La batalla campal de los influencers de la política sub-35

Tras el estallido social, se transformaron a corta edad en voces activas de la política nacional en redes sociales. También, en justicieros contra las “fake news” en un ambiente hostil y polarizado. Pero además, en blanco de ataques de odio y troleo, incluso de amenazas de muerte. Esta es la realidad de los influencers que tratan la política en sus perfiles, ganando cada día más adeptos y adversarios en el mundo virtual.

kmcero
Kmcero
7 min readOct 18, 2022

--

De izquierda a derecha: Julieta Martinez, Juan Vallejos y Josefa Araos
De izquierda a derecha: Julieta Martinez, Juan Vallejos y Josefa Araos

Por: Maximiliano Galleguillos C.

⏰7 minutos de lectura

El 4 de noviembre de 2019, Josefa Araos (24), estudiante de Derecho en la Universidad de Chile, publicó un video sobre las repercusiones que trajo el estallido social: “Constitución 101: ¿Qué es? ¿Por qué es tan importante?” fue el título. La también escritora empezó a publicar contenido político, informando sobre el plebiscito de entrada, AFPs, leyes que se estarían discutiendo en el Congreso, paridad. Utilizando post-it con información política resumida de manera simple y videos explicativos de no más de cinco minutos, hizo que sus publicaciones llamaran la atención y se posicionaran en las redes.

“Siento que entregando la información en poco tiempo y fácilmente hizo que subieran mucho mis seguidores (en Instagram). Fueron así como hasta 150 mil, una cuestión brutal”, explica Araos quien contaba con 50 mil seguidores antes de su boom.

Este contenido no era habitual, pero porque el mundo virtual ya no era el que conocía.

Las redes sociales luego del 18 de octubre habían cambiado de manera radical. Hasta entonces, se hablaba de política mayoritariamente en Twitter, pero no era una conversación fácil de encontrar en Instagram ni en TikTok.

Antes del 18-O, los usuarios preferían mantener en secreto su postura política, para que sus seguidores no hicieran juicios y así no entrar en discusiones. Pero para entonces, eso cambió.

Araos, junto a nombres como Juan Vallejos (32), periodista y analista, y Julieta Martínez (19), activista ambiental, se transformaron en algo así como los influencers de política sub-35 que dejó el estallido social. Estos ‘influencers’ no necesariamente querían agradar a sus seguidores. En cambio, querían hablarles de lo que ocurría en el país.

A corta edad, se han convertido en voces activas de la política nacional y en ‘justicieros’ que buscan derribar la desinformación política que circula en redes sociales en un ambiente hostil y polarizado. Sin embargo, eso no los ha eximido de ser un flanco de ataques de odio y troleo característicos del mundo virtual.

Vallejos comenzó subiendo videos a TikTok e Instagram que contenían toques de humor. Su contenido se viralizó rápidamente. Recuerda que subió de 3 mil seguidores a 10 mil en un día: “Cuando ya superé los 10 mil (seguidores), yo dije como: “Hay gente que tiene interés en ver mi contenido político de humor. Se puede ser serio sin ser grave. Ese soy yo”, afirma el influencer.

Martínez, por su parte, llamó la atención en Instagram con contenido apolítico. “Lo que genero con mi plataforma es no ver la política como un color, sino hablar de la posibilidad de desarrollar soluciones reales a largo plazo. Hay que democratizar el acceso a la información, entender de lo que se habla, romper con el tecnicismo y empezar a involucrarse en este mundo”, asegura Martínez.

“La gente la agarra con personajes cada cierto tiempo que tienen una posición política súper desafiante”, confiesa Araos. “Tienen en su target influencers de temas medios controversiales para atacarlos en masa, y eso es preocupante porque puedes silenciar a muchas personas”.

Su lucha contra la desinformación

De acuerdo a los expertos, estos influencers políticos han surgido en Chile y el mundo dadas las coyunturas de crisis sociales.

“Cuando hay crisis de sentido empiezan a salir los asignadores de esto y esos son los líderes de opinión. Así las comunidades van buscando y encontrándolos, y eso se generó con el estallido social”, dice Enrique Núñez, periodista, investigador y experto en desinformación.

Asimismo, afirma que “lo que ellos hacen es entender a su audiencia y la mirada del mundo respecto a hechos políticos. El mayor valor que entregan estos personajes no es solo entregar los datos o su levantamiento, sino que es la interpretación de estos”.

Paola Díaz, politóloga experta en redes sociales, asegura que los influencers de política han logrado explicar asuntos políticos de manera muy eficiente a través de un buen uso de formas y formatos. “Contribuyen al debate y utilizan diversas herramientas para poder difundir información de forma un poco más cercana, que siempre es lo más difícil a través de las redes sociales”, dice.

Díaz ratifica que la generación Z y millennials son el grupo etario que más cabida les da a estos personajes, porque la información política que entregan, llega de manera rápida y accesible: “Las redes sociales son el único medio al que esta generación tiene acceso para poder informarse de alguna forma. Se toman el tiempo de escuchar un live, ver un video o de leer una publicación de un influencer político, porque ese es su medio de información”.

