando algún usuario escriba o realice acciones que merezcan atención profesional. Así, cuando esto pase, el usuario será dirigido a una página web donde será atendido por especialistas en salud que responderán sus dudas y lo acompañarán.

Nadia ejemplifica con un estudio que se presentó en el Congreso y que consistía en una aplicación para la prevención del suicidio. La diferencia de este dispositivo con quienes ofrecen ayuda y compañía por redes sociales es que siempre hubo un profesional apoyando por detrás a la aplicación. Explicó, además, que lo que se puede hacer en redes sociales es entregar un acompañamiento. “No podemos diagnosticar por redes, pero sí acompañar”, agrega.

BIO:

Felipe Gallet tiene 24 años y está cursando el tercer año de Periodismo en la UC. Anteriormente, ha publicado en el medio “Rumbo a Primera”.