Dulces cada vez más dulces
Evidentemente los dulces deben de ser dulces, hasta ahí estamos de acuerdo, lo que ya no acabo de entender es porque cada vez las galletas, magdalenas, bizcochos, etc. me saben más dulces.
Cada vez hay más niños con problemas de sobrepeso y obesidad, muchas veces se achaca a la falta de ejercicio por el excesivo uso de móviles, tablets, ordenadores; no me cabe duda de que la falta de movilidad influye en el tema del peso, pero también deberíamos de echar un vistazo a nuestras despensas. Cuando yo era niña había cuatro o cinco cosas especiales para la merienda o el desayuno: magdalenas, galletas, bizcochos, ensaimadas y croisants. Ahora vas a una gran superficie y tienes de todos los colores y sabores, pero no solo en las grandes superficies se ha ampliado la oferta, bajas a la panadería y además catorce tipos de pan, tienes bollería para aburrir.
Si a todo esto unimos la falta de tiempo que tenemos hoy en día, está claro que lo más sencillo es coger lo primero que pillas y meterlo en la mochila de tu hijo/a y así te ahorras el prepararle el bocadillo o la fruta, además seguro que no protestan por el almuerzo.
Yo no voy a decir que no lo hago nunca porque estaría mintiendo, pero la verdad es que me preocupa cada vez más el exceso de azúcar que estamos comiendo, sobre todo los más pequeños.
Mis problemas de peso me han llevado a modificar mis hábitos alimenticios y una de las cosas que más estoy restringiendo es el consumo de azúcar y aunque mi hijo, por el momento, no tiene problemas de sobre peso procuro ir acostumbrándolo a ingerir menos dulces, no por ello dejo de darle galletas, bizcochos, etc. eso sí, procuro hacerlos yo en casa para limitar un poco ese consumo de azúcar y para evitar conservantes, colorantes, aromas artificiales y un largo etcétera de cosas desconocidas que incluyen hoy en día los productos envasados.
Tampoco me gusta mucho utilizar edulcorantes, casi prefiero echar la mitad de azúcar que viene en la receta o sustituir ésta por alguna fruta madura que aporte ese toque de dulzor necesario, pero sin pasarnos. Así, además de acostumbrar el paladar de mi hijo a cosas no tan sumamente dulces, de vez en cuando me puedo dar un capricho y tomarme una galleta o un trozo de bizcocho sin tanto remordimiento.
Hoy he probado con unas galletas, llevan azúcar, pero sólo la mitad de la que ponía la receta original y aún así me han sabido bastante dulces y es que hay que tener en cuenta que las he hecho con cacao soluble y uno no sabe muy bien si es cacao soluble o azúcar marrón…..
Bueno, en cualquier caso os dejo mi receta por si os animáis a hacerlas, yo repetiré pero con un poco menos de azúcar 😉
GALLETAS DE CACAO Y AVELLANAS
Ingredientes:
120 gr. Mantequilla
60 gr. Azúcar blanquilla
60 gr. Azúcar integral de caña
1 cucharada de esencia de vainilla
235 gr. Harina
1 huevo
1 pizca de sal
1 pareja de gasificante
60 gr. Cacao soluble
40 gr. Avellanas picadas.
Elaboración:
Lo primero es mezclar muy bien la mantequilla, que debe de estar a temperatura ambiente, con los dos tipos de azúcar.
Después añadiremos la esencia de vainilla y el huevo hasta que esté todo bien integrado.
Juntaremos la harina con el cacao soluble, la pizca de sal y la pareja de gasificante y lo tamizamos. Ahora lo incorporamos poco a poco a la mezcla anterior.
Por último añadimos las avellanas troceadas y mezclamos bien.
Ahora formamos unas bolitas y las ponemos en la bandeja del horno sobre papel de horno dejando separación entre ellas porque con el calor bajarán y se expandirán. Horneamos a 180ºC unos 10/12 minutos.
Nota:
Como salen bastantes galletas lo que yo suelo hacer es formar todas las bolitas y las congelo, así cuando quiero galletas sólo tengo que sacarlas del congelador unos 30 minutos antes de hornear.