Sin embargo, Núñez asegura que mientras sigan existiendo grandes cambios en Chile, a estos personajes se les pedirá cada vez más que sean coherentes con la información que comparten: “Existe una expectativa de que estos líderes de opinión cumplan con una cierta autoridad y responsabilidad por el contenido que entregan, por lo tanto, se les exige coherencia. En política es muy difícil ser coherente”.

Ser los rostros visibles contra las “fake news” los obliga al rigor.

“Actualmente alrededor del 83% del mundo tiene acceso a un smartphone y muchas veces (las redes) se ven plagadas de desinformación”, enfatiza Martínez quien constantemente se ve expuesta a desinformación respecto a temas medioambientales.

“Una ‘fake news’ que he tratado de derribar, tuvo mucho que ver con lo que fue el Tratado de Escazú. Me encontraba con personas que pensaban que por firmar el acuerdo teníamos que cederle mar a Bolivia. Estas son cuestiones que no sé de dónde salen y te das cuenta de que hay mucha información falsa que se tiene que derribar”.

Araos asegura que para frenarla “siempre en todos los posteos trato de poner las fuentes abajo y las referencias de dónde saqué la información porque así la gente también puede ir a leerla”.

Una batalla diaria: los discursos de odio

La odiosidad existente en plataformas digitales es el problema al que más se ven enfrentados estos personajes hoy.

Según Javier Pérez, periodista, Máster en Comunicación Política, hoy estas plataformas alojan sobre todo opinión. “Las opiniones son de un lado o del otro. Hay gente muy fanática tanto de la izquierda como de la derecha”, dice. “Y esto contribuye al discurso de odio, con opiniones sin respaldo”.

“La gente critica para todos lados. Yo no soy político, pero cuando uno empieza a hablar mucho de política y a entrevistar a políticos, las redes sociales te empiezan a juzgar como uno, más aún en el contexto de este país que estamos absolutamente polarizados”, declara Vallejos, quien también asegura que las “opiniones sin ningún argumento” han ido en crecimiento desde el 18-O.

“Ha habido un auge de los ultra, que son los que más trolean, atacan y necesitan encasillarte para poder contraargumentar. Te invalidan. De mí han inventado de todo”, concluye el influencer.

Martínez confiesa que muchos de estos comentarios de odio no tienen ninguna relación con su trabajo político en redes: “El 80% son mensajes que tienen mucho adultocentrismo con términos peyorativos o de connotaciones sexuales. No tienen ninguna crítica constructiva”, asegura.

Muchas críticas llegan incluso a convertirse en grave intimidación. “A veces es demasiado duro el troleo y ataque, me han llegado hasta amenazas de muerte”, dice Vallejos. Martínez cuenta que colegas de ella han terminado con agresiones físicas por expresarse políticamente en redes: “Me han llegado amenazas (de muerte) sí, pero conozco a defensoras ambientales que han terminado con amenazas que llegan a lo físico”.

Araos sostiene que esto se da porque el público general aún considera que para hablar de política se tiene que “ser un hombre heterosexual blanco con más de 40 años para ser tomado en serio”.

La politóloga Díaz afirma que estos mensajes de odio en redes sociales surgen porque los usuarios creen tener “una especie de sensación de inmunidad ante lo que dicen y no se dan cuenta del daño que pueden causar. En el ambiente polarizado de política, la gente siempre ataca por no estar de acuerdo con sus ideales personales, y el debate político en el espacio digital no tiene ningún tipo de regulación, filtro o restricción de lo que puedes decir. Es como un caldo de cultivo para los mensajes de odio, principalmente para los influencers políticos que son la cara”.

Pero ¿qué mantiene a estos líderes de opinión de pie en un ambiente tan hostil como el de las redes sociales?

“Vallejos, Araos y Martínez son tres personas de ámbitos políticos diferentes, pero que tienen mucho en común en la manera de hacer las cosas. Mantienen a un grupo de personas, a una comunidad, a los cuales le generan narrativas y opiniones respecto a un tema donde toman decisiones en base a él”, responde Enrique Núñez.

“Nunca nadie me ha parado en la calle a decirme ni la mitad de lo que alguien me puede haber dicho por redes sociales de forma negativa. Jamás”, enfatiza Vallejo. “Hay una fidelidad de mis seguidores y se agradece un montón para contrapesar todo”.

“(No espero) que todo el mundo esté de acuerdo con lo que pienso o con los candidatos por los que voy a votar, pero siento que es un espacio para tener discusiones con mi audiencia y poder contrastar opiniones que en sí hacen conversaciones muy ricas”, concluye Araos.

A Martínez su audiencia la inspira:

“Me doy cuenta que tengo que hacer la pega bien tratando de profesionalizarme todos los días un poco más y aprovechar mis plataformas. Mientras más grande sean, mayor es la oportunidad que tengo de difundir un mensaje y que valga la pena”.

--

--

kmcero
Kmcero
Editor for

Periodismo universitario, reporteado y escrito por estudiantes de la Facultad de Comunicaciones de la UC. www.kilometrocero.cl