El esbirro
Diputado G, te la han clavado, hasta el fondo, tienes un síndrome de Estocolmo que no puedes con él, quieres ser el best buddy del líder, y este te ha hecho creer que molas un montón porque solo tú tienes la gracia salerosa que se necesita para ser más casposo que una película de Pajares y Esteso.
Le haces el trabajo sucio para que él no se embarre. Y te creces en tu papel de esbirro, y rizas el rizo añadiendo dejes de Paco Martínez Soria aderezados con toques de Trump en esta era de posverdad.
Y mientras yo tecleaba esta gilipollez, se producía otro desgarro en mi vida.