Marisol Carrillo de Laboratoria para Washington: una aventura por el Banco Interamericano de Desarrollo.

Cuéntanos de ti Marisol ¿quién eres?

Soy Marisol Carrillo, amante del internet, de las herramientas digitales y todo lo bonito que se puede hacer con la tecnología. Desde el 2015 aprendí a programar en Laboratoria y ahora me dedico al desarrollo web combinándolo con mi otra formación como mercadóloga.

¿Cuáles son tus intereses y motivaciones?

Busco unir mis pasiones y habilidades para impactar al mundo positivamente, por lo que siempre me encuentro en constante aprendizaje. Pienso que la educación puede ser la solución a todos los problemas que ahora enfrentamos en el mundo. Empezando por mí, para mejorar profesionalmente como para alimentar las otras áreas de mi vida. Por lo que me verás invirtiendo mi tiempo, mis esfuerzos y mi dinero en cursos sobre tecnología, negocios, marketing digital, desarrollo humano, libros, eventos culturales y viajes.
Y todo el aprendizaje adquirido lo comparto a través de mi blog y redes sociales, esperando que a otras personas puedan serles de utilidad.

Antes de entrar a Laboratoria ¿qué hacías, a qué te dedicabas?

Tuve la oportunidad de estudiar una carrera universitaria y titularme (Relaciones Comerciales), pero después de eso, sólo conseguí trabajos de corto plazo e informales y/o con un sueldo muy bajo.
Estaba intentando hacer cosas por mi cuenta como freelance ayudando a administrar y generar contenido para redes sociales de algunos emprendimientos, pero noté que debía de seguir preparándome para mejorar e incrementar mis habilidades y poder brindar mejores servicios.

¿Cómo es que conoces a Laboratoria y qué te motivó para entrar a nuestro programa?

Todo empezó por curiosidad, yo era más una consumidora de tecnología. Comencé a aprender de manera autodidacta sobre marketing digital y fue hasta que creé un blog para mi, que descubrí que podía hacerlo a mi gusto con la ayuda del código.
Estuve buscando por un tiempo cómo y dónde aprender código y entonces vi la convocatoria de Laboratoria, que apenas comenzaban el programa en México. En Laboratoria buscaban chicas que quisieran aprender a programar y era justo lo que estaba buscando. Así que no dudé en aplicar, siempre me interesó la tecnología, sólo me faltaba un empuje para darme cuenta que esto realmente me gusta bastante.

Laboratoria me ha ayudado a potenciar mi vida profesional y personal, el código a transformado mi vida.

¿Ahora dónde estás trabajando, cuál es tu función?

Ahora me encuentro trabajando en el Banco Interamericano de Desarrollo, una organización financiera internacional con sede en la ciudad de Washington D.C. (Estados Unidos). Donde se trabaja para mejorar la calidad de países que buscan reducir la pobreza y desigualdad en América Latina y el Caribe.

Yo estoy en la Oficina de Relaciones Externas, en el área de comunicaciones estratégicas externas e internas del Banco. Todo lo relacionado con comunicación corporativa y posicionamiento: branding y desarrollo de contenidos.

Estoy específicamente en el equipo digital, que está a cargo de la migración del sitio web del Banco a una nueva tecnología y en la que además, proveemos a otras áreas del organización herramientas tecnológicas para difundir sus mensajes.

También trabajo como freelance y ahora me encuentro desarrollando el sitio web de noticias del Centro de Información de las Naciones Unidas en México.

Cuéntanos de tu viaje a los E.E.U.U ¿Cómo esta experiencia ha cambiado tu vida? ¿Qué descubrimientos sobre ti tuviste?

A lo largo de este viaje he descubierto que no era tan independiente como realmente creía. Aprendí que es importante aprender a hacernos cargo de nosotras mismas, porque eso nos hace más fuertes y más seguras. También a valorar todo lo que las personas que amamos hacen por nosotras. Me di cuenta que mi trabajo puede tener un impacto mucho mayor en el mundo.

Por otro lado, he podido alimentar esa parte de mí que siempre tuvo curiosidad por explorar otros mundos (porque cada lugar en el mundo parece otro mundo) y darme cuenta que hasta en un país desarrollado como Estados Unidos, siguen haciendo falta más mujeres en la tecnología y en áreas científicas.

Aún falta mucho camino por recorrer para lograr que aumente nuestra participación y es importante apoyarnos entre mujeres para lograrlo.

Es enriquecedor conocer personas de distintos países y culturas; y sobretodo me enriquece saber que tengo todas las posibilidades de soñar y hacer realidad esos sueños.

Si tú también quieres acceder a este tipo de oportunidades ¡POSTULA HACIENDO CLICK AQUÍ!