101. El vino y el futuro. Parte I: La tecnología
Cuando pienso en el vino y el futuro imagino que a la par del redescubrimiento de métodos ancestrales de elaboración del vino también veremos más de lo que ya hay: drones para sobrevolar los viñedos, recipientes cada vez más precisos en temperaturas y uso de oxígeno para la fermentación y crianza, desarrollo de levaduras que aporten notas todavía más específicas a los vinos.
Tal vez también nuevos empaques y dispensadores, nuevas formas de acercarse al vino, de transportarlo y de compartirlo. Después de todo, la industria del vino sigue a toda marcha y dinero para investigación y desarrollo no debería faltar.
En lo particular, me parece tranquilizador que aunque en ese futuro vislumbro metales, medidores y otros dispositivos tiendo a pensar que difícilmente podrá desplazarse de una manera total esa imagen icónica de la botella con su tapón. Y adentro el vino.