Las mejores Enchiladas Verdes

Las enchiladas de mi tía Blanca.

Si te gustan con crema puedes agregarle un poco.

Las enchiladas son todo un tema para mí. Me gustan todas, todas, todas: Verdes, suizas, las suizas de mi mamá, de mole, negras, potosinas, entomatadas, enfrijoladas… La lista podría continuar, y tal vez es eso lo que más me gusta de las enchiladas, que se pueden hacer casi con lo que sea.

En México, utilizamos la expresión “no son enchiladas” para anotar que algo no es tan fácil de hacer como una enchilada. Siendo honestos, debo decir que las enchiladas tampoco son enchiladas. O sea sí son, pero hacerlas es complejo.

Lo que quiero decir es que aunque si son sencillas, tienen ciertos detalles muy sutiles que pueden marcar la diferencia entre unas enchiladas supremas y unas muy ordinarias.

Te paso la receta de las enchiladas verdes de mi tía Blanca que, dicho sea de paso, pertenecen a la categoría de supremas.

INGREDIENTES:
Para 2 personas

• 1/2 kilo de tomate
• 2 chiles jalapeños
• un manojo de cilantro (1 taza aprox.)
• 2 tazas de pollo deshebrado
• tortillas
• crema
• cebolla
• queso cotija (o el que prefieras espolvorear, mi tía usa manchego y doble crema)
• aceite de cocina

PROCEDIMIENTO

1. En una olla profunda, coloca el tomate, el chile y la mitad del cilantro. Cúbrelos con agua y añade un poco de sal. Hierve por 10 minutos o hasta que los tomates hayan cambiado de color
2. Retira el cilantro y pon en la licuadora los tomates, el chile y el resto del cilantro (fresco).
3. Licúa con un toque de knor suiza (caldo de pollo en polvo).
4. En una olla profunda, coloca un chorrito de aceite y colócala en la estufa a fuego medio.
5. Cuando el aceite esté caliente vierte el contenido de la licuadora y mueve. Si está muy espesa agrega un poco de agua.
6. Aparte, en una sartén plana y pequeña pon suficiente aceite para freír las tortillas. No se fríe hasta quedar como una tostada, sino únicamente es un baño de aceite rápido para que la tortilla soporte la humedad de la salsa.
7. Retira la tortilla frita y colócala en una servilleta absorvente.
8. Fríe de igual manera tantas tortillas como enchiladas desees.
9. cuando la salsa esté hirviendo y adquiera la consistencia deseada, apaga la lumbre.
10. Para hacer las enchiladas, debes de tener a la mano el pollo, el queso rayado y la cebolla.
11. Coloca una de las tortillas fritas en la salsa. Ayúdate con la cuchara de cocina para remojar bien la tortilla.
12. No dejes la tortilla remojando por mucho tiempo. Sácala de la salsa y colócala en el plato.
13. Ponle un poco de pollo y cierra la enchilada a la mitad. Puedes añadir un poco de salsa dentro y fuera de la enchilada para evitar que quede seca.
14. Repite los últimos pasos para preparar varias enchiladas.
15. Sírvelas con un poco de cebolla picada, crema y queso cotija. A mi no me gustan con crema, así que sólo les pongo queso y cebolla.

Como pudiste ver, es una receta muy sencilla. Es posible que la salsa no te quede perfecta al principio: si eso ocurriera no te desanimes, la salsa verde es difícil de dominar pero lo mejor es practicarla hasta que te salga como tu quieres.

Si la salsa te quedó muy picante no te preocupes, pues si la dejas reposar un rato, la acidez del tomate disminuirá ligeramente el picor del jalapeño.

Me encantaría ver cómo te quedaron estas deliciosas enchiladas. Mándame una foto o escribe un comentario.

¡Buen provecho!